GIRASOLES [HYUNLIX]

Ⅺ

—Jeongin, terminemos —dijo Hyunjin detrás del guarda. El chico abrió los ojos, casi a punto de desmoronarse. Vio en sus ojos decepción, desprecio, odio, rechazo... Miles de sentimientos de este tipo se encontraban en el corazón de Hyunjin en ese momento—. No pensé que ibas a ser así —confesó el mayor—. Tú de verdad me gustabas, pero no de esta manera.

—Hyunjin, ¡he cambiado, lo juro! —chilló el menor—. ¡Jinnie, no te vayas! ¡No me dejes!

—Jeongin, solo vine para decirte esto. Lo siento si te he herido, pero esto tiene que acabar ya —el más alto se dirigió a la salida del cuarto, con el guarda detrás y dejando al menor solo de nuevo.

—¡¡JINNIE, NO ME DEJES!!

Y la puerta se cerró.

Fue ahí cuando recordó las palabras que Jeongin le dijo en un pasado: «Es por eso que está ahí arriba. Él es inalcanzable.» Fue en ese momento en donde se dio cuenta, esas palabras decían que él perdió a su padre desde temprana edad. Posiblemente, él ahora era así por aquella pérdida, Jeongin era así de posesivo y manipulador porque tal vez no quería perder a otra persona especial en su vida.

Sí, era eso. Pero no podía compadecerse de él. Jeongin se había pasado y él mismo debía darse cuenta. Después de eso, Jeongin encontraría a otra persona para amar y ser amado, y ese no iba a ser Hyunjin.

Pero ahí estaba, de nuevo, en la misma cama con Jeongin. Nunca pensó que después de enterarse que había salido del centro psiquiátrico volvería a hablarle, y mucho menos acostarse con él.

Debió haberle dicho a Bang Chan sobre Jeongin el día en el que lo conoció, pero por alguna razón no lo hizo.

—¿En qué tanto piensas, mi amor? —preguntó el pelirrosa.

—Ah, en nada.

—¡Estás pensando en Felix, ¿no es así?! —exclamó él.

—¡¿Por qué metes a Felix en todo momento?! ¡Jeongin, ya te he dicho que no siento nada por él! ¡Solo siento cosas por ti!

—¡Eso es mentira! ¡¿Crees que no lo he notado?! ¡Gemiste el nombre de ese chico mientras me follabas! ¡Gemiste "Oh, Felix"!

—¡No te inventes cosas! Seguro que escuchaste mal.

El menor se quedó callado. Respiró hondo y se levantó de la cama, yendo hacia el baño.

—Voy a bañarme —dijo, y la puerta del baño se cerró.

Hyunjin no se movió ni un pelo, sujetaba su celular y se mantenía en silencio, lo único que se escuchaba era el agua que empezaba a correr por el cuerpo del menor y un terrible "tic-tac" del reloj, eso lo inquietaba demasiado. Al rato, Jeongin salió, agarrando su ropa y poniéndosela para salir de la casa del mayor.

—¿A dónde vas? —preguntó el morocho.

—Voy a ver a Chan.

—No juegues con él.

—No lo hago, él todavía no sabe nada de que me acuesto con otros —sonrió con confianza el pelirrosa.

—¿Por qué le haces eso?

—Porque él es importante en mi vida.

—No lo es, solo estás jugando con sus sentimientos.

—Oye, Jinnie —Jeongin se acercó al mencionado—, si me entero de que Chan sabe sobre esto, estoy seguro de que no te gustará lo que le pase a Felix —. El mayor se paralizó en el sitio—. Tampoco me hará gracia que te acuestes con él, si quieres, te dejaré verlo... una última vez, ¿no iban a ir a un lugar esta mañana? —sonrió y cerró de un portazo.