《CAPÍTULO 12》

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Para mi suerte Mariana estaba tendida en el sofá completamente dormida y pude ver cuál era la razón. Había visto una temporada completa de Dr. House, bueno al menos no tendría que explicarle que dormiría con dos chicos hoy...

Fuí hacia mi habitación y empecé a buscar algo de ropa, tomé una playera gris con un estampado del logo de batman y un short gris que uso como pijama.

Fuí silenciosa hasta dónde estaba Mariana y me decidí a decirle que iría dónde Mingus, así podría justificarme luego.

-Mariana... tengo una pijamada en la casa de Mingus -susurré-.

-Hmmmm okay... Mingus... -respondió entre dormida y despierta-.

-Okay - yo sólo intentaba contener una risa-.

Salí del departamento y toqué el timbre de la puerta de Mingus, este abrió la puerta y estaba con una pijama bastante normal, una camiseta blanca con mangas rojas y un pantalón negro de dormir.

-¡ENANA! hasta que llegas ¡Pensé que te había llevado el Babadook! -comentó Mingus burlándose-.

-Idiota -reí-.

-¡Vamos! ¡Tenemos que ver otra película! -dijo el rubio chillando-.

-¿Otra de terror? -pregunté con cara de horror-.

-¡No tonta! ¡Veamos the interview!

The interview es una de nuestras películas favoritas, además está mi amor platónico James Franco.

-¡Mingus eres un genio! ¡Un genio teñido de rubio! -reí-.

-Eso es envidia pura -replicó el chico agitando su rubia cabellera-.

-Claroooo amigo... ¿Dónde está Chandler? -pregunté-.

-Tu amorcito se esta cambiando de ropa, pero... si quieres puedes ir a verlo cambiarse -bromeó-.

-Muy chistoso, ¿Veías como se cambiaba Hana? -ambos reímos-.

-No... pero veo la pared ¡es un parecido sorprendente! -rió-.

Iba a contestar pero Chandler salió hasta la sala, ¡hasta con pijama es perfecto! ¿Eso es normal?, ¡además la pijama ni si quiera es de él! Mingus se la prestó, eso debe ser magia.

-Voy a tener que quemar mi pijama -dijo Mingus con cara de asco al ver a Chandler con su pijama-.

Los tres reímos gracias a su comentario de diva.

-¡Tranquilo oxigenado! Sólo serán unos cuantos parásitos -reí-.

-¡Ew más como tú! -replicó Mingus mirando a Chandler.

Después de las bromas y hacer un par de sandwiches fuimos hasta la sala para ver The Interview.

-¡Rápido Mingus! -chille, ya que la diva no encontraba el CD de la película-.

-¿Qué vamos a ver? -preguntó Chandler-.

-Porno -contestó Mingus riendo-.

-Imbécil -le dije mientras le tiraba una almohada del sofá-.

-¡Lo encontré! -gritó Mingus-.

Bnm prti -balbuceó Chandler, claro? cómo iba a decir algo entendible si se estaba comiendo montañas de palomitas de maiz.

-¡Traga antes de hablar animal! -gritó Mingus-.

-Dije que bien por ti rubiesita -dijo Chandler pasando la comida-.

-¡Callense va a comenzar! -bufé-.

-¡Nooooo James Franco no por favor! -chilló Chandler con una almohada en la cara-.

-Deja a mi amor platónico en paz Chandler -rodé los ojos-.

-Pfff yo actuó mejor que él -replicó-.

-Nope -contesté-.

-Tienes que verme actuar señorita... Mingus saca esa basura y pon "Mercy" -dijo Chandler-.

-La hemos visto 130 veces Chandler, ya sabemos que estás bueno -contestó el rubio-.

Oh si que sabemos que esta bueno

-Es una orden Mingus Reedus -chilló Chandler-.

-Te odio Chandler Riggs -bufó Mingus-.

Rato después ya estabamos viendo Mercy... después de todo Chandler no era mal actor, pero no es James Franco eso es seguro.

-¿Quieren soda chicos? -preguntó Mingus-.

-¡Sí! -dijimos al unísono Chandler y yo-.

-Levantense a verla -dijo riendo mientras iba a la cocina-.

-Mal chiste -grité-.

-No me interesa -respondió-.

Seguía concentrada en la película... no porque Chandler actuaba en ella pffff claro que no.

Metí mi mano para tomar palomitas del recipiente y me encontré con la mano de Chandler.

¿Qué hice para merecer esto?

Entonces él desvío su vista de la pantalla para ver hacía mi, genial genial genial tranquila ___ este chico acaba de romper una relación, respira, respira.

Me volteé a verlo y aún tenía su vista fijada en mi, con una sonrisa hermosa... mi corazón late a mil por segundo sólo de verlo, no quería arruinar el momento pero tenía que hacerlo.

-Chan... -no pude terminar la oración ya que sus labios se posaron sobre los míos-.

¿Qué mierda esta pasando? ¿Me quedé dormida? ¿Por qué me besa? ¿Por qué se siente tan bien? Tantas preguntas rondan mi mente y yo sólo correspondo al beso, ni si quiera puedo pensar en moverme... cuándo de repente...

-¿¡QUÉ!? -gritó Mingus dejando caer un vaso con soda que se derramó por todo el piso-.

Mi cuerpo reaccionó ante el estallido del vaso y me separe de inmediato.

-¿Qué hacen intercambiando parásitos en mi sala? ¡calenturientos! -exageró el rubio riendo-.

Me enrojeci de inmediato, no sabia que decir ni como actuar ni nada, no sabia absolutamente nada en ese momento.

-Iré por algo para limpiar eso -dijo Chandler antes de salir corriendo hacia la cocina más rojo que un tomate-.

-¡Oh mira que tarde es Mingus! iré a tu habitación a dormir, bye querido. -dije con un bostezo falso-.

-¡Oh no! ¡___ Blum me explicarás esto!.

Muy tarde, salí corriendo hasta su habitación y me encerré allí... no sé cuánto tiempo paso pero me dio sueño real así que quité el seguro de la puerta y la deje abierta para que los chicos pudieran entrar a dormir cuándo quisieran.

Solo pude suspirar recordando el corto beso de Chandler... y con esa imagen me quedé completamente dormida.

-Dana.

"Let it be" (Chandler Riggs y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora