Gabriela
Muevo la cabeza a un lado y vómito de nuevo, es la tercera vez está mañana, y detesto sentirme así, débil, y enferma, ya que sigo trabajando, y no puedo permitirme enfermarme, ya que se acerca el aniversario del hotel
Sebastián está estresado, ya que tendrá que lidiar con su familia a la que ha estado evitando por casi un año, sobre todo a su padre y su hermano, además de la niña rica como el le dice, que sigue cayendo me como parada en el estómago por como quiere estar cerca de Sebastian
Según se, su papá quiere presionarlo a casarse, no conmigo o con quien Sebastián quiera —ya que si ese fuera el caso, me hubiera llevado a las Vegas y se hubiera casado conmigo (palabras de el y no mías) — aún cuando no me ha dicho a quien le impusieron, se que eso le molesta tanto como el no poderme follar por varios días, porque tenía el periodo aunque solo sangre un día, el dijo que no le importaba eso, a mi si me incómoda un poco, pero se que hoy será el día, ya que por fin estoy libre de sangre y dolores en el vientre, pero este maldito vómito me tiene harta, me limpio la boca y me enjuago con un poco de agua
Reviso la tablet, dando confirmación a la decoración, ya que me ofrecí a encargarme de todo referente al aniversario para que el solo se tenga que preocupar por los socios y la gente que tiene que invitar, esa gente que no recibe una invitación de mi
Regreso a la oficina y lo veo tan imponente sobre su silla, furioso por como aprieta los puños y como sus ojos lazan dagas, me acerco despacio, después de cerrar la puerta con seguro, me siento sobre la mesa y me inclino para lamer sus labios, se aparta de la pantalla y me sostiene la cara besándome con ansias, algo que nunca creí posible es la forma en que su perfume entra en mis fosas nasales, y me hace apartarlo de mi, para tomar la cesta de basura y vomitar de nuevo
El toma mi pelo en una coleta para evitar que este se ensucie, mientras me deja vomitar, no he comido nada, pero he vomitado un montón, y eso me hace tambalear cuando levanto la cabeza, el me sostiene y revisa mi temperatura al igual que mi pulso
—Estas verde — murmura y no tengo ánimos de nada, hasta podría considerar que se quite el perfume y me abrace hasta que me sienta mejor — ¿Que tienes? Estás vomitando desde ayer, te dije que no vinieras pero aquí estás y te ves peor que ayer
—Algo de seguro me cayó mal, sabes que después me pongo bien — murmuró, acariciando su barba, conteniendo la respiración para evitar el olor de su perfume — ¿Cuando cambiaste tu perfume? Eso me provoca náuseas
El me ve con una ceja arriba, a tiempo que levanta el teléfono y da alguna indicación pero estoy llenandome de aire para evitar vomitar, de nuevo, Dios detesto ese olor
—Iras al médico y no está a discusión — hago una mueca e intento replicar — y no vendrás al trabajo hasta que te vea el médico
—Eso no es justo, al rato me sentiré bien, así fue ayer, no puedes prohibirme trabajar — gruño entre dientes pero lo suficientemente entendible para el que me ve con una ceja arriba
Alguien toca la puerta y me levanto a abrirla dejando que Caliope entre
—Me vale mierda, no quiero que tú salud se vea perjudicada en estos días de demasiado estrés, así que vas a ver un médico y Caliope se hará cargo de tus labores, recoge tus cosas y nos vemos en la casa — refutó y alego pero el no me deja — no te estoy despidiendo, estoy velando por tu salud, de nada me sirves aquí enferma, así que vas al doctor y hasta que no tengas un puto tratamiento no regresas a la oficina
Sollozo, sintiendome sensible por su causa y camino a mi oficina, recogiendo mis cosas y saliendo sin siquiera despedirme, escucho su resoplido pero no me detengo a nada, subo al ascensor y bajo rápido, pidiendo las llaves del auto de Sebastián y ya que el mismo dió la orden que me dieran todo lo que yo pidiera, así que cuando lo traen puedo subirme a el
Llegó a una farmacia y para salir de dudas pido una prueba de embarazo, solo lo hemos hecho una sola vez sin condón pero de eso ya hace un mes y un poco más y mi periodo bajo solo un día, además de los malestares físicos, y la sensibilidad en todo mi cuerpo tanto interna como externamente —sobre todo en mis pezones — me hace dudar que no haya un pequeño Alber creciendo dentro de mi
Llegó al penthouse y me quito los tacones, corriendo a vomitar de nuevo y detesto sentirme así, deslizó el dedo en la pantalla cuando terminó, viendo la cara de Noelle, la cuál me ve con una mueca al verme dónde estoy
—¡¿Que te sucede mujer?! Comúnmente eres pálida pero ahora estás en extremo — murmura haciéndome sentir peor — ¿Estabas vomitando? — asiento, y ruedo el teléfono vomitando de nuevo — ¿Fecha de tu último periodo? — pregunta, cierro los ojos para entender su pregunto, terminando de vomitar para acomodarme en el piso, pensando, mis mente quiere descansar un poco de tanto vomitar
—Me llegó hace unas semanas pero solo fue un día, flujo abundante y luego varias manchas — murmuró, limpiando me la boca, arrugó el entrecejo viendo el número que entra a la pantalla, me hablan de parte de mamá pero no es hora de visitas o de llamadas por lo cual se me hace extraño — dame un minuto — murmuró a Noelle quien asiente y pongo la llamada en espera para contestar la del hospicio
»—¿Sucede algo? — es lo primero que pregunto, se escucha un suspiro y luego la voz de la doctora de mamá
—Señorita Sanchez, le habla la doctora Cisters que lleva el caso de su madre, como usted sabe la salud de su madre se ha ido deteriorando, y necesitamos que venga para que de su firma y podamos desconectarla, sus pulmones ya no dan abasto y por eso continuar con el respirador es casi una perdida de tiempo
—Yo no entiendo...
—Lo siento señorita Sánchez, debe venir y aquí le explicaremos con más detalle
—Estare ahí pronto — aseguro cortando la llamada — paso algo con mamá, suspiro
—Hazte la prueba — murmura y enarco una ceja — también lo sospechas, sal de esa duda y luego vas dónde Cande
—Tengo que ir con urgencia, la prueba puede esperar — refutó
—Orina en ella y los minutos pasarán mientras llegas al hospicio, no tendrás que esperar en casa — suspiro y me bajo la braga quitándome la falda en el proceso, destapó la prueba después de sacarla de su caja y orino sobre ella, la vuelvo a tapar y corro a la habitación, con Noelle aún en llamada
Se ríe de mi, pero no le prestó atención y termino de cambiarme rápido, estamos entrado a Otoño, así que hace un poco de frío mientras me doy un poco de color para no verme tan pálida y bajar, tomo el bolso, la prueba que reposa sobre el lavamanos y también las llaves del auto
Bajo de nuevo en el ascensor, y subo al auto, colocando el teléfono en la pantalla para que seguir en la llamada para seguir hablando con mi amiga mientras conduzco
»—Todo saldrá bien, ya lo verás — asegura pero no puedo creerle, ya que mamá tenía cáncer en etapa terminal, y sus pulmones están a punto de sufrir un colapso
Así que podría perderla, y eso me asusta mucho, además de la prueba que reposa en mi bolso, recordando la teoría que dice que si una vida nueva llega otra se va, y no, no quiero que mamás me deje
Llegó al hospicio y antes de bajar, Noelle me habla
»—Mira el resultado, eso te ayudará a mantener la calma — gruño pero le hago caso, la sangre baja a mis pies al leer el resultado, de nuevo el vómito sube a mi garganta y aunque ya lo sospechaba esto es un balde de agua helada calando mi piel
—Es positivo
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Choque
RomanceMientras Grabriela se desmoronaba al no poder hacer nada por su madre, Sebastián lo hacía por asumir una responsabilidad que aún creía grande para el, ambos tenían un camino difícil un camino tan diferente que era imposible que no se encontrarán P...