DON'T PLAY WITH THE TEACHER | OMEGAVERSE +19

CAPÍTULO 99

11:15 a.m.

Jungkook observaba atento a su alrededor mientras seguía sosteniendo la mano de su alfa. Todos esperaban por sus maletas, algo que provocó que muchas personas se acercaran a ellos para también tomar las suyas pero  hubo algo más que no era tan agradable para el susodicho pues, todos volteaban a verlo debido a su aroma el cual nuevamente estaba un poco más fuerte de lo normal no obstante, entendía la razón.

Suspiró profundo y tratando de no ponerle atención e importancia a las miradas sólo se mantuvo detrás de su alfa y de sus amigos hasta llegar al taxi que los llevaría al hotel dónde ambos alfas charlaban entre sí.

Fue ahí cuando Jimin (quien se había dado cuenta de absolutamente todo desde que estaba en el avión) se acercó mientras buscaba algo en su bolso de mano para su querido amigo.

— Ten. —Musitó el susodicho mientras colocaba una pastilla en la mano del azabache—. Ayudará con tu aroma y... con el dolor.

— ¿Eh? Cual... ¿cual dolor? —preguntó apenado tratando de fingir que no sabía de lo que hablaba.

— Ah, Jungkookie... —rió pasando su brazo alrededor de sus hombros mientras mantenía la mirada en aquellos dos alfas quienes se encontraban subiendo las maletas—. Te conozco y sé que... esa no es tu forma de caminar, tu aroma es más dulce cuando... bueno, ya sabes. —suspiró— Ahora, lleva esa pastilla a tu boca y trágala con esto. —Extendió una botella de agua.

— Está bien... —sonrió— gracias por preocuparte.

— ¿Seguro que no te duele nada? Puedo arreglármelas con ese... salvaje. —Frunció su entrecejo mientras observaba a Taehyung quien conversaba con el conductor.

— Hyung, no seas vergonzoso, estoy bien. Nada pasó, ¿de acuerdo?

— Uy si, claro. —resopló— Ahora apúrate pingüino o nos va a dejar el taxi. —Acotó comenzando a caminar hasta aquel vehículo.

El azabache mantuvo su sonrisa para luego tomar rápidamente la medicina e ir hasta ellos.

Había sido vergonzoso que su amigo se diera cuenta pero, agradecía que él estuviera ahí. Era difícil que un alfa entendiera a la perfección a un omega y estaba seguro de que Taehyung ni siquiera se había percatado que estaba serio o sin tantos ánimos cómo de costumbre. Eso sucedía cuando estaba cansado, con hambre o cuando algo le dolía y sí, Jimin tenía razón.

______

Estando ya en el hotel, los cuatro fueron a sus respectivas habitaciones las cuales estaban un poco alejadas la una de la otra para no escuchar algo que sería vergonzoso para todos.

— No... ¿en serio pidió las VIP? ¿¡Para nosotros!? —Preguntó sorprendido Jimin viendo aquella tarjeta en sus manos.

— ¿No les gusta? Puedo cambiar--

— ¡No! —Respondieron ambos al unísono.

— Es decir... —suspiró— nos encanta. Muchas gracias, Señor Kim. —Sonrió.

— No me llamen así —se quejó— que les lleve 10 años de más no quiere decir que soy un señor. —Fingió molestia.

— Cierto... —musitó Min— es un anciano. —Bromeó soltando una sonrisa.

— Ah... —exhaló— bueno, al menos no parezco un pollito de colores. —Devolvió la broma.

Ambos alfas comenzaron a "tirarse insultos" mientras jugaban entre sí, algo que dejó muy confundidos a los dos adversos quienes los veían con una sonrisa. ¿Qué había pasado con ellos? El sólo poner un pie en aquel lugar los había hecho cambiar demasiado, incluso se veía en sus rostros que todos sus problemas parecían haber desaparecido en cuestión de segundos.

Los dos se comportaban cómo cualquier pareja de alfas que habían sido amigos por años. La edad no importaba y eso parecía ser agradable para los dos, mucho más para Yoongi pues al fin iba a tener a alguien que se comportara cómo el amigo que siempre quiso tener.

— Bueno, papi, vamonos a la habitación. —Interrumpió Jimin tomando de la mano a su alfa para así llevárselo al fin pues parecía que aquellos dos no iban a separarse nunca.

— ¿Le dijo...

— Bueno, vamos a la nuestra, ¿dónde es? —Habló Jungkook al fin mientras veía aquella tarjeta buscando el número de habitación.

— Jungkookie... —llamó mostrando un pequeño puchero— ¿Por qué tú no me dices "papi"? Acaso... ¿ya no me quieres? —Fingió tristeza mientras abrazaba al adverso por detrás.

— ¿Papi? —rió— eso no es lo mío.

— Pero... —suspiró— me gusta cuando me llamas así. ¿Por qué no lo haces?

— Ah... —rió levemente— porque... —pensó por unos momentos mientras veía el número de cada habitación buscando la suya— porque... —se detuvo— sé que si lo hago, no podré caminar probablemente durante una semana.

— ¿Y no te gusta?

— ¿Quieres ser mi papi esta noche? —Sonrió coqueto volteando hacía el mayor.

Taehyung pudo sentir su corazón palpitar mucho más fuerte y rápido, su sonrisa se hizo mucho más grande mientras podía sentir cómo su rostro se calentaba cada vez más debido al sonrojo. Estaba seguro de que si tuviera cola, estaría moviéndola mucho en esos momentos.

— Sí. —Respondió sin borrar su sonrisa.

— ¿Daddy puede hacerme suyo una vez más esta noche en el jacuzzi? Estoy seguro de que... será divertido, ¿no lo crees? —Musitó mientras acariciaba el pecho del adverso— Puedo dejar a Daddy jadeando y pidiendo que me detenga. —Susurró viéndolo directamente a los ojos.

— Uhm... yo... —tragó saliva sintiéndose un poco nervioso por la forma en que estaba actuando.

Sí, definitivamente esa palabra provocaba en él algo mucho más fuerte que era difícil de explicar.

— ¿Puedo hacer que Daddy me ruegue esta noche? Quiero que los demás también escuchen que eres mí alfa —acentuó— y que puedo tenerte gimiendo cómo ningún otro lo ha hecho. —Acarició la mejilla de éste.

Taehyung sólo podía sentir el calor invadirlo mucho más. Su lobo estaba cómo loco, sus feromonas se habían hecho más fuertes y las ganas de que ese omega lo "dominara" se hacían mucho más grandes.

Por otro lado Jungkook sólo mantuvo la sonrisa y sin decir nada más siguió caminando hasta llegar a su habitación dónde no tardó en adentrarse.

Su sonrisa era difícil de borrar en esos momentos. Su lobo estaba tan emocionado por lo que acababa de suceder. ¿Era posible que él se dejara dominar? ¿Un alfa? Sería bastante interesante de descubrir aunque, por suerte había empacado unas pequeñas cosas extra para poder divertirse.

Tan sólo esperaba que Taehyung no quebrara las lindas esposas que adornarían sus muñecas en unas horas más tarde.