Corazón de Cristal

Capítulo 5

He llegado a la conclusión de que tal vez la vida te hace más fuerte cada vez. Es duro. Pero, en ciertas veces, cierto.

Me despierto, me restriego los ojos y miro el techo un rato. Recuerdo lo que dijo Elliot, sé que no es gran cosa, pero se siente diferente, incluso raro.

Me levanto, desayuno y me baño. Me pongo mi vestido azul y mis zapatillas azules, de hace unos dos años. Es viernes, el último día que podré estar con Jessie. Quedé con ella para salir.

Leo "La sombra del viento" un rato. Este libro me personifica, es un relato de misterio y tragedia romántica. Es un enigma que solo se entiende si se lee bien. Lo leo acurrucada en el sofá, sin distraerme en absoluto. Amo leer, es mi pasión. Recuerdo una frase que tengo subrayada en el libro: «Los libros son espejos: sólo se ve en ellos lo que uno ya lleva dentro». Podría pasarme el día leyendo y no me aburro.

Veo la hora, son las 10:30. A las once debo estar lista para recogerla. Dejo mi bello libro -y mi favorito- en la cama y me voy a cambiar.
Me pongo mis jeans, mi blusa rosa con tirantes y mis botas hasta la rodilla. Cojo mi chaqueta, mi bolso, y me voy en el auto.

Jess y yo vamos al centro comercial (aunque yo odie ir de compras y a ella le encante, lo hago por ella). Compramos algo de ropa y zapatos. Almorzamos y fuimos al cine. Llegamos al parque, nos sentamos en una banca, mirando a los niños jugar.

-¿Sabes, Saba? Recuerdo que hace dos años, conocí a una chica en clase de biología, no hablaba mucho. Una chica de pelo castaño, triste y ojos almendra. No nos hablamos en toda la clase. Un día, en este mismo parque se me cayó una moneda. La iba a recoger cuando alguien la cogió y me la dió: la chica de biología, triste y con lágrimas en sus ojos. Le dio las gracias y le preguntó que le pasaba, a lo que respondió: "Nada". Pero no pudo contener más y dijo que su amiga había muerto. La abrazé y la consolé. La invitaba a caso a menudo y saliamos juntas. Era divertido, esa triste chica se fué encendiendo poco a poco y a recobrar vida. Desde entonces nos volvimos inseparables. Hablamos de nuestro primera encuentro y gracias a esa pequeña casualidad decidimos llamarla...

-La moneda del parque -agregué terminando la frase.

-Exacto -dijo sonriendo-, por eso Saba, quiero que me prometas que esté o no, seguirás siendo esa chica fuerte y divertida que conozco, y no la chica triste que conocí en el parque. Sé que te han lastimado mucho, pero no te desplomes, por favor. Por mí.

-Lo prometo Jess.

Nos quedamos en silencio y Jessie me vio a los ojos. Siempre sabíamos leer nuestras miradas: de alegría, tristeza o complicidad. Vi en ella una mirada e que decía: "Te quiero". Sin que ella dijera nada le respondí con una mirada diciendo: "Yo también". Nos abrazamos.

Nos despedimos y fuimos cada una a su casa, esperando volver a vernos en el aeropuerto.

Hola a todos! Perdón por haberme tardado pero aquí está el capítulo:). Este se lo dedico a mi mejor amiga @valeryrebeca :*. Estaba muy inspirada. Espero que les gusten, voten y comenten :3.
Gracias, los kelo! n.n
Bren242