Realidades, la búsqueda

21. Motivos para luchar

Una misión completada, un tripulante muerto, fue el saldo de esta salida en el espacio exterior, algo que aunque era una gran posibilidad, seguía impresionando a Alexi, que nunca se imaginó ver morir al Capitán América delante suya, de una forma tan horrible.
 
—¡Ya pasamos! —gritó Quill por el comunicador, Shadow seguía peleando, pero él sabía que si seguía ahí tarde o temprano moriría, sus contrincantes eran demasiado poderosos, con un último rayo de su anillo pudo alejarlos bastante, dándole tiempo para atravesar el portal antes de que se cerrara, dejando atrás a los dos villanos.
 
El erizo rápidamente se pegó a la nave de Quill, pasando por todo el proceso antes de meterse a la nave y quitarse su transformación, para ponerse otro de los tantos trajes de repuesto, aún conservaba la espada de griffindor y además ahora que había matado a un xenomorfo tenía la capacidad corrosiva del ácido de su sangre, haciéndola aún más poderosa y eficaz, aunque claro, todos ellos estaban tranquilos y felices en su nave, sin imaginar que la nave que los estaba siguiendo portaba una desagradable noticia.
 
—No puede ser… —dijo Alexi, seguía con lágrimas en los ojos y su voz no daba para articular más palabras, volteó a ver los dos pedazos del escudo del cap, los pudo recoger y meterlos en la nave, pero hasta eso daba una impresión fuerte, algo tan resistente partido en dos como si fuera papel, dejándole en claro que Tails Doll a pesar de su apariencia de simple peluche, era igual de peligroso que todos los demás— …Ahora asistirá a su cita capitán… Ahora sí —añadió con tono chillón, en la segunda guerra mundial le había prometido a Peggy Carter que tendrían una cita y el chico se lo imaginaba con ella ahora mismo, tratando de consolarse aunque fuera un poco.
 
Las naves aterrizaron, algo apresuradas, pero bien, todos bajaron de las naves para ir a recoger a Alexi y al cap para irse en la nave principal al universo central, pero todos se extrañaron de que ninguno salía.
 
—Oye Alexi ya aterrizamos —dijo Shadow, en ese instante la compuerta empezó a abrirse, Alexi salió, pero con una desgarradora imagen.
 
El chico salió con el cuerpo del cap, con los restos del escudo encima de la herida mortal, su casco puesto no dejaba ver la tristeza reflejada de su rostro, los demás se quedaron observando, Hermione no tenía activado ningún micrófono y soltó un grito de susto dentro de su traje, hace apenas unas horas estaban bromeando dentro de la nave mientras comían sus reservas militares, pero ahora ese soldado yacía sin vida delante suya.
 
—Lo lamento —dijo uno de los Depredadores, estos comprendían que los humanos veían la muerte en combate de otra manera, más que un honor, era una gran tragedia irreparable.
 
Nadie dijo nada, solo por la impresión se quedaron en un silencio ahogado, Hermione se calmó, pero no quería voltear a verlo para tratar de calmarse, Quill fue a la nave, realmente no tenía mucho contacto con el cap y casi no lo conocía, pero igualmente era difícil ver la situación, regresó con una camilla que traía una bolsa, las tenían ahí con la esperanza de jamás usarlas, Shadow le ayudó a colocar el cuerpo y llevarlo a la bodega de la nave.
 
—No entiendo, no entiendo como es que llegan a pasar estas cosas, e visto la muerte frente mía y sigue impactando como siempre —dijo Quill a Shadow, los demás iban subiendo a las naves, y los Yautjas llevaban todo lo que podían de reserva, el erizo puso el último seguro y el cuerpo ya iba abordo.
 
—Yo también, pero jamás te acostumbras —le respondió Shadow mirándolo fijamente, ambos tenían una cara de sorpresa, pero casi no se veía por el casco— y el día que te acostumbres a eso, es cuando debes cuestionarte tu propia moral, porque esto… Esto no está bien.
 
Abril se aseguró de que todos estaban adentro y cerró las compuertas de todos lados, Quill arrancó la nave listo para despegar, la nave tenía demasiado silencio, nadie hablaba ni lanzaba ningún comentario al respecto, simplemente se sentía el peso en el ambiente, hasta que Shadow se animó a hablarle a Alexi solo con la sencilla pregunta.
 
—¿Qué pasó? —fueron las palabras que se pronunciaron en la nave luego de despegar pegada a la nave Yautja para teleportarlos desde ahí al universo principal, Alexi se quitó el casco para responder, ya se le había quitado la cara de tristeza para ser reemplazada por una inexpresiva, aunque por dentro seguía sufriendo igual.
 
—La sangre del xenomorfo le cayó encima de un pedazo del traje que tenía una rasgadura… No había nada entre él y el ácido, no pude hacer nada —respondió el chico tratando de mantener serena su voz y no escandalizar a los demás.
 
Batman fue el primero en ponerse al lado del joven dándole una palmada en el hombro, él mismo sabía lo que era combatir con esas cosas en la invasión de su ciudad Gótica, peleando y reñido totalmente en la desesperación de combatir a esas criaturas tan peligrosas.
 
—Ya nos iremos amigos, que Dios nos acompañe —dijo Abril cuando vio que la nave de los Yautjas estaba lista, ya les habían dado indicaciones de lo que debían hacer para ser teleportados al universo central, Quill volteó a ver a la militar, esta se veía asustada por lo que acababa de oír, ella se dio cuenta de que Starlord la veía y este le regresó una leve sonrisa indicándole que todo estaba bien para calmarla, este siempre se caracterizó por ser muy cómico, pero en esta situación esa característica desaparecía y solo le quedaba recurrir a ella para tranquilizar a los demás.
 
Las naves se movieron, los sistemas empezaron a funcionar y estaban listos para ir con sus amigos con una terrible noticia que comunicarles a todos.
 
Mientras tanto con Peter.
 
—Creo que podrían hacer un pequeño agujero aquí y con eso tener algo de vista para los costados —dijo el arácnido, este se encontraba con Ladybug haciendo unas cuantas inspecciones, habían sitios de refugio para heridos, eran carpas sencillas rodeadas de muros de hormigón, estaba haciendo unas sugerencias y modificaciones para que todos los sitios que viera pudieran ser más seguros.
 
—También esa carpa de ahí podría necesitar esos agujeros, digo yo pues, está en la esquina y ahí deberían tener más ángulos por seguridad —comentó la chica que lo iba acompañando en esta pequeña tarea, los demás personajes hacían tareas similares, explorar y opinar acerca de la base para mejorarla como se pueda.
 
—¡Ey! Creo que ahí llegaron sus amigos con otra nave algo rara —les habló uno de los marines desde afuera, la nave donde habían partido había aparecido con otra nave de acompañante.
 
Peter y Marinette salieron entusiasmados, vieron la nave bajar poco a poco, con los motores expulsando aire en los alrededores, ellos se encontraban muy lejos así que debían moverse rápido.
 
—¿Me llevas? —dijo la chica que no quería transformarse para eso, y ya sabía que Peter podía hacerlo sin problema.
 
—A estas alturas ya parezco taxi, pero ta bien —le respondió el arácnido tomándola de la cintura, dando el salto largo y empezando a columpiarse con las columnas o los pocos objetos con una gran altura para ir rápidamente a la zona de aterrizaje.
 
Lo primeros en bajar fueron los Yautjas, estos pusieron en alerta a los marines de la UNSC hasta que un militar de la propia realidad central les detuvo con sus palabras.
 
—¡Alto! A estos los conozco, son los Predators de las películas —habló un soldado español, los demás soldados empezaron a recordar y si ubicaron a las criaturas, además de que estos salieron con las manos en alto indicando que iban en paz.
 
Peter y Marinette no le dieron importancia a ese asunto, seguían observando la nave donde iban los demás listos para recibir a su amigo Alexi, la compuerta se abrió, uno a uno empezaron a salir todos los tripulantes, pero algo no pintaba bien, todos iban cabizbajos, la penúltima en salir fue Hermione que vio a Harry y a Ron a lo lejos y se fue con ellos a contarles lo que pasó sin poder contener el llanto, Marinette se asustó mucho ya que Alexi no salía, pero lo hizo de último, con el casco puesto y su paso lento, vio a sus amigos y lentamente se dirigió a ellos, recibió un abrazo por parte de ambos y se quitó el casco, solo para que se viera que la había pasado realmente mal.
 
—¿Qué pasó? —preguntó Marinette de primeras, pero Peter ya se había dado cuenta de algo, vio bajar a todos, excepto a Steve Rogers.
 
—No… No es cierto, maldición no —dijo Peter viendo por encima del hombro de Alexi, Shadow se acercó a la nave junto a varios héroes, incluyendo a Sonic, Bucky y la mayoría de los Avengers y el Sonic Team, sacando la camilla con el cuerpo del cap, aunque no podían oír nada ya que estaban algo lejos, se veía que algunos se llevaban las manos a la boca en un vano intento de silenciarse, otros no pudieron evitarlo y directamente se tiraron al suelo sin poder creerlo.
 
Marinette finalmente captó que el cap había perdido la vida, no quiso preguntarle más a Alexi, ya que este respondió con un “Murió frente mía, ni yo ni nadie podría haberlo salvado” y se volvió a quedar callado, no quería llorar ya que prefería guardarse sus lágrimas para sus momentos en solitario y no transferir esa carga a sus amigos, Peter se llevó las manos a la cabeza, estaba totalmente sorprendido de mala manera, ese mismo soldado lo inspiraba en su universo, fue a sus museos y lo admiraba por los sentidos de justicia que transmitía, ahora se había ido para siempre.
 
—Lo lamento muchacho —dijo Strange acercándose a ellos, aunque en la realidad central las gemas del infinito no funcionaban, el alboroto de afuera y la vista hacia los demás héroes llorando sobre una bolsa le daban la idea de que había pasado— e visto esos escenarios muchas veces, lamento que tengas que experimentarlo a tu corta edad —añadió recordando sus tiempos como médico, si bien él era formidable, al principio ese tipo de escenarios donde no se puede hacer nada eran lo más común de ver entre sus compañeros.
 
—Gracias, pero ahora no me queda de otra doctor, ahora es nuestra responsabilidad que los sacrificios de los que murieron no sea en vano —le respondió el chico, se quitó el traje totalmente, mientras más gente se reunía alrededor de la nave, tanto héroes como soldados, el trío de amigos pasó en mitad de varios de estos, mientras escuchaban los susurros de los que no podían ver, especulando que había pasado.
 
Luego de un rato llegaron a sus bunkers, no había nadie ahí, todos estaban afuera, solo Alexi que ya estando más en calma les explicó todo a sus amigos, con la ayuda de Cortana que mostró las imágenes de Metal Sonic y Tails Doll, el cual Marinette todavía no había visto y era muy aterrador verlo aunque sea en imagen con ese rostro inexpresivo, pero que a su vez da escalofríos verle solo la mirada.
 
—Si se ve bien feo, hubiera preferido que no sacara la boca nunca —dijo Alexi cerrando el holograma, ya había pasado un muy buen rato y recuperó bastante su estado normal, aunque de todos modos esa imagen le iba a quedar presente toda su vida.
 
—Oye, estos días que no estuviste nos preguntábamos todos los días que estaban haciendo, pero me alegra mucho que tú estés bien —dijo Peter para dejar ya ese tema de lado.
 
—También estuvimos entrenando mucho el poder que me transfirió Kitana, sigo sin controlarlo al cien, pero al menos ya no me mutilo mi propio brazo al lanzar un ataque —añadió Marinette desviando más el tema, sacando un abanico y moviendo levemente la hoja para crear un leve viento para refrescar el lugar.
 
