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Les recomiendo escuchar desde el 1:05, cuando se nombre, así pueden sentircen en el libro :)

3...

2..

1.

Nuestro esplendor.

Viernes, último día de la semana, para muchos el mejor día, para mí el peor.

Puede que me guste estar en mi casa, leyendo, escuchando música y abecés escribiendo mi libro, pero el problema era compartir con mis padres, los amo, son los que me han cuidado y han querido toda la vida, pero su sobre protección me asfixia.

Estaba caminando por todo el patio o campus como le quieran decir.

No tenía mi libro, porque lo deje en mi casillero y para no llegar tarde otra vez, mejor lo deje allá.

Faltaban veinte minutos para entrar a mi clase de danzas, camine por todo el pasillo sin ningún rumbo, llegue al salón de música, estaba vacío, no se, pero algo me decía que entrara.

Paseé por todo el lugar y me detuve en un piano, hace años que no tocaba, ese era uno de mis sueños frustrados, mi papá siempre me insistió que tenia que ser igual que mi primo.

A mi siempre me gusto tocar piano, pero mi papá lo arruino cuando me insistía que tenia que ser igual de perfecta a mi primo, e visto que mis amigos siempre es competición con sus hermanos, pero como yo soy hija única y mis primos también, la competición es entre nosotros.

En la familia de mi papá todos es competición, de quien saca la mejor nota, nuestros talentos, quien es mejor en tal deporte, en música, quien es el favorito de mis abuelos.

Yo soy la mayor de esta generación y la única mujer, cuando era pequeña mis papás y yo vivíamos con mis abuelos, así que cuando ellos se iban a trabajar me dejaban con mis abuelos, eso hizo que creara un vinculo muy grande con mi abuela, que se llama igual que yo, Eira, ella pueda que no sea como las demás abuelas, no es la mejor cocinando, no es muy cariñosa, tiene el mismo genio que yo.

Ósea el peor.

Cállate.

El caso, es que ella es como mi segunda mamá, es la que sabe lo que me gusta y me apoya en todo, hasta me esta quiere buscarme una editorial para cuando termine mi libro.

Me senté en el banquito, que tenia el piando y puse mis manos en él, me acordaba de unas canciones, pero mi favorita All i want de Olivia rodrigo.

Empecé a tocar las notas, cerré los ojos para concentrarme y acordarme de la canción.

All i want is love that lasts — Empece a cantar — is all i want too much to ask.

Olivia era mi cantante favorita y esta canción — hace unos años — me hizo llorar, acababa de cortar con mi ex novio, el muy idiota me dejo solo porque no quise tener sexo con él, eso verdaderamente me dolió, porque estaba super enamorada de él.

Por eso ya no somos tan incrédulas.

Exacto.

— All i have is myself at the and of the day — y esta parte, es como estoy ahora en mi vida.

Termine la canción en la mitad, porque ya me estaba dando mucho sentimiento y no quería llegar a mi clase con la cara de llorona.

Después de dos segundos en pleno silencio, escuche aplausos, voltee la cabeza hacia la puerta, paralizada.

— Cantas, bien copito — dijo parando los aplausos y entrando al salón

— No debiste a verme escuchado — dije parándome y yendo hacia la salida — canto horrible.

— Claro que no, cantas muy bien, bueno no más que yo, pero cerca.

Puse los ojos en blanco, intente salir, pero él me tomo del codo y me devolvió.

— Es enserio, porque no quieres que te escuche.

— No quiero que nadie me escuche, no te creas tanto. Además, eres el primero quien me escucha cantar.

— Que gran privilegio tengo.

Intente salir, pero otra vez me devolvió.

— No deberías ocultar tu talento al mundo, podrías hasta ser una cantante famosa.

— No gracias, no esta en mis planes, mi sueño es ser escritora.

— Bueno pues una escritora famosa, los dos seriamos famosos, tu escritora y yo cantante, el dúo perfecto, ¿No te parece?

AHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH.

— ¿Qué?

— Nada, nada.

Ay dios.

¿Qué?

Nada, nada.

Sonó el timbre y por fin no me detuvo, los dos salimos de aula y nos dirigimos a clase, cuando todos entramos al salón la profesora se puso en medio y empezó a hablar. Yo estaba un poco distraída mirando a Jayden, no quería, pero lo hacía.

—...La película que vamos a representar será cenicienta, la nueva versión — desde ahí empecé a poner atención — Quiero que todos bailen la canción perfect de la película y necesito que dos de ustedes la canten.

Muchos levantaron la mano. Y claro escogió al chico arrogante.

— Jayden y cantaras con...

— Si me permite, profesora Bell, quisiera cantar con... 

No, no, no.

Si, si, si.

— Eira.

— Eira estás de acuerdo con eso.

— E...Yo...

— Muy bien, entonces Jayden y Eira cantaran, así que son pareja de baile y van a ir en el centro — volvió a su escritorio — Escojan una pareja, háganse a los lados de ellos dos, ¡pero rápido que no tengo todo el día!

A lo que grito todos, empezaron a moverse buscando una pareja y poniéndose en la posición que les dijo, Jayden y yo nos hicimos en el centro.

— ¿Por qué hiciste eso? — susurre irritada.

— Quiero que veas que eres valiosa, que puedes ser la protagonista de esto, que puedes mostrarle al mundo lo que puedes hacer y si tengo que impulsarte a hacerlo, por mí no hay problema.

Otra vez está siendo agradable, me hizo sentir un escalofrió por mi espaldas por su comentario, sonreí y tuvo que arruinar el momento la profesora Bell.

— Hombres una mano en la cintura de su pareja y la otra en una mano, señoritas una mano en el hombro.

Me puse nerviosa cuando puso su mano en mi cintura, sentí como mis mejillas empezaron a enrojecer ante su tacto, llevaba una camisa ombliguera así que sentí sus dedos en mi piel.

Mientras la profesora daba indicaciones el acariciaba mi piel, mi corazón acelero, su suave tacto me puso los pelos de punta, no me sentía incomoda, quería que hiciera eso todo el tiempo.

La profesora puso la música para hacer los primeros pasos, pero por culpa de Jayden no le puse atención a sus indicaciones.

— Solo has el paso básico del vals en ocho tiempos, luego te doy una vuelta y luego otra para volver a la posición inicial y hacemos el paso del vals por todo el lugar, ¿ok?

— Ok.

Bueno lo que sabemos es que al señorito, lo hizo a propósito para ponerme nerviosa, lo bueno es que ya se pasos son y la próxima clase me tocaba cantar al frente de todos y luego al frente de un monton de personas cuando concursemos. 

Nuestro esplendor (#1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora