Abrí los ojos, había mucha luz que me molestaba, puse mis manos enfrente de los ojos para ver donde estaba. Me sentí cansada, pero el dolor desapareció. Tardé unos segundos para recuperar la vista, miré que estaba en una cama acostada, no sabía que pasaba, tardé unos segundos en recordar lo que había pasado. Lo primero que pensé que había muerto, pero descarte está idea y me reí, decía que eso no puede pasar, pero ciertamente no la solté del todo, por suerte escuché la voz de mi "novio" y ahí me convencí que por suerte estaba viva. Aunque en este lugar vivir es casi lo mismo que morir, la muerte sería algo no tan malo. Intenté levantarme, pero don Toño entró y me detuvo.
- no hagas esfuerzo, te lastimaras – yo lo miré y él sonrió – estabas muy herida cuando te vi.
- y ¿Cómo estoy ahora doctor? – él se río un poco.
- mejor, aunque no diría que mucho, pero sobrevivirás.
- ¿Qué tengo? – él me miró preocupado.
- la herida de tu cabeza ya no es un problema, le puse puntos, estás sana, pero tu costilla izquierda está destrozada y pueda que te hayas lastimado algún otro hueso, pero no sé con exactitud.
- ¿Qué se puede hacer? – él no dijo nada y yo me empecé a preocupar.
- esperar, se va a curar solo, pero te tienes que quedar quieta.
- lo que significa que no es una opción ¿Hay algo más? – él no dijo nada, ya sabía la respuesta – gracias por intentarlo.
- no fue nada, pero podemos intentarlo.
- tal vez, pero necesitamos hacer algo primero – él me miró confundido.
- ¿Qué tenemos que hacer primero?
- salir de aquí, tenemos que robarle la llave a mil y esperar que tenga ambas manos.
- ¿Acaso el golpe de tú cabeza te dejó con tornillos sueltos? ¿Cómo vamos a hacer eso? Tiene muchos hombres a su disposición, un ejército, a mi viejo amigo y torretas en el techo.
- fácil, vamos a reunir personas.
- ¿Quiénes? – yo sonreí.
- primero, la hermana de mi novio, la chica de las motosierras.
- ¡Estás loca! – su expresión me soltó una risa.
- quizás, pero es nuestra única esperanza para salvarnos, pero no solo ella, necesito todos los monstruos.
- ¿Cómo quieres los vas a convencer a que se unan a ti? – buena pregunta.
- pues, la hermana de mi novio, no sé, eso será el trabajo de él, a la cosa grande y una amiga que hice, es bastante curiosa y nos puede ayudar mucho, con ella puedo contar.
- ¿Cómo harás que martín se una a nosotros? - ¿Martín? Yo no dije nunca ese nombre.
- ¿Quién es Martín?
- así le puse al monstruo gigante, como tú lo llamas.
- pues es fácil, no le diremos que se una, simplemente vamos a llevarlo donde están ellos con el ruido, sabemos que le molesta y lo intenta callar – don Toño sonrió.
- claro, así lo usamos para romper las paredes y todos se asustarán, ruido y va a empezar a atacar a todo, pero ¿No habrá personas inocentes? – yo lo miré.
- quizás sí, quizás solo haya personas que quieran sobrevivir, pero tenemos que salir de aquí y mil no nos lo va a dejar tan fácil, lo sé, además si se quedan con él después del plan de mil, ya no son inocentes.
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Experimento 3308
HorrorMe levanté de mi cama, me dolían los oídos y la luz me lastimaba los ojos, algo muy raro pero que yo no le tomé importancia. Yo era perezosa así que volví a la cama, pero noté que está era muy fría, así que me levanté rápida de ella y me caí. Abrí l...