Sanzu Haruchiyo-Luces Rosas-

19. Eres mía 🗡❣️

--- 🖤--- Aquí Thunder espero les este gustando mucho, ya no tengo tantos capítulos hechos pero las cosas se pondrán intensas a partir de este punto.

Mis ojos percibieron a la luz entrar por la ventana, el blanco techo de mi cuarto me recordó a las mañana en la que amanecí en la cómoda cama de Sanzu.

Al parecer no tendría que decirle nada a Sanzu sobre nosotros, desde el día en que no le respondí no había obtenido ningún tipo de señal de su parte, de eso unos 7 días.

Quedaban unas 2 semanas para ingresar a la Trinidad y cada día la situación con Rin se hacía mas evidente de su parte.

Sin embargo la noche de hoy iría con Anto y los chicos a "Neon Nights", esperaba divertirme con ellos, desde que Anto se mudó con Ran la veía poco y tenía ganas de regresar a ese lugar.

Con el pasar de las horas, tuve tiempo para poner algo de orden en mi cabeza, sabía que a pesar de la mentira de Sanzu y de mi incredulidad al pensar que nunca había hecho algo así el hecho de mi molestía se hacia presente por su omisión de la verdad.

Sujete mi cabello por lo alto y pinte un poco mi rostro, después descubrí que no tenía mucho que ponerme así que le marque a Anto para pedirle algún vestido, quería verme diferente y que los demás notaran esa diferencia en mi.

Al llegar al lugar Anto me esperaba fuera de la camioneta de Ran, la musica del interior sonaba aún afuera con intensidad.

-VEN VEN te traje este T/N.- Gritaba Anto emocionada abriendo la puerta de atrás del vehículo, sacando de una bolsa y en el interior se semejaba a un pedazo de tela negra con cientos de brillos.

-Pero Anto eso esta muy corto.- El vestido que sujetaba en sus manos era negro, con detalles en las costuras de encage y extremadamente, extremandamente corto, tenía de igual forma un pequeño escote y era más que satinado.

-Ya ven vamos a la parte de las oficinas y te cambias.- Anto me sujeto de la mano y me guío como esa noche, como siempre lo hace.

Dentro de la habitación donde conocía a Sanzu me intercambie de ropa, puse mis medias, zapatos, y aun llevaba en mi cuello el collar que me había dado esa tarde de museo, alborote un poco mi cabello antes de salir y suspire justo cuando abrí la puerta, deseando no tener que verlo para nada el día de hoy.

-Entonces así te vistes cuando sabes que no estaré cerca.- Sanzu estaba ahí justo frente a mi.

Su cara apareció como por arte de magia del otro de lado, solo nos dividía el marco de la puerta, su expresión se le veía cansada y sus profundos ojos me reprochaban.

-Con permiso.- Moví las piernas lo más rápido que pude, para pasar de largo cuando sentí su agarre en mi ante brazo.

-T/N, ¿Piensas que te puedes ir así? .- Gire mi cuerpo hacia el, la distancia era corta y mis ganas de besarlo mucho más, pero ya no quería caer en este juego, ya no más.

-Ya me fuí.- Arrebate mi brazo de su agarre y camine, rápidamente los escalones para mezclarme con la gente del club, el corazón me palpitaba, sentía la musica en un segundo plano cuando una mano sujeto mi cadera.

-Ya te dije... A Hola Rin.- La sonrisa de Rin apareció frente a mi.

-Hola T/N, ven vamos a bailar, hermosa.- Susurro en mi oido para así poderlo escuchar entre el bullicio del club.

Comenzamos a movernos, pero yo solo notaba la ventana interna del lugar donde se había suscitado mi discusión, lo más seguro era que Sanzu ni siquiera estuviera viendo.

Un mesero se acerco a nosotros ofreciendonos unos tragos, Rin le pidió que nos trajera de sus favoritos, unos segundos después teníamos 5 shots de algo color lila.