𝑫𝑶𝑵'𝑻 𝑪𝑨𝑳𝑳 𝑴𝑬 ❤︎ 𝙺𝙾𝙾𝙺𝙶𝙸 | 𝕥𝕖𝕣𝕞𝕚𝕟𝕒𝕕𝕒

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Tal vez las decisiones de su vida no habían sido las mejores. Ahora se lo planteaba.

Porque, había elegido una carrera que amaba, pero realmente no había querido estudiar. Siempre le había gustado mucho el diseño de interiores pero lo cierto era que en su pasado nunca se había visto a sí mismo con un título universitario.

Pero también había visto cómo todos los primos de su familia habían comenzado a estudiar una carrera, dejando orgullosos padres detrás.

Así que él había querido hacer lo mismo.

Mirar atrás y ver sonrisas orgullosas de sus padres.

Anteriormente, en niveles más bajos de educación nunca había sido una persona con amigos, pero nunca se sentía incómodo.

Teniendo claro gente detrás de él por su andrógina belleza.

Las personas le hablaban, claro, pero no eran sus amigos. Sólo eran personas con las que podía tener una pequeña conversación banal y de las cuáles después olvidaba el nombre.

Aún con todo eso, él siempre sintió que no necesitaba amigos, tenía una vida pacífica y que extrañamente no se sentía solitaria.

Pero se miraba al espejo, y lo único que podía imaginar para sí mismo era estar colgado del brazo de un hombre económicamente poderoso; siempre luciendo hermoso y siendo envidiado.

Y sin siquiera darse cuenta eso terminó siendo.

Pero no todo fue una coincidencia, en realidad cuando estaba en la universidad y conoció a Taehyung por primera vez, supo que él sería el hombre de su vida.

Porque era justamente el tipo de hombre con el que se imaginaba teniendo una vida.

Una bonita y enorme casa, lujos y cenas románticas; incluso consideró dejar la carrera universitaria inconclusa. Pero quería seguir viendo orgullo en los ojos de sus padres, así que se propuso que terminaría.

Y las cosas nunca dejaron de ir bien para él.

No con Taehyung a su lado, regalándole costosas cosas, llevándolo de viaje y mirándolo con amor.

Nada fuera de lo común para él teniendo en cuenta que sus padres eran económicamente poderosos. Pero al ser ese tipo de hijo sabía que le esperaba el mismo tipo de vida.

Y estuvo seguro. No necesitaba a nadie más, había encontrado el canal para su vida soñada.

Fue entonces que se percató de lo enamorado que estaba, porque sí, quizás en un principio sus planes o intenciones no fueron demasiado buenas, pero estaba seguro que nunca había conocido a un hombre como él.

Taehyung era tan peculiar, era hermoso en cada uno de sus aspectos.

Poco a poco se embriagaba más de su amor, de su aroma o de los bailes lentos en medio de la sala de su departamento.

Sin darse cuenta estaba perdido en él. Estaba tan perdido.

Lo miraba y sentía su pecho presionar al ritmo de sus fuertes latidos. Estaba completamente enamorado, y se sentía bien con él.
Así que no dudó en aceptar la propuesta de vivir juntos, y un año después llegó la propuesta de matrimonio, a la cuál tampoco se negó.

Aún cuando Jimin le pidió que lo pensara más, aún con eso no se dio el tiempo de pensarlo ni un poco.

Porque él veía a su amigo, siendo feliz con Namjoon, ambos compaginándose demasiado bien, ambos siendo tan extrovertidos y desvergonzados.

Así que pensó que Taehyung y él se compaginaban de la misma manera, siendo ambos personas tranquilas, relajadas y responsables.

Con todo eso pasó por alto esos deseos incontrolables de intimar de manera moralmente incorrecta; porque su vida sexual era bastante activa, siempre dentro de lo clásico, pero seguía siendo activa.