—Bien, así podrás pelear con los xenomorfos sin tocarlos, aunque igual deberías seguir practicando —opinó el chico viendo que Andrew y Tobey se acercaban a su puerta, al parecer ellos no se habían enterado de lo que había pasado.
 
—Que onda, estábamos comiendo no vimos la nave, me alegra de que hayan regresado, si no te sientes cansado puedes acompañarnos a… —estaba diciendo Andrew con su tono alegre y bromista de siempre, hasta que les vio bien la cara y su sentido arácnido presentía que algo no andaba bien, quedando todo en un silencio abrumador.
 
—¿Todo bien? —preguntó Tobey luego de darse cuenta de lo mismo, se agachó para verle bien el rostro a Alexi y hablarle de frente— no hace falta que me digas que fue lo que pasó, solo dime quien.
 
—El capitán, Steve Rogers, la sangre de un xenomorfo lo mató, no pudimos hacer nada —explicó el chico tratando de mantenerse sereno, ambos arácnidos se sintieron mal ya que durante los juegos habían convivido mucho con él y claramente aquel soldado era bueno haciendo nuevos amigos.
 
—Lo lamento, él era una inspiración para todos nosotros, motivó a mucha de la gente que está aquí, ahora es nuestra responsabilidad que esa inspiración no se quede en nada —respondió Andrew extendiéndole la mano a Alexi para que este se pudiera levantar de donde estaba sentado.
 
Alexi, Marinette y Peter acompañaron a los dos arácnidos al sitio donde pretendían empezar a entrenar más, los marines y los demás habían estado ayudando a instalar el mismo gimnasio que usaron para entrenar en los juegos, con pesas que podían aumentar su peso sin ser gigantes, caminadoras capaces de ir a la velocidad del sonido, ahora incluyeron un pequeño cuadrilátero con la misma tecnología de hologramas con contacto físico, para practicar diferentes tipos de pelea, ejecuciones y al lado había una galería de tiro con una gran variedad de armas para distintas pruebas.
 
—Tails me dijo que en estos días iba a instalar el programa este en las afueras para algo, aunque aun no se decide que hologramas usar —comentó Alexi ya que en la nave el zorro le había dicho esa información, se subió al cuadrilátero junto a Marinette ya que quería ver sus habilidades nuevas.
 
—Bien ponme algo sencillo —dijo la chica, no tenía su transformación, solo iba a usar sus nuevas armas y mostrar algunas cosas básicas.
 
Le mostró los movimientos más básicos de Kitana, como hacer levitar a los enemigos, arrojar los abanicos para luego regresarlos como un boomerang, usarlos como una sierra mecánica, además de mayor agilidad de ella misma sin su transformación, todo esto siendo probado en varios hologramas de humanos, los cadáveres y la sangre se eliminaban de la simulación con un solo botón, pero luego de todo eso, Alexi notó que había otro movimiento relativamente sencillo que podría hacer.
 
—¿Has probado girar? —preguntó, recordando un fatality que vio hace poco cuando andaba viendo escenas del mortal kombat 11 antes de salir a la misión a ese universo, la chica le respondió negativamente— bien, extiende los abanicos y ponlos encima de tu cabeza, luego gira como una bailarina… Nomas deja que me quite de aquí.
 
Luego de eso los tres arácnidos también dieron un paso atrás, Alexi puso a 3 enemigos en escena y la chica siguió las instrucciones, empezó algo lenta, pero poco a poco subió la velocidad y se fijó que una estela se iba formando a su alrededor, era un tornado, el cual levantó a los enemigos y los hizo girar a gran velocidad a su alrededor, aunque ella ya se había empezado a marear.
 
—¡Ahora extiende tus brazos en T pose de golpe! —le gritó Alexi ya que el tornado era un poco ruidoso.
 
La chica obedeció, el tornado se expandió a gran velocidad haciendo pedazos a los hologramas, tumbó también a los arácnidos y a Alexi, habían descubierto otra nueva forma de acabar con los enemigos y era especialmente útil contra los Forerunners y los robots de Skynet, Marinette les mostró su pulgar arriba a los caídos, para luego darse la vuelta y vomitar debido a la gran sacudida que la habilidad conlleva.
 
—Ay… Gracias por el tip, pero ya es la segunda vez que vomito por andar con estas cosas mágicas —le dijo la chica limpiándose la boca, se bajó del cuadrilátero para buscar un trapeador a pesar de que Peter le ofreció limpiarlo.
 
—Bien, solo seguimos entrenando hasta que el día inevitable llegue verdad, ¿alguna idea de cuando podría ser? —preguntó Tobey a Alexi mientras Peter y Marinette limpiaban el desastre.
 
—Tiene que prepararse, puede ser hoy, puede ser mañana, puede ser en dos años, quien sabe, no tenemos de otra más que estar listos cada segundo.
 
Luego de un rato salieron del entrenamiento, ya era de noche y se fueron a cenar algo, veían a los héroes de Marvel de vez en cuando, algunos más afectados por la partida del capi, incluida Natasha y Bucky al ser los más cercanos al propio Steve, estos ni siquiera se habían asomado a la propia cafetería, los héroes pidieron sus platos y se fueron a sitios elevados para comer tranquilos, viendo la luna iluminar gran parte del sitio.
 
—Oigan hay mucha gente aquí que ni siquiera son soldados —dijo alguien que también había aplicado la misma técnica, Silver estaba con su ahora pareja Blaze, también subían a sitios elevados a comer y no ocupar espacios en el comedor, se sentaron al lado de ellos y empezaron a platicar.
 
—Son miembros de los Groove Street del San Andreas, mañana hablaré con CJ, pero aunque no sean militares son tipos que saben usar armas y cualquier gatillo adicional es bienvenido —le respondió Alexi tomando de su bebida y empezando a comer los fideos que le dieron.
 
—Marinette y yo estuvimos viendo varios sitios donde pueden disparar y refugiarse en caso de heridos —le comentó Peter, este estaba comiendo una gran cantidad de carne al igual que Andrew y Tobey debido a su metabolismo.
 
—Sip, solo que a Peter a veces le cuesta un poco dar a entender sus ideas y no se le entiende un carajo jaja —se burló Marinette recordando una vez que un sargento de los marines no le había entendido nada al arácnido.
 
—Ríete lo que quieras, pero el del transporte soy yo —respondió Peter también con tono burlón, robándole una albóndiga a sus fideos, Marinette respondió dándole un golpe en el hombro y comiendo un pedazo de la chuleta que estaba en su plato.
 
—Que buen dato crack, hubiera sido fenomenal que te lo hubiera preguntado —le dijo Silver también bromeando, provocando una pequeña risa entre todo el grupo.
 
Luego de esa pequeña noche de charla todos se fueron a dormir, debido al entrenamiento todos estaban exhaustos, pero alguien no podía dormir tranquilo, Alexi en sus pesadillas veía que un xenomorfo o un Forerunner se metía a su bunker y mataba a sus amigos, algo no lo dejaba tranquilo y era el miedo de que ahora no podían hacer nada más que esperar, así que en mitad de la noche decidió irse por su cuenta al gimnasio.
 
—Mis sensores me dicen de que necesitas descansar, pero también vi que tenías muchas pesadillas, así que dale, pero que conste que te avisé —le regañó Cortana, este se había quitado el traje para practicar y la IA le hablaba por un altavoz.
 
—Tranquila, si me pasa algo a mí te pueden transferir con muchos otros soldados o Spartan.
 
—Ese día, no voy a querer ser transferida —le respondió la IA ya que al ser tan avanzada era como una humana y sí llegó a preocuparse mucho por Alexi, siendo casi como hermanos.
 
