"Let it be" (Chandler Riggs y tú)

《CAPÍTULO 15》

|| Narra Mingus ||

Me desperté por la fuerte luz que atravesó mi ventana, me levanté de la bolsa de dormir para poder observar mejor, vi a ___ aún dormida en su cama...

___ es linda, la primera vez que la vi me dio el susto de mi vida, no sólo por el hecho de que se caería por las escaleras, sino por que mi sangre se fue al suelo al creer que era Alice o al menos su fantasma, gracias al universo mantuve la cordura y me di cuenta que no era ella... Cuándo empecé a conocerla pensé que quizás podría llegar a gustarme, pero al parecer no era el único que pensaba que ___ se parece a Alice, ese "pequeño" detalle me impide totalmente cualquier sentimiento hacia ella... Me siento tonto, quizás este perdiendo una oportunidad con una chica, Chandler y yo debemos hacernos de la idea de que ___ no es Alice, pero será difícil.

Ahora que lo pienso... ¿Dónde está Chandler? ¿Se fue?.

Me dirigí hacia la sala del departamento con la idea de que Chandler se había ido... pero no, estaba sentado en el sofá mirando hacia el frente, cabe recalcar que el televisor estaba apagado.

Ahora me sorprendo de la reacción de Chandler la primera vez que vio a ___, no es como la actual... yo hace tiempo había dejado de pensar que ___ era Alice, ¡hasta le presenté a Chandler!, pero en el fondo lo sabia, se parecen y eso hace que la mire como la miraba a ella...

-¿Te gusta lo que ves guapo? -comenté en son de broma al verlo tan concentrado mirando fijo a la pared-.

-Imbécil -rió-.

-¿Dormiste bien? -pregunté mientras me acercaba-.

-No estoy seguro de si dormí... -contestó-.

-¿Te puso nervioso dormir cerca de dos bombones a noche? -bromeé-.

Él rió un rato...

-¿Mingus te puedo preguntar algo?.

-Mira si es sobre mi cabello, ¡es completamente natural! -dije en tono de diva-.

-¿Te gusta ___? -preguntó aún riendo por el comentario-.

-¡No, ew!... Yo soy más de morenas, altas con curvas... -respondí-.

Bueno Bueno, ___ no está tan mal, y estuve con Hana y Hana en algún diccionario debe ser sinónimo de pared -pensé-.

-Tranquilo tigre -rió- ¿No te gusta porque se parece a Alice o no te gusta por ser ___?.

No sabía que contestarle, ¿supongo que ambas?, no lo sé, hay vamos de nuevo con Alice, ¿Qué hice para merecer esto?

-Hmmm... su duda ofende joven Riggs, no me gusta porque no me gusta -sonreí-.

La peor respuesta del mundo...

-Mingus esa no es una respuesta -rió-.

-¡Es mi amiga Chandler! Imaginalo así... ___ es como tú, porque tú eres mi amigo, por lo tanto no me gusta -dije entre risas-.

Si la anterior fue la peor respuesta del mundo, esta es la peor explicación del mundo.

-Pero... ¿no crees que con el tiempo tú puedas sentir algo hacia ella? -preguntó tímido-.

-Si el tiempo hiciera que los amigos fuesen novios, tú y yo estaríamos felizmente casados -bromee-.

-Ew, ¿lo imaginas? El matrimonio Riggs Reedus -rió-.

-¿Por qué mi apellido es el segundo? ¡eso es de pasivos! -chille-.

-Porque eso eres... -rió- ¡Mingus para! Concentremonos en el tema... entonces, si tú no estás interesado... yo podría... ya sabes, ¿invitarla a salir y eso? -preguntó-.

-¿What? ¡Tú no puedes nada! -respondí-.

-¡Pero me acabas de decir que no te gusta! Me confundes... -chilló-.

-¡No es por mi tonto! -rodé los ojos-. ¿Y la chupasangre? ¿La vas a encerrar en tu closet o qué?.

-Ahhhh cierto... Hana... se me olvidaba ese pequeño detalle -suspiró-.

Quería preguntar si quería salir con ___ por parecerse a Alice o por ser ___... pero si lo pregunto tendremos la misma charla de ayer y realmente no quiero complicarme la vida.

-Pequeño detalle... claroooo, tú y yo sabemos que aunque dejes a Hana ese no será el mayor problema...
-dije irónico-. ¡Parecemos chicas pidiéndonos permiso para salir con alguien, entonces así termina un hombre después de dormir cerca de otro! -reí-.

-Deja de decir tonterías Mingus -rió-, y si te refieres al amor de mi madre a su nuera Hana... no será un gran problema, el encanto Riggs arregla todo -dijo egocéntrico-.

-Cállate y hazme algo de comer -ordené-.

-¿Te apetece un sandwich de puño? -preguntó risueño-.

-Qué mal cocinero eres, no hagas nada, de todas maneras así sabre que no intentarás envenenarme -contesté, esto provocó una gran carcajada de su parte-.

-Dana.