✅La Princesa y el Rey Demonio: Len Kagamine y tú [Disponible en Inkitt]

Capitulo 5: La elegida

En los aposentos del Rey Demonio reinaba el sadismo y la lujuria, Len se mantenía ocupado dado fuertes estocadas a su concubina. El chico gemía y respiraba agitado

La mujer se mantenía a cuatro de espaldas a él, dejando sus partes prohibidas a su disposición. Yo este la sometía como a el le gustaba

—Esto te gusta ¿Eh? A que sí —se rió malévolo y siguió follando sin remordimientos, Neru se agarró a las sábanas cómo pudo

—Porfavor majestad, m-más despacio —Len golpeó su glúteo furioso

—¿Ah? ¿Te atreves a contestar a tu amo? eres una simple odalisca, una distracción. Igual que todas

La mordió el hombro fuertemente y la embistió sin piedad hasta llegar al clímax por enésima vez. Le sujetó el cabello hacia tras y se concentró en disfrutar del orgasmo mientras hundía de su jugosa polla en su interior

—¡Ah! Que bueno es esto —sacó su miembro y golpeó a la mujer en la cara—Levantate y arréglate. Ve a que te traten las heridas y después volverás al harén con las demás —Neru se colocó sus túnicas un poco dolida

—¿No piensa quedarse conmigo hasta mañana? —Len la golpeó de nuevo

—¿no me has oído? Sal de aquí ¡ya! —Neru terminó de colocarse la prenda y llamó a la puerta. Los sirvientes la abrieron y la concubina salió de la habitación decepcionada.

No había podido tener una velada de pasión como hubiese querido, últimamente el rey estaba de mal humor ¿Que le ocurría?

Ella caminó hacia la "Enfermería" donde el viejo brujo la cuidó allí y le dió el alta.

En los aposentos del Rey, el chico estaba ocupado intentando bajar su erección. Su pene palpitaba y le dolía. Necesitaba atención

Inclinó la botella de aceite curativo en sus manos y lo paso suavemente por su miembro

Len suspiró, aquello era muy relajante y se le quitaba el dolor enseguida. Se levantó de la cama, se vistió y se colocó su capa de terciopelo negro

—¡ah! Qué bien me siento ahora —el chico se colocó los cabellos y volteó encontrándose con su obsequio favorito

Con una sonrisa descubrió la tela del cuadro y se quedó mirando a la hermosa joven. Esa princesa le había encantado desde el primer momento. Ese retrato era "su tesoro más preciado"

Tocó suavemente la pintura y sú corazón se aceleró. Quería tocar esos cabellos tan brillantes, esos labios tan atractivos. Miró fijamente a la joven y sonrió con malicia

—Tu eres la siguiente —con mucho cuidado volvió a cubrir el retrato, y salió de su habitación

Caminó hacia el trono y dejando caer su elegante capa, se sentó en él. El chico llamó a uno de sus sirvientes y éste se arrodilló ante su señor

—¡tu! Vuelve al harén y prepara a la princesa humana, la quiero lista para esta noche, ¿entendido?

El sirviente asintió, bajó la cabeza haciendo una reverencia y se dirigió al Harén, pero de nuevo fue interrumpido

—Asegúrate que tenga los mejores tratamientos, no quiero ante mí a una simple concubina, quiero el aroma dulce de una auténtica princesa.

—Si mi señor

Neru llegó al harén, Las niñas la recibieron enseguida, ella se acomodó en los almohadones y todas se sentaron a su alrededor. Todas querían saber detalles sobre su cita.

—¡Neru! ¡Qué ha pasado! ¿no estabas con el rey? Creímos que no te íbamos a ver hasta mañana

La concubina sonrió con superioridad y se aliso los cabellos feliz