Experimento 3308

Necesito tu ayuda

Llegamos donde estaba Toño, abrimos la puerta y vimos que él y la otra persona que salve hace tiempo hacía atrás. Ambos se voltearon y cuando me vieron y me ayudaron, cargan a mi compañero y lo dejan en una cama, le conectan un aparato de hospital, está bastante grave, está sudando y está hirviendo en fiebre; mi "novio" estaba debilitado, pero se recuperaría y se curaría solo, no era grave, por suerte, fue un simple rasguño.

- ¿Cómo están? – Toño me miró preocupado.

- la persona que estaba cargando está grave, alguien lo enveneno y conozco ese tipo de veneno.

- si, fue tú amigo, la persona que te conseguía la tecnología.

- Manuel... - él se quedó callado.

- ¿Lo puedes curar? Dime que sí.

- si lo puedo curar, por el momento detuve el veneno, ya no puede avanzar más por su organismo, pero eso no significa que está fuera de peligro, le di un par de minutos.

- ¿Cómo lo podemos curar? – lo miré preocupada.

- sí, pero no te va a gustar.

- no me importa, no me gusta estar aquí, pero aun sigo aquí, entonces, solo dime que hacer y lo hago.

- tienes que bajar – yo me quedé sin palabras, no sabía que decir – te voy a explicar algo, está cosa tiene varios pisos y yo vine del piso de abajo, tenía unca casa y unos cuantos experimentos.

- ¿Qué tengo que recoger? – él se quedó pensativo.

- todo lo que puedas, todo, toma esto – me dio una bolsita – intenta no dejar nada, necesito de todo.

- y ¿Cómo voy a ir allí?

- sígueme, te voy a enseñar algo – él empezó a caminar y yo lo seguí – tengo un mapa de eso, pero no sé dónde lo dejé – vi al televisor ahí y vi que había un chico pelirrojo muy alto, un chico peli café y ojos azules y por último un chico con pelo morado y con gafas.

- ¿Qué están viendo? – él miró un poco al televisor.

- no sé, pero es una buena serie, muy buena.

- ¿Cómo lo ven? ¿Tienen un DVD? – él se río.

- no, encontramos un celular, lo único que tenía era está historia adentro, había descargado las historia, lo único que hice fue conectarlo al televisor y ya – él abrió un pequeño cajón – aquí está – él agarró un pequeño cuaderno y me lo paso.

- ¿De dónde salió esto? – lo abrí y vi dibujos, un mapa hecho a mano, había varios puntos.

- estamos al final de la página – vi la última página – donde está el circulo en lápiz.

- ¿Cómo conseguiste esto? – él sonrió.

- yo lo dibujé, el lápiz lo conseguí en alguien muerto, igual que la libreta.

- adivino que primero tendré que ver la última hoja y luego voy bajando hasta llegar a la primera.

- chica lista, ahora ve para allá y cuidado, todo esto es horrible y ve lo más rápido, tú amigo te necesita.

- y ¿Mi novio? ¿Estará bien? ¿No es grave? – él me abrazó.

- tranquila, no te preocupes, está normal, no necesita más que un descanso y estará mejor, puedo vendarlo y eso lo ayudará un poco.

- hazlo que puedas, cuídalo y no dejes que muera y no dejes que ese amigo tuyo lo toque.

- voy a hacer lo mejor, pero ten cuidado y toma esto – me dio un tomate – para el camino.

- gracias, gracias por todo.

- no es nada, tú me ayudas y yo te ayudo, tu consigues todo eso y yo salvo a tus amigos.

- trato hecho.