¿Que pasaría si la diosa Luna enviara a un grupo de Omegas para ser la debilidad de los alfas más letales que han existido?
Podrá el pequeño lobo blanco ablandar el corazón del lobo más temido?
El Omega Tae podrá dejar su orgullo por dos Alfas desti...
"El pequeño Omega caminaba de un lugar a otro en su pequeña habitación, tal nerviosismo invadía su cuerpo que sus feromonas empezaron a impregnar la sala, su cuerpo temblaba dejando ver que no estaba feliz por la noticia recibida de hace unos momentos, tendrían que volver a su antiguo pueblo, el solo imaginárselo hizo que el rubio sintiera náuseas.-¿Era realmente necesario volver al lugar donde se desató el infierno?- se preguntaba una y otra vez, tener que volver allí era recordar la muerte de su hermano mayor Hyung, era recordar aquel momento que casi acaba con él, negó con la cabeza y se sentó en la cama frustrado, tirando de su pelo hacia atrás mirando hacia un punto de su habitación.
-¡No!- pudo pronunciar y miró sus manos donde se hayaba un pequeño anillo de color oro blanco, apretó los labios en un intento de no llorar, su lobo se sentía agotado y desanimado algo que lo recolcomia, su lobo era lo más preciado para él y su deber era que ambos estuvieran felices.
-Debo ser fuerte, debo...debo hacerlo por nuestro hermano- ladeo la cabeza e impulsó su cuerpo para levantarse, prepararía las maletas , debía empezar de nuevo, aquello era el pasado y debía intentar vivir con ello, por sus padres , por su hermano menor y lo más importante su lobo. "
🐺🐺🐺
Su nombre resonó en los oídos de los que serían sus nuevos compañeros durante aquel año, para algunos era un ofensa estar en presencia de un Park, un linaje de sangre pura, no sólo era la pureza lo que hacía la diferencia, los Park eran considerados como los hijos de los dioses, colmaban de cualidades extraordinarias a la hora de transmutar, la belleza que se les había otorgado podrían crear guerras por conseguir un poco de afecto de aquel linaje, no importaba si eran alfas , betas o omegas, todos desprendían un olor diferente y atrayente, para otros los Park eran solamente un linaje antiguo al cual debían respetar , y para el último grupo incluyendo a cierto pelinegro no eran más que un linaje con aires de grandeza , quienes creían que podían poseer cualquier deseo que se les atonjaran.
El pequeño Omega miró a sus compañeros y luego a su nueva profesora quien lo miraba fascinada , algo que hizo que él se sonrojara de vergüenza, no le gustaba ser el centro de atención, aquello hacia que sus nervios se elevasen ,mientras sus feromonas mostraban lo cual asustado y nervioso estaba.
-Señor Park es un gran placer tenerlo con nosotros, espero que su estancia aquí sea de su agrado - la señorita Ah-Ro se acercó hasta él tocando su hombro con su mano.
-Puede sentarse al lado del señor Taemin por el momento, es un buen estudiante a la par de ser prefecto, él podrá ayudarlo- le sonrió de forma amable.
Jimin asintió con una pequeña sonrisa dejando ver sus pequeños hoyuelos, se dirigió hasta el asiento notando un olor sumamente embriagador para sus fosas nasales y para su lobo quien ahora parecía estar nervioso y queriendo salir, aquel olor a canela mezclada con toques suaves de nata hicieron que le entraran un pequeño escalofrío, antes de sentarse miró hacia donde su instinto le decía y vio a un pelinegro que lo miraba con sus ojos negros de manera neutral, el menor fue arrastrado hasta la silla por su compañero Taemin quien le sonreía de lado.
-Será mejor que te sientes, tu olor inunda la sala y esos alfas- señaló con la cabeza un grupo que lo miraban con deseo.
-No son realmente agradables-
Jimin asintió con la cabeza algo cohibido por las miradas y se sentó al lado de Taemin , quien volvió a sus tareas.
-Gracias- le sonrió tierno.
El alfa le miró de reojo y sin decir nada siguió a lo suyo notando que su lobo se sentía extraño y algo eufórico por tener la cercanía del menor.
Si era mejor mostrarse neutral y no dejar ver cuan afectado estaba su lobo por aquel olor tan dulce que desprendía el Omega, Jungkook apretó los puños por debajo de la mesa sin percatarse de que sus manos empezaron a sangrar de la fuerza que había sometido, algo que no pasó desapercibido por su amigo Namjoon.
-Calmate o perderás los estribos aquí mismo- dijo con voz pacífica aunque dudoso por el comportamiento del alfa.
El pelinegro dejó salir varias bocanadas de aire y miró atento al Omega, su lobo arañaba su pecho al querer salir y acercarse hasta él, marcarlo y proclamarlo suyo, algo que Jungkook no iba a tolerar.
-¿Creés que no se controlarme?- susurró molesto pero con una pizca de arrogancia, negó con la cabeza.
-Esto no es nada-
Fue limpiandose la sangre con un trapo que tenía en su mochila, ladeo la cabeza ante la mirada de su amigo y sonrió sin decir nada más. Namjoon fue a decirle algo cuando se dio cuenta de que varios alfas se acercaron a la mesa donde se encontraba Teamin y el nuevo Omega. Habían aprovechado que la clase había finalizado y ya no se encontraba la profesora Ah-Ro.
-No va a terminar bien si sigue desprendiendo ese maldito olor tan dulce- escuchó decir a hoseok quien por su rostro se acababa de despertar, rodó los ojos y apoyó su cabeza en el hombro de Suga, quien se mantenía al margen de "aquella conversación"
-Deberíamos ayudar a ...- fue interrumpido por un pequeño grito que provenía de la puerta, Hoseok abrió los ojos y miró hacia allí, ahí estaba, aquel olor que lo volvía realmente loco, azúcar mezclado con vainilla , un olor que su lobo adoraba sin reparos, observó al castaño quien sonreía y abrazaba al pequeño rubio.
-¡No puedo creer que al fin estés aquí! O diosa Luna te ves hermoso - Tae observó a su pequeño amigo y no pudo dejar sentir que su aura y su estado de ánimo se elevara en cuanto olio su olor.
-Tae- rio Jimin intentando respirar por el abrazo de este.-
-Perdón, perdón, Jin se pondrá contento cuando se entere que has vuelto- dio algunas palmaditas dejando ver su felicidad, algo que hizo que Hoseok emitiera un pequeño gruñido.
-¿Te encuentras bien?- preguntó de forma neutral el peli-plata quien había observado callado el encuentro entre aquellos omegas. -Si, estoy bien, solo quiero dormir- cerró los ojos un momento apoyando su rostro en el cuello de Suga, al cual hizo estremecerse, acto que el pelirrojo notó e hizo que una pequeña sonrisa maliciosa saliera de sus labios.
-O tal vez solo necesito distraerme de alguna manera- murmuró en su cuello, notando como las feromonas empezaban a salir calentando la situación, Suga giró su rostro y miró a Hoseok alzando una ceja, negó y le apartó.
-Mejor estudia para el exámen , créeme te calmará y a tu lobo también- señaló su pecho negando con una pequeña sonrisa.
Bueno lobitos espero que os guste el capítulo, aquí os dejo una fotito de nuestro bombón Taemin.
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