Amor eterno

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El cara de taza corría desesperadamente, se estaba haciendo de día y no tenía ningún escondite a donde refugiarse de la mirada de aquellos ángeles

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El cara de taza corría desesperadamente, se estaba haciendo de día y no tenía ningún escondite a donde refugiarse de la mirada de aquellos ángeles. Quedaba poco tiempo, no tenía escapatoria

Los ángeles estaban comenzando a salir

Con el corazón en la boca pensaba rápidamente en que hacer, tenía que ser rápido, si lo encontraban quien sabe lo que le pasaría. Esas tierras tan extremas en las que solo y únicamente pueden vivir los ángeles, aquellos seres con apariencia desconocida en algunas ocasiones que para no causar pánico al cruzar la frontera toman la forma de un toon. Esos seres que se creen superiores y no les importaría hacer cualquier cosa si pueden subir un rango más...

- Por favor sigue corriendo - Se decía a sí mismo, sus habilidades tenían un gran poder, pero siempre era mejor no encontrarse con un ángel.

Corrió y corrió hasta quedar sin aliento, pero no fue lo suficientemente rápido, ¿así se siente ser la presa?. Un gran ser con alas en las que sobresalían ojos de color azul, tenía la apariencia de un toon, pero sabía que no lo era, tenía dos aureolas entrelazadas en su cabeza. Su cara era tapada por dos alas pequeñas que se movían lentamente, de un momento a otro los ojos de las alas lo vieron, en ese momento sintió que su vida estaba por acabar.

Las alas pequeñas se abrieron mostrando un hermoso rostro tan bello como la porcelana, cabello largo de color blanco y ojos verdes que contrastaban con el negro. Este se acercó dejando al toon totalmente congelado, ya lo avían encontrado y este en especial se veía de un rango alto, cerro los ojos esperando lo inevitable, esperaba ser atravesado por la espada de plata que pudo ver entre las manos del ángel.

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- Estás bien? - Se escuchó una dulce voz proveniente de aquel ángel que dejo totalmente confundido al cara de tasa, al alzar la mirada pudo ver al ángel al frente de él sin ninguna intención de lastimarlo, su apariencia daba a expresar su preocupación, ¿realmente era un ángel?.

- Ah... Yo - Estaba nervioso por la cercanía, así que dio un paso atrás para posteriormente soltar un suspiro y seguir hablando - ¿Por qué no me has matado? - Mencionó haciendo que el ángel lo mirara con una sonrisa.

- La verdad tienes suerte, no quiero matarte - Los ojos del toon se abrieron como platos, en los años que avía estado en el cielo todos los ángeles avían intentado matarlo inmediatamente al verlo, ¿este ángel estaba enfermo o corrupto?, fue su único pensamiento.

- Que... - Miraba con detalle a ese ser que estaba al frente de el mirandolo con una sonrisa tranquilizante - No puede ser, ¿tú eres un ángel?, ¡los ángeles no son así! - Su respuesta fue soltada con una combinación perfecta de miedo y asombro.

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