Antes de Irte •𝑲𝒐𝒐𝒌𝒕𝒂𝒆•

𝙲apitulo 22

Me quedé sin saliva. Mis manos sudaban. Mi pecho dolía. Mi cabeza parecía querer explotar.

Pedí a Dios en mi mente que no fuese nada malo.

-¿Jinhyo?, ¿qué sucede? -logré pronunciar.

-Taehyung... Jungkook.. J-jungkook está... -comenzó a llorar y sentí como si una gran bola de bolos golpeara en mi pecho. Sorbió su nariz y trató de calmarse. Mi hermana preguntó qué sucedía pero la ignoré-. Jungkook tuvo un accidente.

Sentí un balde de agua fría caer sobre mi en ese momento se bloqueo todo mi sistema, crei el mundo retroceder y un intervalo en mi pecho que iba a cohibir sin respirar.

El no puede... Yo- ¿que?

-¿Qué? -sentí cómo el aire salió de mis pulmones y sentí mi corazón oprimirse-. Él... ¿Cómo está? -logré preguntar.

-Escucha, Tae. Él está muy grave. Está en urgencias, sólo quería preguntarte si podrías venir, por favor -dijo tratando de sonar segura pero su voz se quebraba.

-Claro.

Después de darme el nombre el hospital, le dije a mi hermana que me llevara. De inmediato asintió y puso en marcha el automóvil, yendo más rápido de lo normal, haciéndome sentir aún más nervioso.

-¡Jisoo!, maldición! ¡No vayas tan rápido! -grité alterado. Me miró de reojo y disminuyó la velocidad. Guardó silencio un momento.

-Tranquilo. Todo estará bien -trató de consolarme. Eso fue el detonante que necesitaba para que las lágrimas comenzaran a borrar de mí.

Lloré incontroladamente. Necesitaba compañía para soportar todo esto y tenía que hacérselo saber a Jimin, así que, aún con todo el llanto, la llamé. Contestó de inmediato como acostumbra.

-Park-dije entre sollozos.

-¿Taehyung?, ¿qué pasa?, ¿estás bien?, ¿ese idiota te ofendió? -lloré más fuerte al escuchar la última pregunta.

-Nat, Jungkook tuvo un accidente. Estoy yendo al hospital -informé aún llorando.

-Carajo. Calmate, Tae. Estaré ahí lo antes posible. No llores, Kim, todo va a estar bien -aseguró. Hice un sonido a modo de afirmación y colgué.

Después de enviar la dirección a Jimin por mensaje, seguí llorando pero en silencio. Traté de controlarme cada vez más hasta que pude razonar y empezar a pensar las cosas.

¿Un accidente? Mierda.

Yo había hecho enojar a Jungkook. Él se había marchado muy molesto de mi casa.

¿Qué le ocurrió?, ¿Lo habrá hecho a propósito?

Dios. Yo tengo la culpa de esto. Sé que es mi culpa. Yo debería estar ahí, no él. Pasé todo el camino lamentandome por idiota y exigiendo que Jeon estuviera bien.

En cuanto llegamos, bajé el auto rápidamente sin importar nada.

Llegué y le informé a una de las enfermeras.

-¿Jeon Jungkook? -pregunté. Miró un segundo la computadora y me miró.

-Segundo piso. Está en quirófano pero podría esperar -me sonrió.

-Gracias -contesté pero no devolví la estúpida sonrisa.

Cuando llegué al segundo piso, visualicé a Jinhyo. Se veía desaliñada. Después, pude notar a las otras dos personas que la acompañaban. Jimin y quiza una tia de Jungkook. El instituto estaba más cerca del hospital que la casa de el pelinegro, por lo que era razonable que hubiesen llegado antes. El padre de Jungkook no se encontraba, eso me extrañó.