Si bien Brisa no tenía ánimos de ver a nadie, y menos aún a su novio, se encontraba en la casa de Nicolás. Sus padres habían salido por el fin de semana y le había prometido al chico pasar al menos un día con él.
N- ¿Que te tiene tan pensativa?
Interrumpió el silencio Nicolás, ambos estaban mirando una película en el sofá de la sala.
B- Nada, estoy viendo la peli.
Mintio Brisa y Nicolás solo le sonrió. Brisa fijó su atención en la película y trato de dejar de pensar en Angie y en lo que mal que la había hecho sentir.
No supo cuantos minutos se perdió en sus pensamientos, pero fue sorprendida cuando sintió como Nicolás acariciaba una de sus piernas, subiendo y bajando por ella, como solía hacer.
B- Nico, estoy mirando.
Se quejó la chica y segundos después volvió a sentir como el chico se acercaba a ella y esta vez dejaba un pequeño besos en sus labios para luego mirarla sonriendo.
Brisa fijó la mirada en el chico y suspiró, realmente no quería estar así con él, pero también sabía que debía dejar de pensar en Angie, quizás si volvía a fingir que nada había pasado con Angie, le era más fácil olvidarla. No tuvo que pensarlo mucho, cuando sintió los labios de Nicolás presionando contra los suyos, llevó sus manos a su cuello y continuó el beso entreabriendo sus labios. El chico rápidamente profundizó el beso, deslizando su lengua en la boca de Brisa. Jaló a la chica contra él y Brisa se acomodó sobre sus piernas, continuando el beso.
Brisa podía asegurar que había dejado de pensar en Angie por unos segundos, pero en cuanto el chico soltó sus labios y bajo a besar su cuello, llevando sus manos a su cadera, Brisa abrió los ojos y un nudo se formó en su estómago. No era Angie, esto no se sentía bien, no estaba bien.
Cómo pudo se separó del chico, ante su mirada desconcertada.
N- ¿Que pasa?
Preguntó al ver que Brisa ahora se ponía de pie. Brisa no sabía que responder y optó por mentir.
B- Lo siento, me tengo que ir. Me olvide que mañana tengo una prueba, tengo que estudiar.
N- ¿Es en serio, Bri?
Preguntó Nicolás con el ceño fruncido, claramente no le creía y a Brisa no le importaba.
B- Si, Nico. Nos vemos después, perdón.
N- Brisa, esper...
Nicolás no pudo terminar de hablar cuando vió como su novia salía de su casa, casi que escapando. El chico no entendía que pasaba y luego de llamar a su teléfono dos veces y no obtener respuesta, se resigno.
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Nuevamente el lunes había llegado y por primera vez, Brisa había sido la primera en llegar a la universidad. Quería tener la posibilidad de hablar con Angie, aunque lo veía muy difícil. La chica no le había respondido ningún mensaje y gracias a qué Lourdes le había consultado a Martina sobre ella, sabía que Angie estaba bien pero no quería hablarle por el momento. En cuanto vió que Angie y Martina se acercaban se puso aún más nerviosa.
B- ¡Hola chicas!
M- Hola Bri, ¿y Lu?
B- Debe estar por llegar, vine un poco antes.
B- Hola, An.
A- Hola.
Susurró la chica y Martina miró su interacción algo incómoda, por lo que rápidamente intervino.