𝙃𝙖𝙧𝙧𝘺 𝘗𝘰𝙩𝙩𝘦𝘳 : ᵐᵃˡᵉʳᵉᵃᵈᵉʳ•

George Weasley.

Para uno de los gemelos una persona le era impresionante, magnífica y demasiado, tal vez tanto que el se sentía muy poco junto a él, eso era extraño y más aún siendo un gemelo Weasley.

Y si, tal vez la persona de la cual nadie de sus amigos sabía nada era un Slytherin, un año menor que el, su nombre era Erick Atlantic, un chico aunque no era muy bueno en defensas contra artes oscuras y pociones era el mejor en cuanto se trataba de bromas a los de su clase y casa, algo que sin duda fue lo que atrajo a George.

La otra cara de Erick era ser el chico elegante de su casa, su familia era rica y el tenía un puesto seguro como auror al salir de Hogwarts, un chico perfecto para el pelirojo en pocas palabras, tanto que al mayor le llegó a asustar.

Un día mientras un chico de Huffelpuf era menospreciado por Draco Malfoy el decidió entrometerse.

- Hey Draco no te es suficiente con ser un idiota? - dijo Erick con una sonrisa burlona - ahora quieres que todos lo sepan al molestar a alguien menor? Veo que no tienes agallas - dijo sonriente.

- Calla esa boca Erick, completamente asqueroso que seas Slytherin y sangre sucia - hablo la serpiente.

- No quiero, sinceramente no quieres que nadie sepa sobre tu torpe confesión conmigo o no? - dijo después de acercar e lo suficiente para susurrar lo último.

Así se llevó a cabo una pelea de palabras donde poco a poco Draco subió la voz y Erick solo lo ignoraba, ahora por alguna razón parecían una pareja enojada caminando por los pasillos ya que Draco intentaba a toda costa que Erick volteara pero nunca lo hacía y en un intento demasiado torpe para decir la verdad se paró al frente de este que no lo noto pues Draco había corrido unos cuantos pasos extra pero cuando chocaron ambos cayeron por accidente y como si se tratara de una mala broma chocaron los labios al frente de todo el comedor y mesa Gryffindor.

Un chico cegado por el enojo quito al pelinegro de encima de Malfoy quién se quedó inmóvil y lo llevó a la torre de astronomía, el menor también parecía inmóvil como si con un petrifico totalus hubiera sido atacado.

- ¿Te gusta Malfoy? - pregunto de la nada Weasley.

- ¿Qué? Eso... que asco Weasley - dijo sin pensar.

- ¿Quién? - pregunto de nuevo un poco preocupado por no entender la respuesta.

- Malfoy, ¿Quién más?

- Nadie, yo... Tengo que decir algo antes que está valentía se vaya - dijo jugando con sus manos - Tu... Me gustas, me gustas mucho.

En ese momento si no fuera porque pensó que segundos antes había besado a Malfoy estaría besando a acabar con el pelirrojo, por qué, a quién le mentiría? La verdad es que desde que entró no podía dejar de ver al sonriente chico y a su hermano, admitía tener fantasías con ambos pero en sus sueños, incluso los más empalagosos... Eran con George Weasley.

- y entonces? Yo te gustó? - preguntó algo nervioso George.

- Dejame lavarme la boca y te doy un beso de aceptación - dijo el Slytherin mientras caminaba a la puerta tomando la mano del gemelo.

Siento no actualizar este libro rápido, estoy trabajando en borradores de mi nueva historia y  los de este, disculpen la espera.