CAPÍTULO 97

1.3K 185 10
                                    

Al día siguiente.
7:06 a.m.

Todos bajaron de aquel taxi estando ya frente al aeropuerto. Los nervios incrementaban en cada uno de los tres menores pues nunca habían subido a un avión, no sabían a dónde ir o qué debían hacer primero pero, gracias a Kim, se sentían un poco más seguros.

- Tengo mucho sueño... -murmuró el azabache para después bostezar- pero, por alguna razón, me duele el estómago.

- A mi me sudan las manos. -Musitó Jimin riendo al final.

Por otro lado Yoongi sólo se mantuvo en silencio y con la mirada en el suelo. Sus brazos aún ardían y el sentimiento de querer llorar estaba presente, aún así, no quería demostrar eso, no cuando aquel otro alfa podía detectar lo que uno sentía con sólo verlo a los ojos.

Horas antes había discutido con su madre de nuevo pues esta estaba bastante furiosa por ver cómo su hijo se iba a otro lugar sin su permiso. Le había dicho que "no" desde el primer momento en que este le comentó sobre el viaje pero, lidiar con alguien de 23 años era más difícil; era obvio, ya no era un niño que podía manipular a su gusto.

Al querer salir de casa, ella sólo salió a lastimarlo y tratar de obligarlo a no irse. Muy en el fondo era... envidia. Sentía tanta envidia que su hijo pudiera vivir su vida tan libre o estuviera yendo a todo tipo de lugares mientras ella se quedaba en casa.

- Yoongi.

- ¿Eh? -levantó la mirada hacia Kim quien lo había interrumpido en sus pensamientos.

- Vamos por algo antes de subir al avión. Aún falta media hora. -Sonrió viendo el reloj en su mano.

Su mirada se desvió hasta Jimin quien ya se había puesto cómodo en aquella sala de espera junto con Jungkook pero, al ver cómo su novio le indicaba que fuera con él sólo asintió yendo detrás.

Al llegar a la cafetería pudo sentirse un poco incómodo. El roce de su sudadera hacía que arderá más aquello y no podía seguir fingiendo que nada pasaba cuando lo que más quería era estar sólo pero, no podría durante mucho tiempo.

- ¿Te gustaría un sándwich ó prefieres... una magdalena? -Preguntó viendo el menú.

- No se preocupe, no tengo hambre en estos momentos. -Respondió apenado.

Taehyung desvió la mirada hasta él y fue ahí cuando notó aquella leve mancha roja en uno de sus brazos pero sólo disimuló.

Sin esperar nada pidió algo para todos y al tener todo en manos, volvieron con los chicos, no sin antes dirigirse hasta el baño dónde Kim sin decir nada lo llevó hasta el lavamanos. Algo que fue bastante raro para el pelimenta.

- Dame tu brazo. -Pidió mientras buscaba algo en su pequeño bolso.

- ¿Hm? Por... -desvió la mirada hasta la manga de su sudadera notando aquella mancha- no se preocupe, es... ketchup, yo--

- Vamos, no tienes por qué mentir, dame tu brazo. -Pidió de nuevo sacando una pequeña caja color blanco.

Min sin decir nada sólo suspiró para luego abrir el cierre de aquella prenda para luego sacar uno de sus brazos dejando a la vista las heridas que su madre le había hecho pero, la que más sobresalía era aquella que no dejaba de sangrar pues... eso no había sido sólo con las uñas.

Kim al ver aquel brazo rápidamente lo tomó con cuidado para así comenzar a lavarlo y quitar toda aquella sangre seca. Se preocupaba tanto por la situación de Yoongi y no era algo reciente, desde que lo conoció por primera vez notó que algo en él no estaba del todo bien, muchas veces estaba con heridas y se cubría por completo, estaba más cansado de lo normal y... aquello no se veía que era provocado por él, de ser así... esos cortes estarían más cerca de la muñeca.

- Avísame si te duele, ¿bien? -Musitó Kim abriendo aquella caja blanca para luego sacar una crema que también funcionaba cómo analgésico.

- ¿Por qué... trae todo eso? -Preguntó curioso mientras observaba lo que el mayor le hacía.

- Por Jungkook -Soltó una pequeña risa- ya sabes lo hiperactivo que es y... muchas veces se ha llegado a lastimar. Se cae, se raspa, comienza a sangrar de la nada y todo eso.

- Tiene mucha energía... -sonrió levemente.

- Demasiada. Luego me tienes a mi con dolores de columna, cabeza y con la vista arruinada. -Rió logrando hacer que el menor también lo hiciera.

Yoongi ahora podía entender un poco más el por qué su amigo se había fijado en tal alfa. Dejando de lado su físico, él se comportaba cómo... un padre. Era evidente los problemas que Jungkook tenía en su familia pero, ahora veía mucho más que Taehyung encajó perfectamente en él y llenaba todos los huecos vacíos.

- Listo. En la noche volveremos a limpiar la herida, por el momento, si no quieres que vean las vendas, podrías ponerte una camiseta manga larga, de igual forma en Jeju no hay tanto calor en esta temporada. -Sonrió.

- Sí, gracias. -Musitó volviendo a colocar su sudadera.

- Ven, vamos antes de que comiencen con su mal humor por no comer. -Sonrió tomando las bolsas para luego posar su brazo alrededor del cuello adverso.

No iba a preguntarle qué sucedió. Él era bastante reservado y entendía que preguntas cómo esas, muy probablemente lo hacían sentir incómodo así que prefería sólo cuidarlo en lo que pudiera antes de meterse en su vida.

Al llegar con aquellos dos omegas, todos se sentaron de mejor forma en aquellos sofás para así comenzar a comer los pastelitos y las bebidas que había comprado. Fue ahí cuando todos sonrieron al ver que Yoongi finalmente tomaba un poco de comida después de unos cuantos minutos.

- ¿En el avión podremos dormir? - Preguntó Jungkook mientras colocaba una de sus piernas sobre las de su alfa.

- Puedes dormir en muchos lados, soy un experto en eso. -Respondió Min con una pequeña sonrisa.

- ¿Dormir? ¿Acaso no quieren ver el paisaje? -Preguntó indignado el pelirrojo.

- Uy si claro, vamos a ver el paisaje. -Habló sarcástico el menor- vamos a ver cuantos tipos de nubes y de cielo hay, ¿no crees?

Jimin frunció su entrecejo para luego sólo darle la espalda y abrazar a su alfa.

- Siento que soy el profesor guía en una excursión. -Rió Kim mientras acariciaba lentamente el muslo de su omega.

- Bueno, si eres profesor y si eres un guía, y sí somos tus alumnos. -Respondió el susodicho.

- Nadie a pensado en que... ¿qué tal si el avión se cae? -Habló Jimin preocupado- Me vi la saga entera de "destino final" y créanme que un avión es muy peligroso.

- Eso no pasará... ¿o si? -puchereó preocupado levantando la mirada hasta su alfa.

- Claro que no, cariño. -Susurró dejando un beso sobre su frente.

Todos siguieron hablando sobre diversas cosas mientras comían de aquella pequeña refacción hasta que el momento de abordar llegó.

Los nervios aparecieron de nuevo y también la emoción de subir a un vehículo que jamás pensaron tocar alguna vez en su vida.

Una nueva aventura se aproximaba para aquellos cuatro. Sin problemas, sólo diversión y descanso, todo lo que estuvieron anhelando durante mucho tiempo.

DON'T PLAY WITH THE TEACHER | OMEGAVERSE  +19Donde viven las historias. Descúbrelo ahora