Capitulo 28

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-Narra Jovani-


-Jo-jovani... ahh ahh- 

-Profesor Diggory- lo tenia gimiendo abajo de mi, cada parte de su cuerpo era tocada por mis manos.


Estaba excitado por la expresión tan lasciva de su rostro, quería devorarlo, empece a lamer sus rosados pezones mientras que con mi mano masturbaba su miembro que ya exigía atención.


-Ahhh s-se siente bien.... ahh- me encantaba que se retorciera de placer.

-Vaya que es un pervertido profesor- levante mi rostro para mirarle con lujuria y deseo.

-Ce-cedric.... dime Cefric- con sus manos atrajo mi rostro al suyo para que nuestros labios se juntaran.


Nuestras lenguas se entrelazaron y se movían con desesperación como si fuera la primera vez en mucho tiempo en que lo hacían, pero la falta de aire nos separo.


-Cedric..- dije jadeando, era bueno, era adorable. Lentamente se acerco a mi oido.

-Métemela-susurro.


Fue la gota que derramo él baso, y a pesar de morir por enterrarle mi miembro, no quería lastimare.

Metí mi dedo en su entrada, después fueron dos y al llegar el tercero empece a simular embestidas.


-Ahhh.. no me tortures... te quiero dentro..- 

-Es por tu bien... pero ya no tienes que esperar... te daré lo que deseas.. mngh- coloque la punta de mi miembro en su entrada cuando...


RING!!! RING!! RING!!!


-AAAHHH!!- desperté exaltado.


Mire mi despertador... 6:15.... había sido un maldito sueño!!!!

Y no solo eso, también me había dejado una gran erección.... había tenido un maldito sueño húmedo, y para acabarla con el profesor...

¿Tanto me había afectado aquella broma?!.... no podía sacar su rostro de mi cabeza. Lleve mi mano a mi erección y empece a moverla de arriba abajo, su rostro sonrojado y lleno de lagrimas seguía en mis pensamientos, el sonido de sus gemidos... seguí hasta que me corrí.

No solo había soñado con él, si no que también me había corrido por él... RAYOS!


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Llegue a la escuela, no sabia si disculparme con él por lo ocurrido el día anterior, aunque tampoco quería verle la cara... pero aun así no quería huir de la situación, quería disculparme.

Me dirigí a su oficina, pero me quede plantado en la puerta, me costaba entrar, no se si era vergüenza o.... no se.


-Basta!- pude oír su grito.


Sin pensarlo dos veces abrí la puerta para ver que el profesor de gimnasia tenia acorralado al Profe Cedric contra su escritorio. Tenia una de sus manos en su cintura y la otra en su barbilla.


-Profesor Diggory! quisiera hablar con usted- entre con la cara mas seria que pude, y de un empujón los separe poniéndome entre los dos.

Uno no es suficiente para dos (Pausada)  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora