-¡Este sitio es una locura!-Tai no era el único impresionado.
El misterioso lugar que Gwen prometió que nos encantaría se trataba de una especie de sótano subterráneo, a nuestro alrededor las luces neón resaltaban los dibujos y letras fluorescentes plasmadas en las paredes, aunque debo admitir que mis ojos no estaban precisamente puestos sobre cada detalle del lugar...
-Chicos somos siete así que Thomas y Harrison estarán conmigo, ustedes cuatro juntos ¿Qué les parece?-Gwen se interpuso en mi campo de visión, obligandome a observarla a ella en lugar de a Thomas.
-Bien pero ¿En qué?-Harry hizo la pregunta que seguramente nos pasaba por la mente a todos.
-Aquí tienen-El chico pelirrojo que nos recibió apenas bajamos hasta ahí y con el que anteriormente Gwen charlaba parecía ser el encargado del lugar,pues se acercó a paso lento sin poder sostener todo lo que llevaba en manos.
-¡Maldita sea! ¿Paintball?-Luis soltó en voz alta aceptando el chaleco negro que le extendía, a punto de saltar de emoción.
-Espero que esa disculpa sea sobre tus rodillas-Sonrió con autosuficiencia, colocándose el chaleco así que el resto la imitamos.
Luego de una breve explicación de lo que va el juego nos adentramos a la última habitación del largo y estrecho pasillo, encontrándonos con una habitación mucho más grande de lo que imaginé.
-Gwen te amo-Harrison besó su cabeza, mientras cogía un arma de la mesita de metal que se encontraba junto a la puerta.
-Vamos, bonita-Harry me extendió la única arma que quedaba sobre la mesa, indicándome dónde debía presionar para que la pintura saliera cuando el momento de usarla llegara.
-El lugar es suyo por una hora-El pelirrojo dijo antes de salir y las luces se apagaron apenas lo hizo, permitiéndonos tener una vista mucho más superficial de la habitación gracias a la luz negra.
-¿Qué esperan? ¡Corran!-La voz de Gwen fue la señal que esperábamos para salir huyendo de la vista de nuestros oponentes, ya que podíamos vernos unos a otros perfectamente.
Los primeros minutos transcurrieron en completo silencio; moviendonos a rastras para no ser descubiertos ya que al acumular tres marcas de pintura en el chaleco quedas fuera del juego.
-¡Becca!-Luis se puso de pie lentamente, acercándose a mi.-Gwen está arriba, del lado derecho-Me indicó, así que le seguí para ocultarnos tras un par de cajas que nos permitían tener en la mira a la chica.
-¡Hijo de...-La escuchamos maldecir, pues Luis accionó el arma en su dirección y aquellas palabras sólo confirmaron que había dado en el blanco.
-¡Tras las cajas!-La voz de Harrison no se hizo esperar, revelando nuestra ubicación.
-¡Muévete, muévete!-Luis me dió un suave empujón, así que me dispuse a correr pero no fuimos lo suficiente rápidos ya que una marca de pintura rosada se expandió por su pecho.
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But Daddy I Love Him || Tom Holland
Fanfiction¿Ella? Con una vida moldeada al gusto de su padre. ¿Él? Con un pasado que lo atormenta día a día. "Dicen que los chicos buenos van al cielo, pero los chicos malos traen el cielo a ti..."