henrry

capítulo 4

Bien ya pasando la entrevista me dijeron que me iban a llevar a una delegación, solo faltaba que no me metieran a la cárcel, saben yo nunca avía estado en una, dicen que es algo traumático, solo espero que no pase.

Estaba esperado para que llegaran a traerme, bueno así me dijeron. No sé si mesenia emocionado por que iba a estar en una prisión o por que iba a conocer a psicópatas de verdad.
Bien, ya vámonos – me dijo que el policía.

—Está bien.

Me dijo que me iba a esposar porque yo era un sospechoso. En eso momento no sabio si llorar o correr. Mejor decide que sí, que iba a llorar. Me esposó me llevo agarrado hasta el auto en el que nos íbamos a ir para la comisaria.

Yo me sentía único, no ser porque, pero creo que era por que llevaba chofer. Algo que no entiendo es que en ese incidente Kamila ay yo estábamos tirado en el suelo, yo no sé qué pasaba, pues ahora me tienen como sospechoso, estos policías no sirven para nada. Ella era mi novia, yo la amaba con todo mi corazón.

—Oye, policial.

—¿Qué quiere?

—¿Qué sabes de mi novia? ¿Cómo murió? ¿Quién la mató?
Vi que vio por el espejo pequeño del carro, el que está enfrente. y me dijo

—Aun no sabemos, el único sospechoso solo eres tú —Me dijo con una cara de algo de burla

—Ja, ja, ja, que gracioso. – riéndome sarcásticamente —¡¡espera...!! ¿tu cómo te llamas?

—Me llamo Matt.

Cuando él me dijo su nombre me sonó muy familiar no sabía que es lo que pasaba. Ahora estoy a un más confundido me dije en mi mente. Mi cuerpo sintió una sensación extraña.

—Oye Henrry
¿Qué tienes? ¡¡Pare que has visto un fantasma!

—No, no pasa nada, solo que me siento súper mal por Kamila. La ama con todo mi corazón, nunca voy a dejar de decir lo que sentía por ella, ella era mi vida – se lo dije llorando

—Lo siento mucho Henrry se lo que sientes.
Yo voltee a ver a bajo.

—Ya llegamos, bajete del auto.

—Que quieres que saltando salga —le dije volteando los ojos ¿Qué no me piensas ayudar a salir?

—Apurarte, yo no soy tú niñera —me dijo con una cara de arrogante.

Me ayudo a salir. Me para frente la puerta de la comisaria y pegue un suspiro profundo. No hallaba que hacer, sentía que iba entrar ahí pero ya no salir. Me jalo y caminé hacia dentro.