veintitrés

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Olivia me mandó a un bar, pero no precisamente a tomar

Todo estaba tranquilo, no se encontraba mucha gente allí y una canción de Ruben Rada sonaba bajito. Había un escenario, el cual se llevó mi atención por completo desde que puse un pie adentro

Seguí sus instrucciones, bajé las escaleras de madera que daban hacia un piso por debajo. No había más que asientos y algunos instrumentos allí; guitarra, bajo, batería, pandereta, cajón, un banjo

¿Cómo consiguieron un banjo?

Me entretengo mirándolos hasta que escucho una voz

-Hola- siento a mis espaldas y me doy la vuelta

Un chico, aparentemente de mi misma edad, estaba parado frente a mí. Era un poco más alto que yo, tenía una leve barba creciente en su rostro y sus ojos se achinaban demasiado al sonreír

-Hola- saludo- Olivia me dijo que viniera aquí, que les avisaría...

-Si, tranquilo. Nos avisó- movió su mano con desdén mientras abría una lata de cerveza- ¿Juan Pablo, verdad?

-Así es- sonrío y estrecho su mano- Un gusto...

-Juan Pablo- se presenta y reímos- El gusto es mío, tocayo. Lo hemos escuchado cantar y nos gustó mucho su voz

Frunzo mi ceño con confusión

-¿Me han escuchado?- cuestiono- ¿Cómo...?

-Buenas- dice alguien mas y veo a otros dos hombres llegar

Uno tiene el pelo platinado, el otro parece Harry Potter. Llegan con una sonrisa en la cara que me resulta totalmente contagiosa, y eso me agrada

-Ya se demoraban- se queja Juan Pablo y el rubio ríe

-Culpa de moncho- excusa señalando al de lentes

-Siempre es mi culpa- suspira este y río bajito

-Perdón- se disculpa mi tocayo- Ellos son los hermanos Vargas, Martin, Simón. Él es Juan Pablo

-Un gusto, Liv me hablado mucho de usted- dice Martin con un sonrisa, él era el novio de mi psicóloga

-Oiga, ¡Usted es él del video!- exclama Simón rememorando

-¿Qué video?- pregunto y se miran entre ellos

-El de El Color Del Ayer- responde Juan Pablo con obviedad- ¿No es usted?

-¿La escucharon?- cuestiono incrédulo

-¿Quién no?- ríe Simón- Medio millón lo hizo

¿Qué carajo está pasando?

-¿Medio millón?- repito y ellos asienten

-De hecho, un poco más que eso- dice Isaza con el celular en sus manos

Me muestra el video que subí hace unos meses en YouTube, contaba con unas 650 mil reproducciones

-¿No lo sabía?- pregunta Martín riendo

Este chico se ríe mucho

-No- contesto sin poder creerlo

-No hay por qué ser humilde, Juan Pablo- bromea Simón y me hace reír

-No, es que de verdad le había dejado de dar importancia- contesto sincero

-Bueno, la gente no- dice el más alto con diversión

-¿Usted es paciente de Olivia?- pregunta el de lentes y asiento

-Si, hace unos meses ya- afirmo- Me mandó aquí porque me dijo que podían necesitarme, y que me podían ayudar

-¿Ayudar a qué?- cuestiona Juan

Si les digo que su ayuda es para ser feliz, me van a echar de acá

-A reencontrarme con la música- opto por decir

-Perfecto, porque nosotros estamos pensando en crear una banda- cuenta Simon- Y necesitamos a alguien más

-Asi que...¿Quieren que me una a ustedes?- intuyo

-Pues, primero tenemos que ver si funcionamos- ríe Juan Pablo- Pero nos gustó mucho su voz y la letra de la canción es increíble

-Liv me dijo que toca guitarra electrica también- agrega Martín

-Es verdad- contesto asintiendo

-Justo lo que necesitamos- indica Simón

-Asi que...¿Qué dice?

-Que si- respondo con una sonrisa y ellos aplauden

-Bienvenido, entonces- el rubio me da una lata de cerveza y golpea mi hombro suavemente

-Gracias, pero primero explíquenme como es que consiguieron un banjo- pido y ellos ríen

-¿Explicación sincera o correcta?- cuestiona Simón dejándose caer en el sofá

-Correcta- digo dudoso

-Nos lo prestó una amiga- contesta

-¿Cuál es la sincera?

-Lo robamos- responde Martin y Juan Pablo le pega en la cabeza- ¿Y qué? Si es la verdad

-No de malas impresiones, chino- dice éste riendo- Esa misma amiga nos lo prestó y jamás se lo devolvimos. Ninguno supo como tocarlo, la verdad

-Yo tampoco lo devolvería- me sincero tomando el instrumento entre mis manos

-¿Sabe tocar el banjo?

-No, pero podría aprender- digo y Simón sonríe

-Juan Pablo- llama Martín

-¿Qué?- respondemos los dos al unísono y los hermanos ríen

-Necesitamos arreglar esto- decreta el rubio

-¿Juan Pablo uno y Juan Pablo dos?- bromea mi tocayo

-¿Cuál es su apellido?- cuestiona el de lentes

-Isaza- contesta el otro Juan Pablo

-Sé el suyo, perro- ríe Simón

-Villamil- digo

-Villa- propone Martin y sonrío conforme

Y ahora resulta que estoy en una banda

Que medio millón de personas escuchó mi canción

Y que soy villa

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NiaaMont feliz cumpleaños reini <3

Alaska - Juan Pablo VillamilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora