Secret Alpha

O30

(Volviendo a la escena anterior...)

El rizado ahora estaba frustrado, no tenía nada para hacerle el almuerzo a sus invitados y claramente no iba a pedirle dinero al ojiazul, además de no tener tiempo para preparar algo, decidió tomar la tarjeta con sus ahorros para pedir pizza y unos refrescos por internet.

Se suponía que sería un almuerzo agradable, iban a presentar su noviazgo ante sus amigos y Louis lo había arruinado por ser como un cachorro hiperactivo.

—Subes a la habitación, te das una ducha, te vistes y bajas ¿Entendido?—habló el rizado hacia el ojiazul, quien seguía en su forma animal—Sin renegar, sabes que has hecho mal en robar la carne que claramente yo ya había comprado, ahora a ver que le dices a tus amigos sobre la comida.

"Mandón." Refunfuño el lobo, subiendo ráñidamente hacia la ducha.

Luego de media hora las pizzas llegaron y el castaño bajó nuevamente con ropa nueva y una colonia agradable y atractiva. Una sonrisa se dibujó en su rostro al ver el tierno rizado pataleando al no ver sus rollos de canela.

—Harry, ¿Qué pasa?—preguntó, aunque era más que obvio lo que pasaba.

—¡El tonto chico no trajo mis rollitos de canela!—se quejó en voz alta, cruzandose de brazos.

Louis rió bajo, justo cuando iba a prometer comprar rollos de canela el timbre lo interrumpió, anunciando la llegada de sus amigos.

—Deben ser ellos, te daré los rollos de canela cuando se vayan. —susurró el castaño, caminando hacia la puerta para abrirla.

Cuando abrió la puerta, un inconsciente gruñido se escapó de sus labios al verlo.

Era Zayn quien estaba parado frente a él, rápidamente el recuerdo de ese chico vino a su mente.

—¿Y tú eres?—preguntó Louis, alzando las cejas aunque ya sabía el nombre de ese tal Zack.

—Louis ya lo conoces. —se quejó el rizado, quien apareció detrás de él—Y ahora es mejor que no hagas una escena de celos.

El castaño rodó los ojos al escuchar el regaño—Bieeeen, pasa Zack.

—Zayn. —corrigió el morocho con una sonrisa—Tranquilo amigo, no debes preocuparte por mi, digo, a mi me gusta ir abajo y Harry no es el tipo de ir arriba. —soltó una risa mientras palmeaba el hombro del castaño—Es más, quien debería estar celoso es Harry, tú no eres para nada feo.

—¡Zayn!—se quejó Harry, soltando un bajo chillido—Ugh, eres un tonto, Louis es mío, mío, mío. —dijo en voz bajita, sin darse cuenta de la pequeña escena de celos que hacía.

Los mayores solo rieron al verlo celoso.

—¡Ugh! No te vuelvo a invitar, Zayn. —soltó otro bajo quejido, comenzando a caminar hacia la puerta al escuchar nuevamente el timbre. Abrió la puerta de inmediato, mirando al ojimiel frente a él—¿¡Y tú qué quieres!?

Liam abrió los párpados más de lo normal, alzando las manos al mismo tiempo—¡No sé tú me invitaste!

—Ay sí verdad, perdón estoy algo estresado.—hizo una mueca, haciéndose a un lado—Pasa Liam, lo siento por gritarte.

El nombrado solo rió, entrando al departamento y chocando puños con el castaño.

—Harry no seas grosero, presentame a tu amigo. —se escuchó la voz del morocho, haciendo voltear a los tres presentes.

Harry solo bufó bajo con irritación, mirando al ojiazul—No es mi amigo, es amigo de Louis entonces que te lo presente él.

—Perdón Liam, creo que tengo un omega celoso y rabioso. —susurró Louis, haciendo una mueca—Bueno como sea, Liam él es Zayn, Zayn él es Liam, conozcanse y me hacen ocho sobrinos.

—Ni Zayn ni yo somos hombres lobo. —respondió el ojimiel, soltando una carcajada.

—Bueno me traen el sextape entonces, pero de que se unen como garrapatas lo hacen y quiero ver el resultado. —el hombre lobo alfa se encogió de hombros.

Harry lo miró fijamente antes de hablar—Liam, ¿Crees que mi cuchillo de carne sea capaz de cortar hombres lobo?

—Mhm no lo sé, deberías probar. —respondió el morocho en lugar de Liam, soltando una risa.

—¿Por qué no pruebo contigo mejor?—el ojiverde soltó un bajo gruñido.

—¡Mejor esperamos a que lleguen Niall y Aspen!—interrumpió Liam, alzando las manos para detener la próxima guerra mundial.

Zayn, Louis y Harry se miraron entre ellos, frunciendo levemente el ceño.

—Aún no vienen así que...—nuevamente habló Liam, tomando una bolsa de papel que traía de la calle—Un paquete de croquetas para ti. —tomó el paquete de comida y se lo dio al castaño—Rollos de canela para ti. —se los dio a Harry—Y tú y yo podemos compartir una dona. —habló hacia el morocho, sacando una dona de chispas de chocolate—Te daría lo que tengo aquí pero es para Aspen y Niall, gomitas de fresa para Aspen y sobres de mermelada para Niall.

—Liam es la mamá del grupo o...—habló el rizado, comenzando a comer los rollos de canela.

—Harry...—regañó el castaño, alzando las cejas.

—Tú cállate y come tus croquetas. —Bufó el rizado, rodando los ojos.

—Ojalá Aspen y Niall ya vengan o el departamento será Troya. —murmuró el ojimiel, haciendo una mueca.