—Entonces daré lo mejor para que no suceda —dijo el chico empezando a levantar pesas especiales que él mismo aumentó a más de 1000 kilos, equivalente al doble del récord mundial.
 
Su entrenamiento personal esa noche fue extremo, se forzó a sí mismo a superar sus límites levantando mucho más peso del que normalmente podría, puso a Forerunners en los hologramas para partirlos con sus propias manos, agarró todas y cada una de las armas para practicar su puntería en todos los modos posibles, hasta mejorar al punto de casi no fallar ni un tiro.
 
—Auméntame la masa de esta cosa —dijo poniendo un saco de boxeo que podía cambiar su estructura molecular, hasta el punto de hacerla casi como una piedra para golpearla con sus manos.
 
Con ese saco siguió durante varios minutos, entrenando su técnica y sus golpes para hacerlos más y más mortales, los golpes resonaban y su respiración se agitaba a cada minuto, todo iba relativamente bien hasta que notó que había sangre en el saco, sus manos se habían cortado y los nudillos se le habían abierto dejando ver la articulación que lo componía, se vio las manos un segundo, pero luego las volvió a poner en puño, su propio cuerpo no le importaba, solo quería seguir entrenando para mantener a salvo a sus amigos y al multiverso entero, mentalmente ignoraba el dolor y sus manos, a pesar de que seguía dejando su sangre en aquel saco.
 
—No puedo parar, no puedo permitir que lo del cap vuelva a pasar —dijo subiendo al cuadrilátero con su pistola para practicar más ejecuciones.
 
Ahora mataba tanto Forerunners como humanos normales simulando a los sintéticos con los que pelearon en su escuela hace unos años, cada vez más los mataba de formas más agresivas pero muy rápidas a su vez, ya ni se molestaba en limpiar los cadáveres, ahí estaba matando y matando con todo lo que podía, hasta que alguien afuera lo escuchó, Sonic había estado caminando pensativo por todo el lugar, también había sido abrumado con la idea de lo que pasó en el universo Alien.
 
—¿Hola? —susurró el erizo azul, Alexi gritaba cada que recibía algún golpe, no por el dolor sino porque para él era como un fracaso ya que ese golpe pudo ser mortal, el erizo siguió caminando por el gimnasio hasta que lo vio peleando como loco contra hordas de enemigos, se acercó y le habló fuerte ya estando más cerca— ¡Alexi!
 
El chico se asustó, dio la vuelta y metió un disparo al origen del ruido, Sonic lo evadió y se le puso al lado a gran velocidad, Alexi reflexionó sobre lo que estaba haciendo, si ese hubiera sido alguien más de seguro lo habría matado del disparo sin querer, soltó su arma y se le quedó viendo al erizo.
 
—Perdón… Es que.
 
—No podías dormir, yo también estoy así —le respondió Sonic dándole una palmada en el hombro y viendo toda la masacre que había en el cuadrilátero— te la pasas cuidando a los demás, que te olvidas de cuidar de ti mismo.
 
—No es la primera vez que lo escucho.
 
—Pero si espero que sea la última —le dijo el erizo recogiendo el arma y poniéndola en su mano— solo recuerda que no estás solo, nadie lo está.
 
Al día siguiente Alexi se puso al corriente de todo, pasó viendo antes a varios héroes de Marvel para comentarles lo sucedido y darles el pésame por la pérdida, también pasó platicando con CJ sobre los miembros de su banda en el sitio.
 
—Escucha, yo estaba ahí cuando explicaron todo el contexto, me iban a llevar a mi universo al día siguiente, esa puta noche no dormí nada, no soportaba la idea de que si fracasan todo se acabará, les dije que les podía conseguir aliados, no somos profesionales y tampoco somos una enorme cantidad, pero tenemos armas y si podemos ayudar lo haremos, no somos héroes pero literalmente es nuestro mundo, claro que pelearemos por él —explicó CJ señalando a los bunkers donde estaba su gente, estos llevaban su propio armamento y materiales caseros, contra los robots de skynet era algo inútil, pero contra xenomorfos era más que suficiente.
 
—Bien, solo no se crean Rambo, mantengan su distancia, si son una línea de apoyo deben cubrir las espaldas de los marines y permanecer en el área céntrica para matar a todo lo que se asome.
 
—¿No crees que andas muy tranquilo con todo esto? —preguntó alguien que llegó atrás de ellos, Max de Mad Max estaba paseando junto con Leon, ya que ambos estaban en la misma división.
 
—Es bueno permanecer así, los demás se influyen de la imagen de otros así que es bueno sonreír en los momentos precisos… Al menos eso creo, lo aprendí de Superman —respondió el chico devolviendo el saludo de puño.
 
—¿Y porqué no traemos a ese sujeto? —preguntó Leon.
 
—Está muerto, todos lo están —respondió el chico recordando la información de que el universo cinematográfico de DC y su multiverso de cómics fueron destruidos.
 
—Diablos —dijo CJ bajando la mirada y volviendo a levantarla en dirección a los demás— ¿Creen que con todo esto estamos listos?
 
—Debemos creerlo, todos nosotros, si no ¿Quién más lo hará? —respondió Max que al igual que los demás observaron todos los alrededores viendo una estructura sólida, pero igual daba miedo esperar lo peor.
 
Alexi siguió estudiando las posiciones de los marines y de los demás personajes, así como de que los más poderosos estaban encargados de arrasar con la mayor cantidad de naves posibles y apoyar con el proceso de destrucción del compositor, además de conocer adecuadamente su posición de pelea, una a azotea rodeado de marines y ocupando torretas muy potentes, aunque el chico ya se esperaba que iba a estar moviéndose constantemente por el terreno si lo veía necesario.
 
Al día siguiente si se fue al sitio para entender mucho mejor el terreno, además de hablar con los marines que le acompañarán cuando sea el momento de pelear.
 
—Desde que te vi en la nave me fijé que eres igualito a mi papá —dijo Abril, la misma marine que los estuvo acompañando en la misión al universo Alien y Depredador estaba posicionada en el mismo sitio que Alexi.
 
—¿A si? Puede que algún día pueda convencerlo de que se haga pasar por mí en algún evento al que no quiera ir —bromeó el chico para mantener los ánimos en su pequeño grupo de marines que constaba de tres francotiradores y dos ametralladoras.
 
—Si claro, nomas dime de cuanto hablamos.
 
—100 dólares del monopoly con 5 chicles —respondió el chico con la cara sonriente.
 
—Que ganga, aunque a nosotros todo nos sale gratis —respondió uno de los tiradores que estaba comiendo una manzana— nomas el enlistamiento fue lo pasado de verdura.
 
—¡Ey! Finn —se emocionó Alexi al ver que en la torre de al lado estaban Finn y Jake de Hora de Aventura.
 
—Que onda —dijeron ambos, Jake al tener poderes de estiramiento se fue hacia la otra torre, sin riesgo ya que no era tan elevada— también anda acá la princesa flama y el rey helado, pero esos están en otro sitio —agregó Jake.
 
—Nunca estuve en una guerra, pero si estoy ansioso por ayudar, esta será una aventura increíble —le comentó Finn mostrando su espada hecha con sí mismo en un evento donde se encontró con su yo del pasado, además de tener una espada hecha con una hoja natural que se desplegaba de su brazo.
 
—Que raro motivo para pelear, ¿Si saben a lo que se enfrentan no? —preguntó el sargento de la división que estaba con ellos.
 
—Claro señor, no es la primera vez que nos enfrentamos a una entidad poderosa que tiene el deseo de acabar con todo.
 
—El Lich, ese hijo de perra daba miedo —respondió Alexi, recordando al antagonista más poderoso de la serie de Hora de Aventura.
 
Luego de eso se separó de la línea para ir con Tails para asesoramiento técnico, es decir quería saber como iba a estar el sistema para detectar la llegada del ataque.
 
