henrry

capítulo 6

El tiempo avanzaba muy rápido, yo siempre pensando en Kamila, mi primer mor, me hace mucha falta. Matt creo que no se iba, no sé si iba a pedir traspaso para ahí o qué, pero bueno, no tengo que sentir eso por él, solo lo quiero como un gran amigo que es.

Ya las siete y media aproximadamente, de la noche, eso veía por la oscuridad que había, ya era la hora de dormir, de tanto pensar yo no sentía miedo, no superaba la muerte de Kamila, y yo aquí. Las lágrimas querían bajar sobre mis mejillas, sentía un nudo en media garganta que me mataba, lo que hice fue tomar agua para que me bajara.

No tenía ni un día de estar ahí, pero yo me sentía súper desesperado, lo malo que no me habían dado comida, lo bueno que Matt me había dado una botella de agua, ese era mi sustento. De tanto pensar no sentía cuando me dormí.

                                                                          ... 

Ya era el primer amanecer en ese internado, me senté a él dado derecho de la cama de mi invitación, recé unos tres padres nuestros, ¡¿qué?! No sé por qué hice eso, yo nunca me había desgraciado a rezar por lo menos
Hace unos diez años, mi mama me llevaba a la parroquia "santa catalina", la parroquia era súper hermosa. La hora que nos iban a levantar era a las seis y media, yo me levanté a las cinco medias aproximadamente, me sentía súper estresado, abre la puerta de mi habitación solo para sacar la cabeza para ver a los dos lados para ver si había guardias —vie para ambo lados —por suerte no había nada de guardaespaldas, no hay moros en la costa —dije a vos baja mientras salía de la habitación y daba unos pasos hacia delante.

—No que no – dijo una guardia detrás de mi agarrándome el hombro.

—¿Qué intentas hacer? – me pregunto viéndome con unos ojos como mundo y con una cara súper seria. Sentí como mi cuerpo sintió un escalofrío que me bajaba de la cabeza hasta mis pies.

—¡¡Iiii!! —di un suspiro fuerte —nada, solo qué tenía ganas de ir al baño, y pues como también no podía dormir. Y sentía ganas... decidí salir.

—¿Me ves cara de una idiota? —me pregunto siempre con la cara seria

—¡¡No... e incluso la veo con cara de una mujer súper activa y atractiva!! —dije con una cara de ángel.

—¡¡Vete!! Antes de que te saque los ojos —me dijo cruel mete y girando sus ojos.

Les digo que, si sentí horror, ella no me tenía piedad, lo mejor fue que hiciese caso.

—¡¡O...key!! Dije con una de inocente y girando los ojos. con unas ganas de salir de ahí. sentía una sensación de salir de ahí corriendo.

De pronto escuche una voz bien cálida...