☙Por favor, llama mi nombre una vez más❧

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Al levantar la campana y ver el platillo, comida no era... Son esposas y una pequeña fuente con chocolate derretido, se me pasaron mil y unas formas de usar aquellas esposas, me excitaba la situación.

-No me mires así nena.

--A qué juegas Shin?

-Déjame mostrarte, junte las muñecas preciosa que no podrás tocar...

Después de sus palabras levanté la bandeja de mis piernas y la dejé a un lado para girarme a donde se encontraba él, aún seguía de pie aun lado de la cama, gatee en su dirección y sobre mis rodillas me apoyé para quedar más a su altura.

Envolví mis brazos en su cuello acercando mi rostro al suyo, puedo sentir su respiración chocar en mis labios, no dejo de mirarlo a los ojos para lamer su labio inferior y luego morderlo lentamente mientras que con la punta de mis dedos acariciaba su nuca. Cuando dejé sus labios me acerqué a su oreja hablando en un susurro.

--Entonces juguemos...

Luego de que esas palabras salieran de mi boca lamí lentamente el lóbulo de su oreja hacia arriba, sentí sus manos agarrando mi trasero para luego levantarme de mis muslos y llevarme a la punta de la cama y quedar ambos de pie frente a frente.

Sus dedos acariciaban mis brazos lentamente de abajo hacia arriba, cuando llegó a mis hombros sus dedos fueron hacia mis clavículas y bajaron hasta mis pezones de manera suave acariciaba estos sobre la tela de la musculosa que yo llevaba sin sujetador, el roce me erizaba la piel, pero sus ojos nunca dejaron los míos.

Cuando dejo mis pezones sus manos bajaron a mi cintura donde me dio una mirada como si pidiera permiso para quitarme aquella prenda, mi cabeza asintió frágilmente. Sus manos agarraban la tela de mi ropa y retiró la prenda  hacia arriba para luego solo dejarla caer, su mirada abandonó mis ojos y se deleitó mirando mi busto, sus labios los humedece, nuestras miradas se vuelven a encontrar para luego el arrodillarse delante de mí quedando a la altura de mis caderas, sus manos acariciaban y apretaban suavemente mis caderas mientras su cabeza se alzaba buscando mi rostro.

Sus manos bajaron por mis piernas hasta llegar a mis tobillos, pero sus dedos hicieron el mismo recorrido por detrás de mis piernas hasta llegar a mi short que lentamente bajó, levanté una pierna y luego la otra para quitar aquella prenda.

                                                                                            .  .  .

Me encontraba desnuda a su merced solo con mi ropa interior puesta y él arrodillado frente a mi, me lanzó una sonrisa picara y de manera brusca me agarró las caderas para acercar mi pelvis a su rostro, mis manos se perdieron en su cabello mientras sentía su respiración sobre mi piel, cerré los ojos disfrutando el momento hasta que sentí como dejaba lentamente besos húmedos en mi abdomen bajando hasta llegar a mi ropa interior la cual tomó y dejó caer...