Varios años pasaron desde esa noche, años en los que la vida de Thomas cambió por completo; se mudó a otra ciudad y, olvidó todo lo relacionado con Adam.
Jessica Coleman, una chica risueña pasó por la casa de los Hoffman, quería parar a buscar a su mejor amigo e para irse juntos al instituto. Tocó el timbre junto a la puerta y pocos segundos después escuchó los pasos enérgicos de alguien que bajaba las escaleras y acercándose a la entrada.
— ¡Voy! —Al abrir la puerta, Thomas se encontró a su amiga de cabello rizado y piel morena esperándolo; al verla la tomó por la muñeca y la haló para abrazarla—. ¡Jess! Cuanto tiempo sin verte, han sido unas vacaciones muy largas, a pesar de tener a mi hermanito, Mat, no se compara contigo.
—Yo también te extrañé... —su voz no se escuchó casi debido a que tenía su cara contra el pecho de su amigo—. Thomas, no puedo respirar bien.
— ¡Oh, perdón!
—No hay problema, todo sería más fácil si tan solo fuera un poco más alta. —Comentó, colocó su mano sobre su cabeza y moviéndola para comparar su altura con la de su amigo.
—No digas eso, eres perfecta así como eres. —Dijo, le revolvió el cabello y le regaló una pequeña sonrisa, que dejó al descubierto el pequeño hoyuelo en su mejilla izquierda.
—Lo dices porque eres quince centímetros más alto que yo, —señaló—. Mírate, no compito contra tu metro ochenta.
— ¿Qué? ¿De qué hablas?
—Es la verdad, no quiero ni imaginar los comentarios de los demás al verme, el año pasado fue horrible, Rebecca y su grupo no dejaron de molestarme, —se cruzó de brazos y chasqueó con la lengua—. La peor parte, y es la que más me enfada es que, como es la hija del director del instituto no recibe algún castigo.
—Vale, —Thomas entrecerró los ojos y, con las manos sobre su cintura y una voz juguetona preguntó—. ¿Todo esto es porque te dijeron que ahora debes comenzar a usar lentes antes de que tu vista empeore?
— ¡Es horrible! Soy bajita, mi cabello se esponja con facilidad y ahora debo usar lentes. Sin embargo, Rebecca sí es una persona horrible y lo sabes.
—Ya lo hemos hablado Jess, es solo para que tu vista no empeore, ve el lado positivo.
— ¿En serio acabas de decir eso? —Le preguntó con ironía mientras arqueaba una ceja.
— ¡Perdón! No era mi intención, no pensé lo que dije, —respondió nervioso, trató de relajar el ambiente luego del silencio incomodo que provocó y; ya que ambos estaban tan inmersos en la conversación no notaron que alguien se acercó.
— ¡Mamá, deprisa! —Gritó Mateo desde la entrada al interior de la casa—. ¡Recuerda que no podemos llegar tarde, sobre todo por faltar la primera semana de clases!
— ¿Listo para irnos, hermanito?
—Claro, —al mirar al frente, Mateo se impresionó de encontrar a Jessica allí, de los nervios apretó una de las correas de su mochila, tragó saliva para aclararse la garganta—. Hola Jessica, no... sabía que estabas aquí, ¿Cómo... has estado?
—Hola Mat, —con una mano acomodó su cabello, rio por lo bajo y sonrió para el chico—. He estado muy bien, pasé unas vacaciones increíbles, aunque los extrañé mucho a ambos.
— ¿Si? —Preguntó Mateo asombrado por la respuesta, sintiéndose feliz de saber que la chica que le gustaba pensó en él durante las vacaciones.
Una bocina sonó y ambos se giraron para ver que Thomas y a Miriam, la madre de ambos chicos, estaban dentro del auto. Mateo cerró la puerta de la casa, y acompañado de Jessica fueron hasta el vehículo, subiéndose junto a ella en la parte trasera, mientras que Thomas iba en el asiento del copiloto; Miriam encendió el auto y arrancaron con rumbo al instituto.
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ARMAGEDÓN
Bilim KurguAl reencontrarse con Adam, Thomas Hoffman deberá prepararse para luchar y defender su planeta; de la amenazante llegada de los visitantes espaciales. 👽 Thomas nunca se imaginó que, la llegada de un fantasma del pasado llamado Adam Blum; alteraría s...