29 - Desapariciones

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5 meses de desaparecido de nuevo wuuu

Aunque esta vez es con razón.
Estuve en exámenes finales,
viajé por un trabajo el verano,
comencé de nuevo la uni (ew),
y finalmente, vino un huracán y no tengo internet.

Irónico, empecé esta historia por la misma razón.

No obstante, aquí estamos.
Veamos cuánto duro sin morir de nuevo :)

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Tras entrar por el portal de Aureus, el Gran Maestro del Gremio, el par se encontraba en una habitación completamente oscura.

—¿Umm? —preguntó Elizabeth una vez pasaron unos segundos.

—Oh, lo siento. —respondio Aureus, y con un chasquido de sus dedos la habitación se ilumino por completo.

La misma se trataba de una mesa de madera en el centro, con dos sillas a un lado, y al contrario había solamente una, donde el señor de gran edad se encontraba sentado. Aquella habitación era un cuadrado como de dos metros, sin entradas ni ventanas, sin duda un lugar extraño.

Sin nada que poder hacer, Kuro y Elizabeth se sentaron en las sillas que estaban disponibles.

—¡Bienvenido de vuelta joven Kuro! —saludo el señor — Veo que has estado ocupado, —dijo con una sonrisa mientras miraba a la chica —un placer conocerla, princes-... mm, más bien, supongo que reina.

Con esto, la chica se levantó de golpe, extrañada de como alguien ya sabia lo que había ocurrido con su padre.

—No debes preocuparte, no soy de los que van por ahi contando los secretos ajenos después de todo. —dijo para tranquilizarla, aunque no es como si fuera a lograr su objetivo.

—Aureus. —interrumpió Kuro.

—Kuro. —contestó el Gran Maestro.

—Dinos de que se trata todo esto...

—¡Cierto, cierto! Ahem, estimado dúo de aventureros, encontramos sus ma-

—Al grano. —interrumpió el chico con impaciencia.

Luego de un suspiro, —Ahh, bien. Mañana van a recibir una comisión de una familia muy especial en Esperance. Quiero que la ac- no, la van a aceptar. —ordenó el Gran Maestro, cambiando su habitual sonrisa a un semblante más serio.

—¿Por qué deberíamos hacerte caso? —preguntó el chico.

—Sabes que no he hecho nada como para que dudes tanto sobre mí. Además, la comisión viene de Atrox Mercor, tu amiga aquí debe saber de quien se trata. —dijo el señor.

—... la vamos a hacer. —respondió la chica, finalmente tomando asiento en su silla.

—Espera espera, ¿que hay de mi ofi-

—¡Genial! Mañana al mediodía los estará esperando en el primer piso del Gremio.

"A este punto no sé por qué me sorprendo, llevo todo el tiempo así..."

—Oh, por cierto Kuro. No debes de preocuparte de nada. —dijo el Gran Maestro, para luego dar una guiñada.

Sabiendo de quién se trataba el mensaje, el chico soltó un leve suspiro de alivio. Nuevamente, sin ningún tipo de indicación, dos portales aparecieron frente al duo, y sin poder decir nada estos llevaron a ambos hasta la entrada al palacio real de Castell.

Kuroi Tentai no AkumaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora