We're millionaires (Hardzzello) / Precuela de Dos Tontos Y Un Bebé

Capítulo 36

Ben:

—¿Tienes tu mochila, Joey? —pregunté mientras revisaba que todo estuviera apagado en el cuarto.

—Sí —respondió desanimado mientras se me acercaba con mala cara hacia mí, no pude evitar reír al verlo así.

—¿Estás enojado? —me crucé de brazos frente a la puerta de entrada, él suspiró.

—Sí, de hecho, porque quería llevarte a las montañas a acampar y ahora no podemos.

—Cielo —hice un tierno puchero y coloqué mi mano detrás de su nuca—. Tenemos un montón de tiempo para ir hasta a la mitad del mundo, no te preocupes, ya tendremos oportunidad después, al parecer esto es importante para mi familia, así que debo ir. Y te necesito, no voy a aguantar estando allá sin ti.

—Ni yo, Benny —sonrió ligeramente y me besó—. Vamos ya.

—Sí, sí, sí, tenemos mucho por viajar, adiós habitación, te vemos en cuatro días —dicho esto cerré la puerta y ambos fuimos hacia el parqueadero para esperar a Jaime.

—Avisaré a mi mamá que volveré a casa, me da mucha ilusión volverlas a ver —dijo mientras sacaba su celular y escribía un mensaje de texto.

—¡Eh, chicos! —la voz de Gwilym a lo lejos llamó nuestra atención—. ¿Van a la ciudad?

—En efecto, mi estimado jirafón, ciudad gótica nos espera.

—Mimimimi —mi amigo rodó los ojos.

—¿Qué fue eso?

—Así sonó tu comentario en mi cabeza, Josephcito —sonrió—. Bueno, ¿me pueden llevar? No tengo amigos y ustedes se van, por lo menos quisiera visitar a mi abuelita.

—¿Tú nos viste cara de autobús, acaso? —habló Joe en broma.

—Ándenle, puedo ir en la perrera por si quieren que no haga mal tercio.

—No podemos hacer nada en frente de Jaime —me encogí de hombros—. Está bien, Gwil, puedes venir.

—¡Sííííííí! ¡Iré por mis maletas, no me tardo!

—Mugre Melman, se salió con la suya.

—Joey —lo regañé entre risas y lo abracé.

—¡Benny! —la voz de Katriona retumbó en nuestros oídos.

—Lo que me faltaba —Joe rodó los ojos y yo hice una mueca de desagrado.

—¡Mi amor! —chilló mientras se lanzaba a mis brazos y me plantaba un beso, pude sentir la incomodidad de Joe a mi lado, me fue imposible no sentirme mal por él.

—Holaaaa —simulé emoción—. ¿Qué pasó?

—Pasa que tu madre nos citó esta noche y no me has dicho para irnos juntos.

Con el rabillo de mi ojo pude notar que Joe volvió a rodar los ojos y se alejó de ambos.

—¿J-juntos? ¿No vendrá a verte tu padre?

—No, porque le dije que iría contigo —me sonrió y yo sudé frío.

—Ah... bueno... —no sabía qué decir, no quería que fuera con nosotros y que Joe se sintiera incómodo, además, quería pasar el tiempo con él en el auto, y con Kat ahí, no lo conseguiría.

—¡Ben! —giré al escuchar la voz de Lucy a mis espaldas—. ¿Ya nos vamos?

—¿A-a dón-?

—Joe, Gwil y yo ya estamos listos, ¿no nos iba a llevar Jaime?

—Se supone, pero al parecer nos va a cambiar por su novia, ayyy que cursi —Joe también se unió, yo no entendía a dónde querían llegar.

—Bueno, al parecer estás ocupado, llamaré a mi papá —dijo Kat mientras sacaba su celular de su bolso, pude ver con el rabillo de mi ojo a Lucy y Joe festejando disimuladamente.