¨21: "Alerta de chico malo"¨

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CAPITULO VEINTIUNO:

CLARA


Al parecer me gustaba un géminis.

Y no había tenido idea de esto, porque Collin no parecía querer decirme cuando era su cumpleaños. Y no sabía porque no quería que supiera de ello... era extraño.

—No es necesario —murmuró, negando con la cabeza. —Solo debes saber que soy géminis, y que nuestra compatibilidad en el amor es la mejor. Somos de las mejores parejas del zodiaco, eso lo sé.

Le di un golpecito en la frente, negando con la cabeza.

—Vamos, falta poco para volver a la escuela y no quiero dejar sin celebrarlo... ¿Eres de mayo o junio? Dame una pista, ¿por favor?

Collin negó sonriente, mientras continuaba comiendo de su helado.

—¿Qué tal una competencia? ¿eh? —le pregunté, entrecerrando los ojos en su dirección. —No seas aguafiestas...

—Nuestra relación no se basa en competencias, futura esposa ¿vale? Así que no, nada de competencias.

—Eres un fastidioso..., y te odio —le dije, negando con la cabeza. Collin se lanzó sobre mí, besándome el rostro y llenándolo de baba. —¡Iugh! Quita, quita.

—Me quieres y yo te quiero —me dijo, lamiéndome la mejilla como un cachorro. Solté una carcajada al sentir su lengua en todo mi rostro. —Eso es más que suficiente, así que no necesitamos una fiesta de nada.

—Pero..., yo quiero una fiesta —le dije, haciéndole ojitos. Collin negó con la cabeza, haciendo un esfuerzo por no caer en mis encantos, lo cual era imposible. —¿Por favor?

—No es justo que me hagas esa carita, es trampa...

—La vida no es justa, fastidioso aburrido. Dime, ¿Mayo o junio?

Collin resopló quitándose encima de mí. Me gustaba cuando ambos hacíamos las tareas juntos o cualquier cosa que tuviera que ver con la escuela, porque nuestras competencias aumentaban y el tiempo juntos también. Aun no sabía que decisión iba a tomar Collin, pero, sabía que cualquiera que fuera su respuesta estaba con él. Y lograríamos hacer todo.

Ahora mismo habían empezado las vacaciones, donde podíamos disfrutar de un poco más de mes y medio sin escuela, ni trabajos. Para graduarnos casi al final de agosto. Y eso me ponía un poco nerviosa, pero, ahora estaba enfocada en descubrir la fecha de cumpleaños de mi novio.

Ya podría sobre pensar todo eso de la escuela y graduación en unos días. Ahora estaba enfocada en saber su cumpleaños.

Me incorporé, alisándome el vestido y tomando mi cuaderno con algunos apuntes del último tema visto en clase. Collin se pasó la mano por el rostro, mientras miraba fijamente al techo.

—¿Por qué no quieres que sepa la fecha? ¿Temes que te de un terrible regalo? —le pregunté, fingiendo una broma. Solo que no funcionó en nada, porque seguía tendido en la cama. —¿Collin?

—Nunca me han hecho una fiesta de cumpleaños..., es por eso —dijo en un susurro. Me quedé completamente quieta al no saber que hacer... pero..., ¿Cómo era que no había tenido una fiesta de cumpleaños? Yo había tenido una en cada año, y aunque cuando fui creciendo me causaba algo de vergüenza... terminó por gustarme. No solo celebrar otro año, era más por las personas que estaban junto a mí.

Posiblemente cursi, pero, así era yo. Una chica cursi y rosa

De hecho, mis fiestas favoritas habían sido todas en donde Collin había estado. Y eran muchas, porque el hecho de que fuéramos compañeros desde pequeños... en pocas palabras para mis padres —al menos— es que era mi amigo. Y bueno, obviamente la Clara de pequeña no solo lo quería de amigo... pero, eso era otro tema.

FOR YOU: Por tiempo indefinido ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora