Capítulo 11

438 92 70
                                    

Jungkook

Mierda.

Solo han pasado algunos segundos de la canción y mi piel esta completamente erizada. Basta con el primer acorde, para notar la calidad con la que se esta tocando el instrumento y francamente estoy embobado.

He olvidado muchas cosas de Jimin, la memoria no es tan fiel y segura como solemos creer o nos lo suelen vender. Muchas veces nuestros recuerdos se nublan, mas que todo cuando eramos pequeños... lo que nos deja con solo una imagen desdibujada y a veces equivocada de lo que solía pasar en el pasado.

Recordaba que a Jimin se le daba bien la guitarra, pero joder, lo que estoy presenciando es una autentica locura. Sus manos tienen talento, demonios, y sé que no soy el único que esta impresionado cuando veo a Taehyung mirando al rubio con ojos desorbitados.

De hecho cuando llega la parte del bajo, Yoongi se une a duras penas mirando a Jimin sorprendido y en la entrada de la batería, Tae esta tan absorto en Jimin que no toca y se pierde por completo el ritmo de la canción deteniéndola abruptamente.

— Espera, espera, espera — niega con la cabeza Taehyung poniéndose de pie — ¿Qué demonios fue eso?

— ¿Así de mal lo hice? — pregunta Jimin rascándose la nuca mientras sonríe un poco intimidado mirando sus manos.

— Tienes que estarnos jodiendo — digo en alto incrédulo, atrayendo su atención. Jimin enarca una ceja en mi dirección sin entender.

— ¿Estas loco? Lo que acabas de hacer es- — comenta Yoongi boquiabierto sin poder terminar la frase — Han pasado solo como 15 segundos y...

— No les estoy entendiendo una mierda — responde Jimin con una sonrisa forzada que me hace carcajear.

— Lo que queremos decir es que tocas genial, bueno... quizás es una estimación arriesgada puesto que solo te hemos escuchado solo unos segundos, pero — me rio — así de bien lo haces que has dejado a Tae atontado.

— Bueno... a ver — me responde Tae levantando las manos — Simplemente no me esperaba algo tan bueno, ¿vale? No recordaba que fueras tan — sus manos hacen una cosa rara inentendible — O sea... dios santo, ahora eres super cool ¿qué le hiciste a nuestro Jimin? — el halagado y a la vez insultado se dirige a la dirección de mi amigo y le golpea el brazo haciéndolo gritar.

— Siempre he sido genial — dice levantando su menton — Bueno... ¿vamos a tocar? ¿O van seguir mojando sus pantalones por verme? — pregunta presumido, y no se me escapa la sonrisa orgullosa en su rostro.

Vale... Este Jimin parece ser una caja de sorpresas.

Taehyung rueda los ojos pero sonríe mirando a Jimin y veo el afecto bailar con intensidad en sus ojos cuando indica el comienzo de la canción con sus baquetas sin despegar sus orbes de Jimin.

Y en esta ocasión no le puedo culpar, porque yo hago exactamente lo mismo. Ver esas pequeñas manos hacer maravillas con mi guitarra es jodidamente agradable y reconfortante, porque una guitarra de ese porte y estilo debe ser tocada por talento puro y apasionado. Y cuando veo a Jimin tocar es en todo lo que puedo pensar. 

Cuando llega el momento en que debe cantar, lo ejecuta de forma limpia y confiada, su voz mas dulce da un toque mas melodioso y pasivo a la canción, sin embargo la forma en que toca la guitarra hace un contraste absoluto. La canción se aprecia mas romantizada pero su forma de rasgar las cuerdas sigue manteniendo la energía dura de la música. Su cuerpo entero se agita al ritmo de la canción y cada vez que mueve su cabeza su cabello rubio cae por sus rasgos como una llovizna dorada y me sorprendo detallándolo tanto.

Modoru 戻る KOOKMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora