08 (Taehyung)

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Cuando recibí la llamada de Hoseok suspiré. Estaba en mi casa, acostado en el sillón viendo un programa cuando el sonido de mi teléfono me interrumpió.

Al ver el nombre de Hoseok en la pantalla mi corazón empezó a bombear muy rápido, apague la molesta televisión y conteste.

-Hoseok ¿dónde estás? ¿Por qué te fuiste sin mi? - pude escuchar la respiración de Hoseok del otro lado de la línea, me puse de pie.

-Taehyung... Ayúdame. - tome una chaqueta y salí corriendo de mi casa, le pedí la dirección a Hoseok y segundos después ya estaba trepando mi auto. - Mierda, tranquilo.

Acelere, no me importaba, solo deseaba llegar a donde Hoseok, el gps ayudándome.

-¡Hoseok! - estaba sentado en la banqueta, sus manos escondidas entre sus muslos, su mirada perdida. Estaba asustado. - Hoseok. - me acerque y le toque el hombro, cuando me volteo a mirar sentí mi corazón doler al ver sus ojos rojos, no habían rastros de lágrimas pero se podía notar el dolor en ellos. - Está bien, ya estoy aquí.

-Taehyung. - asentí, me senté a su lado y lo rodie con mi brazo, Hoseok se recostó en mi hombro. - Pase la parada. - susurro, tan bajo que me costó escucharlo aún estando tan cerca. - Pase la parada. - repitió, apreté más mi agarre para mostrarle que ahora no debía tener miedo, ya estaba a su lado y no iba a dejar que lo lastimaran.

-Vamos a tu casa. - nos pusimos de pie, lo guíe y lo ayude a meterse al auto, aún estaba algo perdido así que también le coloque el cinturón de seguridad.

-Cinturones, cinturones. - sonreí.

-Vamos. - me puse en marcha, Hoseok me guió hasta su casa, en quince minutos ya estábamos en el estacionamiento del recinto.

-231404. - lo miré, Hoseok bajo la mirada pero pude notar un ligero rubor en sus mejillas. - 231404. - repitió.

-¿Qué? - se quito el cinturón y bajó del auto.

-La ubicación de mi departamento ya la sabes. - cerró la puerta y se metió al edificio.

-¿231404? - abrí los ojos en sorpresa, mi mirada viajando a donde Hoseok se había metido segundos antes.

¿Me había dado la contraseña de su departamento?

La felicidad me invadió, Hoseok confiaba en mi lo suficiente como para darme la contraseña de su departamento. Sonreí en grande, puse en marcha el auto.

Al día siguiente espere a Hoseok en la parada, cada tanto miraba mi reflejo en las ventanas del auto. Estaba emocionado.

-Hola.

-Hola Hoseok. Hola Yoongi. - salude al pálido, no estaba del todo contento por verlo alado de Hoseok pero debía aceptarlo. Yoongi era una persona especial para Hoseok.

-Hola Taehyung. - nos subimos al auto, deje a Yoongi frente a su empresa y luego nos dirigimos al salón.

Hoseok estaba nervioso, lo podía decir con ver la manera en la que jugaba con sus dedos, había hecho eso antes, pero no era lo mismo, había una leve diferencia.

-¿Estas bien? - Hoseok asintió. Su ceño fruncido levemente. - ¿Estas enojado? ¿Hice algo mal? - pregunte, los dedos de Hoseok dejaron de moverse, alzó la mirada y me vio.

Aún no me acostumbraba a aquello, a tener los ojos de Hoseok frente a los míos. Ahora que estabamos cerca podía notar que no eran tas oscuros como creí.

-Tu, uhm ¿sabes donde esta mi departamento? - lo pensé unos segundos, asentí.

-Habitación 204, tercer piso, puerta derecha.

-¿La contraseña?

-231404. - Hoseok volvió a bajar la mirada ¿lo había dicho mal? No, estaba muy seguro de que así era ¿cierto?

