~Mundos distintos~

El día que el diablo se enamoró

Cuando el demonio avía visto a Dice fue en una de sus escapadas al mundo toon, Dice apenas era un niño que se ofreció a jugar con él, al demonio le avía parecido totalmente ridículo pero igualmente acepto. ¿Quién pensaría que así comenzaría todo?, ellos con el pasar del tiempo se fueron teniendo una profunda confianza, Dice fue volviéndose cada vez más fuerte acompañado del demonio hasta el punto en que quedo como el segundo toon más fuerte, estaba tan alegre que no podía ocultarlo, mientras tanto el diablo ya avía sido coronado.

Una de las cosas más raras de los demonios era la atracción, ellos a diferencia de otros seres no se sentían atraídos por el físico, para ellos lo más atractivo de alguien era su fortaleza, entre más fuerte fuera más atractivo se convertía para cualquiera hasta el punto de ser irresistible. Por esas razones, cuando el dado fue invitado a la coronación del futuro diablo, muchos se acercaron con intensiones no camufladas, en ese momento, ese instante el diablo por primera vez sintió celos, celos de que otro se acercara a lo que él llamaba suyo sin realmente serlo.

¿Cuándo avía comenzado este sentimiento?

Fue desde que pudo ver su potencial, cuando el dado venció al toon que se encontraba en el tercer lugar, en ese momento fue atraído por esto... Aunque él lo camuflaba muy bien con un notable desinterés a todo.

- Por fin lo pude vencer - Decía un dado lleno de cortadas.

- Bueno, pero será mejor que atiendas eso - el mayor señalo sus cortadas - no quiero que antes de que me sirvas mueras por alguna infección - Fue lo último que dijo antes de irse de aquel lugar, el dado estaba feliz igualmente porque savia que debajo de ese desinterés avía algo.

Sin que el dado se enterara, el demonio fue aniquilando a cualquier demonio que se le acercara lo suficiente, cosa que cada vez se volvía más recurrente por el gran avance que tenía el dado con sus batallas. Fue difícil acabar con todos hasta que a cierto punto los demonios fueron notando este comportamiento y solo se alegaban del toon para no tener problemas con el mismísimo diablo, aunque siempre avía uno que otro que no sabía sobre estos rumores y terminaban siendo aniquilados por acercarse de más.

Los demonios son tan territoriales, aunque el demonio no sabía por qué lo era con un estúpido toon, lo seguía haciendo. Llegó el día en que Dice fue coronado como el toon más fuerte, su alegría era notada de lejos, por fin después de tanto tiempo su esfuerzo tuvo frutos, allí todo fue más obvio para el diablo. Siempre trato de tener una escusa para estar lo suficientemente cerca del dado y eso fue difícil hasta que abrió el casino y le pidió a este unirse, quien no se negó en ningún momento y así fue como comenzó su relación de jefe y empleado, de vez en cuando el demonio acercaba al toon a su cuerpo con su larga cola entre otras cosas, pero cuando realmente todo cambio fue con la llegada del pequeño toon/demonio.

- De verdad planeas dejarlo con ellos otra vez - se quejaba el demonio.

- Que tiene de malo?, ellos siempre han sido muy cuidadosos - El dado se refería a sus ayudantes, a quienes avía dejado a cargo a su bendición.