Recuerdo Nuestro Primer Amor

Capitulo 17

Narra Usheret Carrasco 

Nos separamos y no pude ni ver o saber cual fue su reacción porque salí como una gallina, en mis adentros dije <<Patitas para que te quiero>>, llegue donde ya todos se encontraban un poco ebrios y eso hizo recordar mi mareo.

Siento que alguien me toma de la cintura, y estaba rezando para que no fuera "EL SEBAS", si ya le puse un apodo ¿A poco no suena col?- Te estaba buscando-Y supe que no era él si no Nick-Hola...Este...Bueno, es que salí a tomar aire fresco-¿Estas bien? Porque la verdad te ves un poco piripi-¿Piripi? ¿Qué es eso?-¿Si estas borracha?-Ah supongo que sí, me voy a casa-Me estaba guiando a la salida cuando pregunte-¿Qué hora es?-Son las diez de  la noche-Al segundo que dijo eso, me puse rápidamente consiente de que mi papa me había dicho que me quería a las diez y media de la noche y no creo que llegue a tiempo, ya estando afuera veo que se encuentra la moto de mis sueños-¿De quién es la moto?-Él me ve un poco sacado de onda-Es de Sebastián-Y sin más preámbulos y con la vergüenza todavía encima  por el acontecimiento que ha pasado hace diez minutos y dieciocho segundos, iba a su dirección para pedirle de favor que si podría llevarme ha casa, pero como soy la señora de la torpeza, me caí y tumbe a alguien que se encontraba enfrente de mi y dada la casualidad de que se trataba de mi novio en un mundo paralelo y que en este mundo solo era un conocido más.

-¿Te encuentras bien Usheret? Te estaba buscando-Este...Yo, ¿Puedes hacerme un favor?-Claro, ¿De qué se trata?-Es que debo de llegar a casa en menos de treinta minutos y supe que tienes una moto más bien tienes la moto de mis sueños-¿Quieres que te lleve a casa?-Pregunto al momento que se lo estaba a punto de decir a lo que solo asentí, tomo de mi mano y me llevo hasta su moto y ahorita que me dirijo a casa en una moto que soñaba más el chico del parque, supongo que en mi otra vida debí de portarme muy bien como para que Dios me premiara con todos estos acontecimientos.

Le dije a donde vivía y me dejo enfrente de mi casa bueno de la puerta de mi casa, me baje pero antes de entrar...
-oye llorona-Volteo indignada por tan feo apodo-¿Qué paso taradupido?-Se acerco hacia mi, tomando mi mano-Gracias por el beso, hoy podre soñar realmente con los ángeles-Me puse un poco sonrojada-Ah que bien, ¿yo pregunte si ibas a soñar bonito? Chiflado-Soltó una risotada y al siguiente movimiento solo me abrazo y me dio un beso en la mejilla deseándome las buenas noches.

Entre a mi casa y vi a mis padres que estaban espiando en la ventana, ahora ya saben con que preguntas salieron y cuando termine de contestarlas me quede pensando en una canción que en verdad me identifique. 

Y poco a poco me quede dormida (Usheret esta soñando).

Hace 13 años.

-Mamá Usheret esta muy frágil-Pregunto mi hermana mayor Dafne, yo solo tenia cinco años y ella diez-Todo va a estar bien-Así es cuando nací era una niña que tenia una enfermedad mi corazón en cualquier momento podía dejar de funcionar-Mamá ¿Usheret qué necesita para sanar?-Un corazón, necesita un trasplante del corazón para poder vivir-Yo me encontraba dormida porque había sufrido un pre-paro cardiaco y por eso me encuentro en urgencias -Mi mama lloraba con Dafne pero papá no se escuchaba pero lo sentía.

Mi mama y mi hermana se iban a  ir a casa para poder descansar pero cuando alguien llora mucho a veces ocurren los accidentes y eso fue lo que paso, hubo un choque, mi mama salió un tanto herida pero mi hermana fue la que recibió todo el golpe, llegaron al hospital y la últimas palabras de mi hermana Dafne mi héroe fueron-"Mama si...si  muero-Pauso un poco- quiero que mi corazón se lo den a Usheret, eso hacen las hermanas mayores, morir para vivir y hacer vivir a su mayor responsabilidad y felicidad eso me enseño papa"- y al día siguiente en la mañana murió porque sus pulmones no aguantaron, esa misma mañana yo pude tener mi trasplante de corazón y seis años más tarde me entere de todo, por eso trato de vivir lo que ella nunca pudo hacer, vivir para que ella pueda vivir.

Ese es mi mayor secreto.