Se acercó apresuradamente para darle un abrazo, aunque no lo supieran, ambos lo necesitaban. Donatello estaba en shock aún, ¿Debía regañarlo, sonreírle, corresponderle? la cálidez de su cuerpo lo conmovía y no podía evitar disfrutar de estar a su lado.
— Lo siento tanto, soy un estúpido... — Habló sin pensarlo, las palabras que salían de su boca eran el reflejo más puro de lo que había en su interior. — Te mentí, y te lástime tanto que ni siquiera se quien crees que soy. — se escondió en su hombro, no quería mirarlo, pero las gruesas lágrimas del humano lo hicieron alertarse. — No llores por favor, no valgo la pena, Casey. Odiame todo lo que quieras, pero no llores por mi.
— No puedo odiarte, Donnie... — Sus manos se juntaron, ambos sabían lo que sentían por el otro, pero las circunstancias no eran las mejores, si bien Casey se sentía traicionado estaba dispuesto a intentarlo nuevamente con el mutante, pero el estaba tan inseguro, que realmente no sabía si era lástima, o una especie de forma de vengarse. — Tampoco puedo evitar llorar, cuando te veo así me siento culpable de herir al chico que amo. — pasó su mano por la mejilla ajena.
— Quisiera que desde un inicio todo hubiera sido diferente, si tan sólo no fuera un monstruo, tú y yo podríamos estar juntos sin la necesidad de estar viviendo esto. — Su estómago se revolvía con cada palabra que se le escapaba, Casey era tan bonito, aún con esa profunda tristeza, solo quería estar con el para que la tormenta de su corazón mostrara un bello arcoíris, la lluvia era hermosa siempre que estaban juntos, los estragos que dejaba se transformaban en los milagros más maravillosos que se podía imaginar. — Pero no importa cuanto intente cambiar, nunca es suficiente... No puedo ser como tu. — ¿Por qué debía ser así? el hermoso y punzante recuerdo de sus manos enlazadas lo hizo sufrir internamente, ya no encajaban como antes, ni siquiera lo hacían, sus colores eran tan contradictorios...
— Y eso es lo que más me gusta de ti. — Una suave caricia se posó en su cabeza. — Eres especial, único porque eres tú. ¿A quién le importa cómo te ves? tú escencia es la misma, con o sin disfraz, y eso es lo que me caer por ti.
Su corazón se aceleró, no sabía que hacer o decir, pero no sentía que lo necesitara, sus ojos hablaban por si solos, iluminandose despues de tanto tiempo, al fin podía sentir ese hermoso calor recorrer su cuerpo y regresarle el color que le había sido arrebatado.
Las dos manos del humano tomaron sorpresivamete su rostro, acercándolo a el suyo para dejarle un suave beso en la frente, sonrieron al unísono, pequeñas risitas se les escaparon, Donatello podía sentir tranqulidad despues de mucho, y Casey al fin aclaró lo que sentía por el.
— ¿Sigues siendo tan dulce como recuerdo? — Habló el morado, ahora el se sentía algo avergonzado, pero le importaba poco, estaba desesperado por volver a verlo, su sola presencia se había vuelto indispensable. No pensó que sus labios volverían a unirse en un beso, uno especial que solo ellos dos podían describir.
A Casey no le importaba que su chico fuera un mutante, lo apegó fuertemente a el en un dulce abrazó, podía sentir sus látidos contra su pecho. Lo había extrañado con desesperación, el beso por su parte se intensificó, era una mezcla entre deseo y nostalgia peculiar que disfrutaban sin pela alguna, lástimosamente no podían quedarse así para la eternidad, el carraspeo de una voz los interrumpió.
— ¿Terminaron? Porque Mikey ya tiene listo el desayuno. — Ambos se sintieron ligeramente avergonzados, separandose ligeramente, solo dejando sus manos unidas, era dificil, pero Donnie encontraría la forma de disfrutar el peculiar encanto de aquella combinación. — Casey, ¿Te quedas a comer? — el mencionado rascó su nuca algo tímido por lo que iba a salir de su boca.
— La verdad no pienso irme otra vez, al menos no solo... — Miró al morado, quien le sonrió complice y dejo un beso en su mejilla para despues dirigirse a la cocina, realmente tenía demasiada hambre, llevaba días saltandosé las comidas y esas pastillas lo dejaron necesitado de un enorme banquete solo para el.
— Quédate, por favor. — le dijo antes de ir a pedirle a su hermano una porción de buen tamaño, y si era posible, toda la cazuela.
Casey sonrió, la mirada juguetona de April expresaba una profunda felicidad, la amargura poco a poco se iba a desparecer, un mes que se sintió como el más apagado de toda su vida por fin estaba culminando.
— ¡Bien, comamos rápido! Quedé con sunita en dos horas para ir al centro comercial.
Perdón, no se me da escribir dramas,
sólo se me da a mi ser la drámatica. Por cierto, ¿Ustedes prefieren a April con Sunita, o con Cassandra? A mi me gusta de ambas formas.
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Ilusión - Casey × Donnie
Fiksi PenggemarDespués de un viaje en el tiempo, y vivir el mismo apocalipsis dos veces. Casey solo quiere vivir una vida normal, o lo más cercano a ella. Y con el apoyo de April, y uno que otro documento falsificado, logra ingresar a la universidad. Por su parte...