𝒜𝒻𝓇𝒶𝒾𝒹 ━ 𝐖𝐢𝐳𝐚𝐫𝐝𝐢𝐧𝐠 𝐖𝐨𝐫𝐥𝐝

𝔇𝔦𝔢𝔰𝔦𝔬𝔠𝔥𝔬

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Adhara lo siguió escaleras arriba, hacía el aula de Defensa Contra las Artes Oscuras. Al entrar, Moody se dirigió directamente hacia el escritorio. Sobre él había un libro grueso de forro marrón oscuro.

-Después de ver lo que hiciste en la clase me pareció buena idea darte esto- le dijo tomando el libro y pasándoselo- Prestado. Tienes que devolvérmelo al final del curso, me es un recurso muy útil.

-¿Qué es?

-Léelo- gruñó Moody con impaciencia.

Adhara leyó el título del libro; era un volumen de Defensa Avanzada Contra las Artes Oscuras, el tipo de libro que se podía utilizar para estudiar para los Timos o incluso los Éxtasis, que eran los exámenes más avanzados en Hogwarts.

-Creía que yo no le agradaba- murmuró la chica hojeando el libro.

-Eso no quiere decir que no me de cuenta de tu potencial.

-¿Mi potencial?

-¿Ya consideraste qué carrera quieres desempeñar en el futuro?- preguntó el profesor mirándola con expectación- Porque creo que tienes una mente muy fuerte y eso se valora mucho entre los Aurores en el Ministerio.

-¿Los Aurores?- Adhara estuvo a punto de devolverle el libro- No creo que piense que yo podría ser Auror.

-Pienso que podrías intentarlo.

-No, yo no podría trabajar ahí.

-¿Es por tu padre?- Moody centró ambos ojos en ella- ¿Crees que no lo permitiría?

-Creo que él ya tiene otros planes para mí.

-De cualquier forma- el profesor se encogió de hombros con indiferencia-, usa el libro este curso. Si te lo propones puedes desarrollar habilidades útiles.

-Se lo agradezco- la rubia bajó la vista y trató de parecer avergonzada-. Y lamento haber sido insolente con usted cuando convirtió a mi hermano en un hurón.

-No lo lamentas ni un poco- dijo el profesor mientras caminaba hacia la puerta y la joven lo seguía-. Sólo te daré un consejo, si quieres hacer algo importante con tu vida, tienes que dejar de meterte en líos por culpa del insensato de tu hermano. Él tiene que madurar y no lo hará si estás siempre detrás de él para limpiar lo que ensucia.

-¿Como sabe que estoy siempre detrás limpiando sus desastres?- preguntó Adhara a la defensiva.

-Los demás maestros hablan.

Moody le hizo una seña a la rubia para que saliera al pasillo. La rubia se detuvo un momento observando el libro que llevaba en las manos.

-¿A Theo también le dio un libro?- preguntó.

-Sí- contestó el ex Auror con brusquedad.

-El no me dijo nada.

-No es para que lo griten a los cuatro vientos.

A pesar de que le agradara que Moody pensara que tenía potencial, Adhara no tenía ánimos para leerlo en ese momento. Así que al llegar a su sala común, dejó el libro de lado y se puso a terminar todo el trabajo que los maestros le habían mandado hacer.

Llegada la media noche, Adhara ya había terminado la mayor parte de los deberes que tenía pendientes y solo le faltaba repasar un par de cosas. Para entonces estaba tan cansada que se fue a dormir de inmediato llevándose el libro con ella al dormitorio y guardándolo en su baúl.