Estar marcado es un tema serio en el que Usa piensa mucho, cada tanto considera marcar a su novio pero de inmediato vuelve entre sus pensamientos y se da cuenta de que aún son muy jóvenes.
No era como el casamiento, que también es algo muy serio que le gustaría llevar a cabo en cierto punto con Fil, pero eso es reversible si en algún momento alguno de los dos quisiera divorciarse, sólo son papeles.
Pero una marca, una marca era más que eso, es una forma en la que sus lobos se pertenezcan entre si, es como un voto de por vida en el que se prometen amor eterno. Le da miedo.
No es como que sienta que puede dejar de amar a Fil, no cree nunca parar de adorarlo, pero ¿Y si lo hacía? ¿Y si Fil se cansa de él? No habría forma de cambiar las cosas, estarían atados para siempre. Le teme a obligar a su novio a tener que amarlo para siempre incluso si este no quiere en algún momento.
Esa es la razón por la que no sabe si en algún momento piensa marcar a Fil. Por eso es que le agrada la idea de que este sea un beta, no tendría que tomar esa decisión, no tendría que marcarlo porque no puede.
No quiere decepcionar a Fil.
Pero cambiando de tema y ahuyentando los pensamientos peligrosos que pueden terminar en preocupaciones banales, fue a la cocina al escuchar el llamado de su madre.
Oh, pero lo de alejar las preocupaciones murió tan pronto como se lo planteó porque junto a su madre estaba una preocupación de la que pensó haberse encargado.
Argentina, como siempre, cabello largo hasta los hombros y con unos lindos pantalones largos de algodón celestes como sus ojos haciendo combinación con una corta camisa blanca que deja en vista sus clavículas. Y no era normal en él detallar la ropa de las personas que de la nada se aparecen en tu casa, pero en serio resaltaba su belleza su forma de vestir, era muy bueno en eso de la ropa y eso es algo que Usa siempre apreciaría.
La ropa es su mayor hobbie. Y más cuando alguien logra verse tan encantador con ropas tan simples.
No, no, nada de halagos mentales ¿Qué hacía Argentina en su casa? ¿No habían quedado las cosas claras desde la última vez en el baño?
Que mal suena eso. Usa está seguro de que si no hubiera un filtro entre todo lo que piensa y lo que dice entonces sería el hombre más jodido de este mundo.
--Cariño, hola--A veces maldice que su madre sea tan acogedora y simpática, en especial porque al ver una persona que parece ser tan agradable como lo es el chico de al lado termina dejándolo pasar sin siquiera cuestionar sus intenciones-- Argentina vino para preguntarte unas cosas sobre...¿Sobre qué decías que eran, cielo?
--Química señora.
--Sólo dime Francia, señora me hace parecer muy vieja.
Y en ese momento Usa supo que mentía, porque se había llevado química y no entendía una mierda de la materia.
--Seguro, ahora, si me disculpa necesito que su hijo me ayude.
--No hay problema, siéntete como en tu casa.
--Muchas gracias, Francia.
Devuelve el halago que dio antes, Argentina si puede ser catalogado como alguien encantador, o al menos eso deja demostrar delante de su madre que suspira tras el encanto del omega.
Apenas se alejaron unos metros de la cocina lo detuvo tomándolo del brazo, no muy fuerte porque su piel parecía marcarse fácil y su intención no es lastimarlo pero lo suficiente como para llamar su atención.
Rogó que su madre no lo escuche.
--¿Qué haces aquí?
--Hola Usa--Sonó hastiado hasta cierto punto, cosa que no entendió--Vamos a tu cuarto.
--¿Qué? No.
--Créeme, no quieres que diga lo que tengo que decir aquí.
O no tan encantador en realidad.
Usa caminó sin decir nada, esperando que lo siga sin cuestionar. No hablaron en el transcurso de sala-escalera-cuarto sino que una tensión rara se hizo presente, un silencio pesado en el que ninguno sabía qué decir. No se conocen al fin y al cabo.
Eran desconocidos que tienen que lidiar entre si.
Recién notaba que de la nada un perfecto desconocido enteraría a su habitación de la nada, sin anticipo, sin invitación. De la misma forma en la que entró en su vida.
Le complica las cosas sin siquiera tenerlo previsto.
Al llegar Usa se sintió avergonzado de lo desorganizado que puede ser, su habitación no estaba en estado óptimo de recibir visitas. Su lobo chilló histérico al percibir a "su omega" en su territorio y sin siquiera haber podido preparar algo, podría pensar que no les importa y rechazarlos. Usa se siente ahogar con lo dramático que puede ser.
--Disculpa, no esperaba visitas.
--Está bien ¿Puedo sentarme en algún lado?
--Si, puedes sentarte en la cama si quieres.
Argentina estaba raro, no es como si hubieran interactuado mucho ya para empezar, pero había algo que notaba extraño, una actitud demasiado seca incluso como para no conocerlo. Ahí lo notó.
Respiraba agitado, su rostro se notaba pálido y tenía la mirada perdida. Hablaba poco y cortante, parecía demasiado ido, como si no se sintiera en absoluto bien. De hecho no se tomó el atrevimiento de tocarlo pero estaba seguro de que su rostro de seguro estaría más que caliente si lo hiciera.
Se sentó en el lugar encomendado, casi dejándose caer. Con las piernas abiertas y su cabeza apoyada sobre sus manos, como si le diera vueltas y apenas pudiera mantenerse erguido.
--¿Estás bien?--Decidió preguntar, sin ignorar que era una pregunta tonta ya que no, no se lo veía bien en absoluto.
--Si, lo siento, la debilidad viene y va--Respiró un par de veces y tragó tan fuerte que incluso pudo escucharlo, luego al fin pudo verlo a los ojos con un poco de esfuerzo por entre los dedos, Usa se esforzó en entenderlo aunque arrastrara las palabras de a rato--Aunque supongo que ya sabes a lo que me refiero.
Usa se sentía tan ansioso que no quería sentarse, se mantuvo junto a la puerta cruzado de brazos y moviendo cada tanto sus pies con nerviosismo. Argentina tiene ese efecto histérico en él.
--¿Disculpa?
--Mareos, vomito, debilidad, hemorragia nasal ¿Tienes alguno de esos síntomas?
Y se le erizó la piel al notar que cualquiera de los tres primeros puede entrar perfectamente en lo que le viene pasando todo el mes desde que se conocieron.
--Si--Le salió apenas un susurro, algo en él le avisaba que lo que sea que vaya a decir no le iba a gustar. Una parte de él ya se espera una cosa así.
El destino siempre es más fuerte.
--Entonces bienvenido a los episodios de rechazo al lazo, me lo diagnosticaron ayer y si yo tengo efectos por rechazar nuestro lazo entonces tú también.
Las cosas nunca pueden ser sencillas.
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『𝔸𝕟𝕘𝕖𝕝 𝕖𝕪𝕖𝕤 』 ᴜꜱᴀʀɢ 🔞
Short StoryUsa siempre había sido muy recatado, pero esos ojos de ángel lo provocan al pasar. ° Usa x Argentina ° Omegaverse