Cuando llegamos al edificio Hoseok se bajó rápidamente, intente detenerlo pero no me hizo caso. Acaso ¿se arrepentía de haberme dado su contraseña? Era lo único que se me venía a la mente, no podía haber algo más, tal vez solo me la dio por que estaba asustado y me preguntó todo eso solo para confirmarlo, ahora que sabía que si sabía de seguro estaba incómodo.

-Y yo que creí que lo había echo de buena manera. - susurre, no podía mentir, estaba decepcionado y un poco triste, pero si Hoseok quiere que olvide lo que pasó la noche anterior, entonces lo haré.

Cuando llegue ya estaban estirando, Hoseok en el mismo lugar que siempre, esta vez decidí estar detrás de él. Jin y Jimin me miraron sin entender.

-¿Qué?

-¿Peleaste con Hoseok? - me preguntó Jimin.

-No.

-¿Hoseok hizo algo? - pregunto Jin.

-¿Qué? No. - Jungkook llegó y comenzamos a estirar.

Cuando la clase finalizó Hoseok se quedó a hablar un rato con Jungkook, supuse que se estaban poniendo de acuerdo para la audición.

-¿Seguro estás bien? - Jin se acercó y se paro alado mío.

-¿Tienes la clave de la casa de Hoseok? - pregunte, Jin me miró con sorpresa.

-No, no se la da a nadie.

-Crees que, si por alguna razón, Hoseok le llegará a dar la contraseña a alguien ¿se podría arrepentir después? - Jin sonrió, miró hacia Hoseok y lo pensó unos segundos.

-Es posible. - asentí. Si eso había sido. - Pero no creo que Hoseok sea así. Puede que este arrepentido, pero no por la razón que crees. - lo mire con duda.

-¿Qué quieres decir? - Jin se encogió de hombros y se acercó a Jimin, dejándome sólo. - ¿Hay otra razón? - susurre.

Cuando Hoseok camino a la salida me apresure a tomar mis cosas e ir tras él.

-¿Vamos a comer? - pregunte una vez que estuve a su lado.

-Uhm, si. - caminamos al auto y nos dirigimos a la tienda.

Nos sentamos en la mesa de siempre, Hoseok tomó su botella de jugo de limón, lo miró unos segundos pero al final me lo dio.

-¿Puedes abrirlo, por favor?

-Si, claro. - abrí la botella y se la entregue de nuevo. - Hoseok.

-¿Uhm?

-¿Estas decepcionado de mi? - Hoseok me miró con sorpresa, bajo la mirada hacia su bote de ramen y comenzó a jugar con los palillos de madera. - ¿Es así? ¿Por qué?

Antes de que pudiera contestar sentí como un líquido me fue derramado, pasó tan rápido que no me di cuenta hasta que baje la mirada y note mi camisa manchada.

-¡Oh dios! ¡Lo siento! - alce la mirada, dos jóvenes me miraban con preocupación. - No fue mi intención, lo siento tanto, yo, yo, bueno, estaba distraído y se me resbaló de las manos.

Eran estudiantes, su uniforme bien planchado y las ojeras me lo informaron.

-Esta bien, no te preocupes.

-¿Seguro que está bien?

-Si, no pasa nada. - se despidieron con una reverencia y se fueron, Hoseok me alcanzó una servilleta. - Gracias. - intente limpiar el desastre que ahora era mi ropa.

-Uhm, no, no. Es jugo, no se puede quitar con solo una servilleta, necesita lavarse.

-Si, lo se. Pero no puedo lavarla ahora, voy a tener que quedarme así hasta que llegue a casa.

Una mueca se formó en el rostro de Hoseok.

-No, te debes cambiar, no es agradable ver a alguien con la ropa sucia.

-Oye, no seas tan malo, esta bien, voy a comprar una. Creo que aquí deben de vender.

-Uhm, no, las de aquí no son de buena calidad, además no son cómodas y raspan la piel.

-No tengo de otra, dices que no te gusta verme así.

-Uhm, Taehyung... ¿Quieres ir a mi casa?

ESPECIAL PARA MÍ/vhopeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora