Yellow

Capítulo 9

1 de mayo de 2021
Portimão, Portugal.

Ángela estaba en su cuarto del hotel, por instrucciones de médicas se había quedado a descansar, había cogido un resfriado y estaba un poco mal, le administraron algunos medicamentos y le habían recetados otros para disminuir los síntomas de la enfermedad.

Patricia había pasado muy temprano para ver que tomara su medicación que le recetaron y comiera algo. Después de asegurarse de ello, se fue rumbo al circuito para cumplir con las tareas que Ángela le había encomendado.

Con Carlos las cosas estaban un poco tensas, había tomado distancia para evitar la molestia de su novio, pero con lo que no contaba era que la indiferencia del piloto le dolería mucho. Le frustraba mucho, porque los sentimientos que tenía por el piloto se estaban haciendo más y más fuertes.

Su madre le había hablado apenas se enteró que estaba enferma.

— Si, mamá estoy perfectamente bien — sonrió mientras negaba con la cabeza — Mattia trajo un buen doctor y ya estoy tomando la medicación y hasta me inyectaron. Me dio mucha vergüenza cuando pegué de gritos.

Sonia carcajeó por el teléfono.

— Si pudieras comprarte algún te de jengibre, se que eso te hará bien — aconsejo a su hija — si estuvieras aquí ya te hubiera preparado uno.

— No seas exagerada. Hablemos de otra cosa.

— Bueno, cuéntame, ¿que tal va todo con Julio?

Ángela frunció el ceño y suspiró.

— ¿Quien de los dos pajaritos te dijo? — cuestionó.

— Soy tú madre, no una extraña, algo me dice que no todo es color de rosa... ¿me quieres contar?

La mexicana suspiró nuevamente.

— Estamos atravesando algunos problemas... nada de que preocuparse.

— ¿Problemas?

— Salieron unos artículos que decían que tenía algo con Carlos Sainz.

— Los vi, que muchacho tan apuesto, me recuerda a un príncipe de Disney.

Ángela carcajeó, a ella igual se le asemejaba a un principe. Carlos tenía ese porte, tenía el poder de cautivar a cualquier chica que deseara.

— Bueno, pues se puso como loco, ya van varias semanas que todo está así.

— Yo soy una fiel creyente que si algo ya no te acomoda... lo deseches. Y no en el mal sentido o algo así — dijo en tono suave — ¿lo sigues queriendo?

— Mamá...

— No, corrijo mi pregunta: ¿algunas vez lo quisiste?

— Lo quiero mucho, es un gran chico y...

— Corrijo, ¿lo amas? — preguntó su madre sin rodeos — ¿lo ves como... hombre? Y sabes a lo que me refiero con eso.

— Hay mamá por dios, ¿que me estás preguntando? — respondió apenada.

— Ángela Sandoval, yo te parí, no me vengas con pudor y pena a estas alturas —  la chica carcajeó al escuchar eso — ¿y bien? Espero una respuesta. 

— No, creo nunca lo he querido de esa forma.

Su madre quedó en silencio unos momentos.

— Sabes, ahorita que estamos siendo sinceras y estamos teniendo una buena platica madre e hija — Ángela alzó las cejas divertida — nunca platicamos de ese viaje que hiciste hace dos años... te fuiste emocionada por ahogarte en alcohol y fiestas y... llegaste... diferente.