Alfa implacable

Capítulo 5

Lo peor de todo es que si vinieras, yo no sabría decirte " ..." -  Andrés Ixtepan

Pov - Killian Daves

El frío del suelo cala mis huesos, pero en toda la oscuridad y después de varios días soy capaz de oír unas pisadas, soy capaz de olerle, rabia, odio, amor... 

Me giro sobre mí mismo para alcanzar a ver los pies de Alarik, él se detiene y me observa trata de abrir la reja pero está cerrada.

—Killian, Killian... - no le respondo, y él trata de arrancar las barras, me levanto con esfuerzo y enfrente de él, consigo levantar la cabeza para poder mirarle.

—Ese es mi nombre

—¿ Qué te pasa? - ladeo la cabeza para saber si lo dice enserio, me dijeron que él estaría igual pero yo le veo bien.

—¿ Por qué a tí no te pasa?

—Killian...

—Porque lleva el sello de una bruja, hermano, tú sufres por los dos, su dolor pasa a ser tuyo por eso él está tan bien — Selene, me mira desde detrás de Alarik.

—Entiendo

Mi hermana viene muchas veces, cura las heridas y me alimenta, me acompaña y se que no soporta a Alarik, que mi mate siga vivo se que no es porque Selene no quiera asesinarlo.

—¿De qué hablas? —Alarik se ha enfadado y se ha girado a mi hermana, va a lanzarse contra ella, pero pasó la mano por las rejas y agarro su cuello por la espalda.

—No te atrevas —Alarik se escapa fácilmente del agarre, y me caigo al suelo por el impulso.

—Killian, yo lo siento, no era mi intención —Selene se acerca a él y le rocía unos polvos, Alarik no se da cuenta y yo decido irme de nuevo a la cama que hay al fondo de la celda.

—He terminado de hablar contigo

—Killian... - Alarik va a hablar pero mi hermana interrumpe

—Killian estará listo para la fiesta de compromiso de mañana, yo me encargaré, ahora puerta.

Tal como dijo Selene, consiguió contactar con Dilaira para que yo tuviera fuerzas suficientes para levantarme.

—¿De quién es el compromiso? ¿ Has vuelto con Duman?

—Killian y no —Dilaira da respuestas cortas y trata de marcharse, Selene la detiene del brazo y le susurra algo antes de que pueda irse, la única respuesta es un asentimiento por parte de Dilaira.

—¿Killian? —pregunto mientras me pongo la chaqueta

—Si, vamos la gente ya estará bebiendo.

—Solo te interesa eso —me permito darle una sonrisa y ella me la devuelve para guiarme hasta la mansión.

En el salón principal, cientos de personas vestidas formalmente se relacionan entre ellos con una copa de champán en la mano, mis ojos me traicionan y miro allá donde se encuentra Alarik, del brazo de Devika se pasean felizmente. Decido marcharme a la barra para pedir un whisky y al poco Alarik agarra mi codo.

—Killian, por favor, escúchame.

—Ahora, quieres que escuche, pero cuando yo te pedí hablar tú no querías, cuando te llame no me escuchaste, ¿por qué haría tal cosa como escucharte?

Tiene ojeras y se nota que la poción que desvanece el sello le está haciendo mella, yo tiro para soltarme y me voy, mientras veo por el rabillo como el se bebe mi copa y la suya de un trago, para luego pedir otra más antes de marcharse al lado de la pelimorada.

Lo peor de todo es que si vinieras, yo no sabría decirte " YA ES TARDE" -  Andrés Ixtepan