—Mira, nos conectamos a casi todos los satélites del planeta para hacer un escaneo de todo el espacio y los Depredadores nos dijeron que con su nave van a estar navegando alrededor de todo el sistema solar por si se les ocurre aparecer lejos y acercarse de a poco —explicó el zorro, estaban en una sala grande en una casa de dos niveles dedicada exclusivamente a esta tarea, con una mesa con unas computadoras y al costado un holograma con imágenes cambiantes del sistema solar— en el momento que empiece una guerra esta sala se desactivará y se podrá usar como punto de batalla o cobertura si de todos modos esto está bien en el mero centro.
 
—¿Hay algún punto flojo en el sistema este? —preguntó el chico tocando el holograma viendo una imagen cercana del planeta.
 
—Abajo del océano y en cuevas está difícil detectar algo, les pedimos a los soldados de aquí que con sus submarinos, pero igual dudo mucho que se le ocurra aparecer en medio del océano —respondió Tails sentándose en la silla mientras observaba a su amigo analizando todo el sitio— siempre parecer planear todo con detalles, ¿Ya planeaste que harás después de eso?
 
—De momento no tengo tiempo para eso, pero igual solo voy a estudiar, no hay mucho que planear hasta ese punto.
 
—Si es cierto, aun nos falta mucho para pensar en otras cosas… Cream se quedó en casa, no le quise especificar mucho de lo que estamos haciendo, no podría dormir ni de broma —comentó el zorro mientras veía de cerca el movimiento de los Yautjas en el espacio— ¿Tu mamá o Neferet saben algo?
 
—Blaze las llevó a mi casa, no sé si ella les contó algo, espero que no, de lo contrario todas estarían muy preocupadas por mí y por lo que pueda pasar —respondió el chico terminando de ver lo que quería saber— voy a estar entrenando, deberías ir conmigo ahora, al menos necesitas algo de resistencia.
 
—Ahora resulta que tengo entrenador personal gratis jeje.
 
—Nada de eso, te cobraré 100 dólares cuando acabe todo.
 
—100 dólares del monopoly y 1 chicle es lo que más te puedo ofrecer, y me estoy arriesgando —dijo Tails cerrando todo y acompañando a su amigo humano al gimnasio.
 
En ese día no pasó nada más en particular, salvo que varios personajes importantes empezaron a usar el gimnasio, como Harry, Ron y Hermione que querían al menos tener más resistencia para correr mejor al igual que Tails, hasta se llevaron a Neville Longbottom, un personaje algo torpe que no tenía mucha experiencia en combate, pero que era tan buen amigo que nunca los dejaría solos.
 
—Mira, estos cabrones de aquí aparentan ser humanos, pero son máquinas —explicó Alexi mostrando un holograma físico de un terminator— así que un Avada Kedavra ni de chiste va a funcionar, pueden usar un Oppugno y poseer a alguno de estos y que se ponga a matar xenomorfos o si son un chorro que les llegan de frente talvez un Fracto Strata y en caso de una mera emergencia una Bombarda Máxima seguro que los revienta a todos.
 
—Ya pareces estudiante de Hogwarts, sabes más de hechizos que la mitad del alumnado —bromeó Harry tomando nota mental de todo lo que les decía Alexi a ellos.
 
—Si pero yo lo aprendí disfrutando de películas y libros de entretenimiento, no estudiando nada, pero bueno, esto no sé si ya se los dijeron así que en resumen, aunque parezcan humanos tratenlos como a los sintéticos, con hechizos para objetos, solo los xenomorfos tienen vida así que con ellos hasta les recomiendo usar solo el Avada Kedavra y así sea una muerte más limpia.
 
Luego de esas pequeñas charlas diarias procedían a acomodarse mejor, planear mejores tácticas, entrenar en puntería a muchos voluntarios que no eran militares, y se tomaron el tiempo a lo largo de esa semana para edificar y reforzar mejor algunas zonas que lo necesitaban, todo listo para esperar el ataque final…