DXD GALAXY (en Pausa)

Cybertronianos y Navis

Crédito al autor de DxD a Ichiei Ishibumi

Franja de desarrollo, APLS, planeta sin nombre.

El otrora pacifico mundo se volvió en el escenario de una encarnizada guerra de colonización que estaba devastando el planeta y sus recursos de forma terrible, en la tierra, el mar, el cielo y el espacio, ambos bandos se atacaban el uno al otro, con lo mejor que tenían, mientras la tierra de nadie entre ambos ejércitos serpenteaba atreves del mundo.

-¡Perdimos contacto con la capital!- alguien grito a sus compañeros.

-¡Son demasiados!- 

¡Explosivos!- alguien arrojo una pequeña caja cilíndrica hacia sus enemigos.

Esta emitió una onda expansiva que calcino a los que estaban sus alrededores mediante fuertes ondas de microondas.

Los mecánicos y metamorfosis cybertronianos poseía armamento con base de celdas de energía, desde cañones de plasma, rayos laser concentrados, armas con campos de iones, cuchillas
vibrantes y escudos holográficos, sus bases, fortalezas, vehículos y naves eran de estructura geométrica y estilizada.

-¡Continúen avanzando!-

-¡Sus tropas están retrocediendo!-

De un bastón en su mano salieron disparadas tres vainas que perforaron la armadura de uno de los cybertronianos y de las creció una planta, destrozándolo

Los Navis, al ser una especie de plantas sintientes y capaces de locomoción autónoma, sus armas orgánicas crecian en sus propios cuerpos o en ciertos individuos especializados en el “cultivo” de las mismas, distintos crecimientos capaces de lanzar sabia acida, esporas explosivas o semillas de crecimiento súper rápido.

Esta batalla se repetía con distintos resultados en todo el planeta, pero con solo unas cuantas zonas ricas en recursos tomadas como asentamientos estables, en el polo magnético norte, se
encontraba la capital de las fuerzas cybertronianas, Darhos una ciudad metálica que se construía de forma modular, enormes segmentos hexagonales formaban un panal que se adaptaba a los terrenos irregulares y permitían sentar un terreno plano ideal para la construcción de todos los edificios que la ciudad necesitaría, residencias, almacenes, fabricas y templos; en el hemisferio sur oeste se alzaba Argentia la selva fortaleza de los Navi, esta fortaleza como todo en la tecnología de esta especie de plantas inteligentes “crecía”, yendo en el terreno formando edificios de los troncos de arboles de prodigiosa altura, creando puentes con la ramas que se conectaban, casas en el interior de troncos que crecieron huecos.

-¡Escuchad mis! ¡hermanos de negro acero!-

-¡Oídme! ¡hijos de los campos dorados!-

Dos sacerdotes hablaban a sus seguidores, en lugares a miles de kilómetros de distancia; uno semejante a una antigua maquina de engranajes y pistones con vapor purpura saliendo de su cuerpo, su cuello era rodeado por quince monolitos negros con grabados en luces de distintos colores, portaba un como cetro de alta tecnología mientras daba discurso en una alta catedral de
acero, tuberías y luz; el otro, semejante a un roble humanoide con un fulgor azul surgiendo de sus ojos y boca, varios tatuajes en su corteza en patrones concéntricos, blandía un bastón con capullos transparente con una luz amarilla dentro con la que iluminaba una alto anfiteatro hecho de tronco y hojas.

-¡Estos días…!- Cybertroniano.

-¡Hemos visto…!- Navi.

-¡Un enemigo…!- Cybertroniano.

-¡Como ninguno!- Navi.

-¡Es indispensable mantener nuestra templanza!- Cybertroniano.

-¡Debemos mantener nuestro valor!- Navi.