Epílogo

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DK

Tomé el rostro de Jongin entre mis manos, arrebatando sus labios con apuro y frenesí. El calor en el interior del auto abrumaba a los dos, reflejándolo en un sudor excesivo sobre la piel ardiente. Sus manos tiraban de mi cabello hacia atrás y así dejarse espacio libre para morder mi mandíbula, haciéndome cosquillas al bajar por mi cuello.
Seguía manteniendo sus embestidas con fuerza, lo que causaba sonoros gemidos desde el fondo de la garganta.

Mas ambos nos detuvimos en seco al oír disparos no muy lejos de donde estábamos.

Miré a Jongin buscando una explicación, pero este parecía pensar en algo antes de hacerme delicadamente a un lado y buscar su teléfono en el bolsillo de sus pantalones en el suelo del auto.

Buen momento para arruinar.

Apoyé mi espalda contra el asiento, intentando oír la conversación que Jongin mantenía con Kris, claramente.

–¿Qué está pasando en el edificio? ¿No que venían en una hora? –preguntó Jongin con cierta molestia en su rostro.

–Cambio de planes; la policía estaba al tanto. Sal de ahí y vuelve conmigo, vamos a encargarnos nosotros ahora.

Rodeé mis ojos al oír eso. Aquello significaba que no saldríamos temprano de las manos de Kris, y por ende tampoco cenaríamos apropiadamente en casa. Jongin le llamaba cita exprés.

Al colgar, me miró como pidiendo disculpas y besó mi frente, pronto comenzó a cambiarse sin decir nada más.

–¿Es una broma? –me atreví a preguntarle a modo reproche. No pensaba dejar la cosa así, ¿no?

–¿Qué? –giró a verme– Sabes que no podemos quedarnos. Te recompensaré más tarde, ahora no, bebé. Anda, ni siquiera puedo cerrarme los pantalones. Vístete pronto.

Bien, tenía razón, además había demasiado ruido afuera para mi gusto, lo que no indicaba nada bueno.

Me vestí lo mejor que pude, abriendo a su vez las ventanillas del auto para que entrase un poco el aire, Jongin reía al tener que pasarse al lado del conductor, aunque robó un beso de mis labios antes de ir.
Solo había que correr el auto unos metros más lejos para que pudiésemos recoger a Yifan cuando lo pida. Aunque yo mucho no haría, seguía siendo un actor secundario en todo lo que tuviese relación con el clan, a no ser que requirieran apoyo o Jongin ayuda. Pero todos sabíamos que en realidad era una excusa suya.

Finalmente iba a graduarme en la universidad, la ceremonia era en dos días y la emoción me tenía a tope de tan solo esperarlo. A su vez, pronto cumpliría con Jongin tres años desde que decidimos contraer matrimonio, una fecha importante para ambos que disfrutábamos en gran manera.

Nuestra ceremonia había sido algo pequeño a pesar de que hubiera imaginado una locura por su parte y más sabiendo quiénes eran su familia, es decir, el clan. Pero solo hicimos una celebración con todos en la playa, una fiesta que duró hasta la mañana siguiente. Realmente un día hermoso.
Jongin rentó mesas, sillas, luces, y todo lo demás necesario para sobrellevar una celebración. Algo de lo que no había estado enterado, por lo que me tomó por sorpresa ese mismo día con todos nuestros amigos en la playa y bengalas.
Claramente solo era algo significativo, aunque Jongin insistió en comprar alianzas para desposarnos bajo la unión de Yifan como "padre de la boda", cosa que solo nos hizo reír durante todo el evento porque era patético y solo queríamos burlarnos de él. Pero al fin y al cabo, todos la habíamos pasado bien. Incluyendo Sehun, quien se dispuso a aparecer desde ese día en nuestras vidas, demostrando ser una persona completamente distinta que podía valerse por sí misma.

Love Words / ChenMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora