Capítulo 37

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8 de noviembre de 2021
Aeropuerto de la Ciudad de México.

Las despedidas eran algo que no le agradaban a Ángela, habían salido temprano del hotel ese día para ir al aeropuerto a tomar su vuelo, no podía dejar de abrazar a su madre. Pese que ambas tenían que abordar ya sus vuelos, Ángela no quería dejar ir a su madre con Samantha. Mientras que Angie volaría hacia Brasil al próximo Gran Premio, Sonia y Samantha volaban de vuelta a Yucatán, Samantha pidió unos días y se quedaría con la madre de su amiga a pasarlos antes de volver al trabajo.

— Te prometo que cuidaré bien a la tía Sonia — dijo Sam consolando un poco a su amiga — vamos a perder el vuelo, cariño...

— Sam me hará compañía hasta el miércoles, tienes que dejarme abordar ese vuelo — mencionó Sonia riendo un poco — en un mes y medio te veré, Angie, lo prometo.

— Es que te voy a extrañar mucho — respondió la chica haciendo un puchero — cuídate mucho, mamá...

— Así será, lo prometo, déjame despedirme de Carlitos...

Ángela asintió y se despegó un poco se su madre. Carlos se acercó hasta la madre de su novia abrazándola fuertemente.

— Muchas gracias por haber venido a apoyarme — dijo el madrileño — espero que puedas acompañarme más seguido, me sentí muy bien con ustedes aquí... con mi segunda familia.

— Gracias a ti por haberme invitado, cariño — agradeció Sonia — te encargo mucho a mi niña...

— La cuidaré muy bien — Carlos se giró hacia Sam para despedirse de ella — cuídate mucho, Sammy, nos vemos pronto...

— Nos vemos, Carletes, gracias por todo.

Sonia se acercó para darle un último abrazo a su hija y caminó junto con Sam hacia la puerta donde le indicaron que abordará su vuelo. Carlos al percatarse que su novia estaba llorando, se acercó a ella para abrazarla.

— Un mes y medio se va de volada, mi amor — dijo el para después dejar un beso en la cabeza de la chica — no me gusta verte llorar...

— Es solo que no me gustan las despedidas — respondió Angie sollozando.

— Lo se, cielo, ya verás que dentro de poco volverás a estar con Sonia.

— Lo se, guapo — asintió ella animándose un poco más — vamos a abordar nuestro vuelo...

— Vamos, preciosa.

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9 de noviembre de 2021
São Paulo, Brasil

El día anterior por la noche habían llegado los chicos de Ferrari junto con sus novias a Brasil al igual que Max junto con su novia Kelly y su hija Penelope, las chicas habían quedado en verse al día siguiente para pasar la tarde en la alberca.

Ángela junto con Patricia y Kelly se juntaron por la mañana para desayunar juntas y posterior irse a tomar el sol un rato en la alberca del hotel donde se hospedaban. La pequeña Penelope — que las acompaño solo para desayunar — la llevo su madre a la guardería del hotel para que jugara con otros niños en lo que su mamá pasaba una mañana con las chicas.

Los pilotos habían tenido reunión con sus ingenieros por lo que quedaron en alcanzarlas más tarde en el lugar. Todo pintaba a que su mañana y parte de su tarde sería de chicas, algo que estaba bien para ellas.

— Extraño a Penélope — soltó Ángela sonriendo con los ojos cerrados aún — y también a mi novio, se me hizo raro que Mattia nos diera el día a nosotras, normalmente tenemos más trabajo que ellos...

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