Capitulo 3

66 4 0
                                    

-Narra Sebastian-


Me alegró el conocer a alguien que sabe como divertirse, desde el comienzo fue amistoso así que supuse que seriamos amigos, Jovani se veía de mi tipo... pero después de lo que pasó, no pienso ser amigo suyo; me quedaré con Max cueste lo que me cueste, no podía imaginar que terminaría haciendo eso.... yo solo quería beber y conocer más a esos tipos, pero cuando vi que Jovani empezó a besar a Max, mi cuerpo empezó a reaccionar por si solo, jamás pensé en hacer con un hombre.... pero... al ver a ese chico tan lindo y sonrojado no paré de pensar en que quería que fuera mio, tenia tanta curiosidad de lo que se sentía hacerlo con un hombre que dejé de pensar en otra cosa.

Comencé a besarle y podía escuchar como se resistía de gemir, comencé a tocar sus pezones haciendo círculos y pellizcan dolos suavemente, en verdad mi cuerpo estaba caliente, no me importaron las suplicas de Max, actué como mi cuerpo me lo ordenó, luego... cuando por fin pude sentir más de él y estaba a punto de arrancarle la ultima prenda que le quedaba encima, Jovani se arrepintió, se paró dando un golpe muy fuerte a la pared, no le di tanta importancia, si el quería parar que se fuera, yo no dejaría que este manjar se me escape.

Al escuchar a Jovani furioso pidiéndome que me detenga me hizo enojar a mi, quien se creía ese cabrón para gritarme? NADIE! puede hablarme de esa forma.... me contuve un segundo, no quería asustarlo, miré a Max y sentí algo de pena.... estaba todo rojo y su expresión mostraba tanto terror que me hizo pensar en lo que estaba haciendo, Max con el aire que le quedaba suplico que nos detuviéramos y Jovani sin pensarlo lo arrebató de mis brazos después de haber discutido un poco mas, quería que se quedara y termináramos con el experimento, Max se cambió a toda prisa y salio corriendo del lugar casi llorando. Antes de que Jovani saliera corriendo tras mas le lancé una amenaza:

-crees que esto se quedará así?!?!- me arrebató algo que yo quiero, nadie, no hay una persona que pueda arrebatarme lo que es mio, el ya tiene mi marca y no me rendiré hasta conseguir lo que deseo.... no me rendiré con él, por alguna razón, desde el momento en el que Jovani salió de mi casa, lo único en mi mente es Max.....


-Narra Max-


-(¿qué es esto?, ¡¿qué le pasa a mi cuerpo?!, ¿Por qué no puedo parar de correr?...)- pensé, al parar de correr me di cuenta que había llegado a una parada de autobús, me sentía confundido, no podía entender la situación en la que me encontraba hace unos momentos... ¡Estaba apunto de tener sexo con 2 hombres! Mi mejor amigo y un chico que acababa de conocer.

De repente comenzó a llover, no tenía donde refugiarme así que deje que la lluvia me empapara mientras esperaba a un bus para ir a casa.

. . .


Al día siguiente el despertador sonó, me levante sin ganas, a decir verdad no me sentía bien del todo, aún así quería ir a la escuela, no quería ser un cobarde pero no sabia como ver a Jovani y a Sebastian a la cara, me sentía tan avergonzado.

Al desayunar note a mi madre preocupada pero agradecí que no me hiciera preguntas. Al terminar salí de mi casa y me dirigí a la parada del bus.

Me encontré con el mismo chico del otro día así que le sonreí y lo salude con la mano.


-Me gusta mas esta manera de saludar, hola bastardo- dijo con una sonrisa un poco amarga.

-¡No me digas bastardo!, dije que lo siento.... Marshall?-

-Wow mínimo te acuerdas del nombre de las personas que tacleas-

- Mi nombre es Max si es que se me olvido decírtelo-


Llego el bus y él subió con migo lo que me pareció extraño hasta que me contó que había sido trasferido a mi escuela, le pregunte si quería ser mi amigo pero él ni se inmuto así que el resto del viaje fue en silencio.


Cuando llegué Marshall ya no estaba -(Wow que rápido)- pensé.

Entré al salón y note que Sebastian y Jovani ya estaban en sus asientos así que tome el mio *cabe mencionar que este se encontraba entre esos dos* se notaba la tensión en el aire pero no tenía ganas de romperla en ese momento.


El profesor entró y empezó a dar su clase, sentía los ojos pesados así que me acurruque entre mis brazos y me quede dormido.


-Narra Jovani-


No podía prestar atención en clase.... no podía dejar de pensar en lo de la otra noche, seguí undiendome en mis pensamientos hasta que la voz del profesor me saco de ellos.

-Max despierte no es hora de dormir- dijo mientras lo movía.


Pude notar que su cara estaba roja así que no dude en levantarme y tocar su frente.

-¡Profesor tiene mucha fiebre!-

-¡¿Eh?! pues llévelo a .....- no lo deje terminar lo tome en mis brazos y me dirigí a la enfermería.


. . .


- 38,6° - dijo la enfermera un poco preocupada - por ahora dejemosle descansar cuando despierte le daré un poco de medicina-


Cuando salió de la habitación mire a Max, me sentía preocupado, mire su rostro sonrojado por la fiebre, sus labios me tentaban a besarle, inconscientemente me fui acercando hasta que la puerta de la enfermería se abrió...


-Parece que llegue justo a tiempo-

-¿Qué quieres Sebastian?- dije dándome a vuelta para encararle.

-Vengo a evitar que tomes lo que es mio...- dijo sonriéndome maliciosamente, eso más sus palabras me hicieron enfadar, lo tome del cuello de la camisa con intención de pegarle pero Max empezó a balbucear mientras dormía lo cual se me hizo adorable y sin pesarlo solté a Sebastian.

-Vete! no tienes nada que hacer aquí- le dije

-¿y tu si?, de seguro en cuanto me vaya tu atacaras cual lobo a un cordero indefenso-


Como me hacia enojar pero era cierto, ya no sabia como detenerme con respecto a Max, me sentía miserable, querer aprovecharme de él mientras esta tan indefenso, pero no me iría de ahí, tampoco confiaba en Sebastian.

Nos quedamos observándonos durante varios minutos en silencio, hasta que la enfermera nos mando a clases de nuevo.






Uno no es suficiente para dos (Pausada)  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora