"Qué equivocado estaba, deseando ser el aire de quien no quería respirar..."
— Freddy Jiménez
En la cama de la habitación, un hombre de cabello negro azabache, tez blanca y ojos oscuros como la noche. Estaba sumido en una tristeza profunda, una decepción que su corazón ya no podía soportar.
La persona a la que más amaba, en quien más confiaba y a quien se había entregado en cuerpo y alma, lo había traicionado...
Inmerso en sus pensamientos, no se percató de la entrada de su hermano menor a la habitación, preocupado por él.
— Nii-San, traje lo que me pediste – dijo el menor –.
— Déjalo en la mesa, por favor. Gracias, Izu – respondió sin ánimos –.
— Cualquier cosa, llámame, ¿de acuerdo? – el mayor asintió y el menor salió de la habitación –.
Sin ánimos, se levantó de la cama y se dirigió a la bolsa que su hermano le había traído. La abrió y sacó una caja, luego fue al baño y siguió las instrucciones del paquete.
— ¿Qué estoy haciendo con mi vida? – se preguntó a sí mismo, visiblemente desorientado – ¿Dónde está el Madara orgulloso? ¿Dónde se fue el Madara que todos temían? ¿Qué me ha pasado?
Pasaron los tres minutos más largos de su vida. Quería ver el resultado, pero tenía miedo. En esa prueba se encontraba su futuro, marcado por algo que no sabía cómo iba a manejar. Reunió valor y decidió ver el resultado. Quedó sorprendido al ver dos líneas rojas. Agarró la caja y se dio cuenta de que eso significaba un resultado positivo. Estaba embarazado...
En ese momento, Izuna entró de nuevo a la habitación y vio las luces del baño encendidas. Se acercó y entró, encontrándose a su hermano con la mirada perdida.
— ¿Cuál fue el resultado? – preguntó Izuna –.
— Izuna, ¿qué voy a hacer con un niño? - respondió el mayor, con evidente desesperación – ¿Qué voy a hacer ahora? – se colocó las manos en la cabeza con frustración –.
Estaba perdido. La aldea lo despreciaba, no le agradaba al consejo y Hashirama se casaría por obligación... Incluso llegó a pensar en algo que había estado planeando desde hace tiempo... No tenia de otra...
— Izuna - lo miró fijamente - me voy de la aldea.
— ¿Qué? – respondió sorprendido el menor –.
— Me voy de aquí. No quiero que mi bebé nazca en un lugar donde su madre es despreciada, y probablemente él también lo será. No quiero eso, ¿está bien? – desvió la mirada – Tú quedarás a cargo del clan.
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¿Por qué lo escondiste?// HashiMada
Romance" No hagas con el amor, lo que hace un niño con su globo, que al tenerlo lo ignora y al perderlo llora." - Pablo Neruda. holi vengo con nueva historia, no será tan larga es un proyecto que llevo rato planeando. La historia es enteramente mía excep...