Una nueva Historia

# 25 La Recuperación

Cap. 25

Valentina

- Me siento tan feliz, que creo que es mentira que hace casi seis meses salí del centro de rehabilitación y no he tomado una sola copa, tuve mis momentos difíciles, aún los tengo, pero sigo luchando para no recaer, mi familia me ayuda y mi novia, perdón por saltarme la etapa del animal, pero si sembré el árbol y cada día lo veo crecer en mi casa, es hermoso poder saber que conforme a cómo va creciendo así voy creciendo yo como persona. No aceptaba que estaba cayendo en un abismo hasta que sentí el suelo, y duele mucho. Puedo decirles que tengo ciento ochenta días libre de alcohol.

Todos aplaudieron mientras daba mi discurso en alcohólicos anónimos. Mi novia me acompaño, después de la difícil tarea de ser la ayuda para reestablecerse con todo lo ocurrido después del juicio.

Flashback

- Vamos, por favor mi amor llama a Esme, llama hasta que conteste. Me decía mi novia después de las horribles palabras que expreso en el juicio.

- Tranquila bebé, estoy llamando. Me cae la contestadora.

Ella solo miró su teléfono y salió. Antes de salir me dijo.

- Sigue llamando. Me fui detrás de ella y al llegar me dijo lo inimaginable.

- Es de la escuela, al salir Sergio atropellaron a Sergio. Llévame al hospital por favor.

En ese momento embargo en mi un horrible miedo, mi tía Eva y los abogados, Lauren que estaba desesperada llamando a su novia.

- ¡Esme! ¿Cómo estás? ¿Dónde estás? Ok quédate allí, no salgas de allí. Te amo. A Lauren si le había caído la llamada y Esme al parecer estaba bien.

- ¿Dónde está mi prima? No se hizo esperar mi novia y pregunto.

- Está en el departamento, no tenía más clases y se devolvió, se estaba bañando por eso no respondió las llamadas.

- Ok, debo ir al hospital, esto del arrollamiento es por ese hombre. Solo espero que mi amigo este bien.

Me sorprendió la noticia

- Debemos ir, vamos amor ¿Te dijeron donde estaba? Ella asintió.

- Yo las sigo. Dijo Lau

Mi tía y Eva también se fueron detrás de nosotras y mi novia estaba enojada y angustiada, solo rogaba que Sergio quien fue su salvador estuviera bien. Llegamos al hospital, nadie sabía darnos razón de Sergio de la Costa preguntamos por una persona que había sido atropellada y la enfermera nos miró con esa mirada que te dan los médicos cuando van a dar una mala noticias.

- Lamento decirles que ese joven falleció. Inmediatamente me acerque a mi novia para que no se cayera. Esto era horrible, pero Dios es grande, por la entrada de emergencia estaba entrando un joven atropellado, y al vernos grito,

- ¡¡¡Juliana!!!

Volteamos y era Sergio al parecer nos habíamos adelantado a la ambulancia y el fallecido era otro joven y no Sergio. Corrimos a donde estaba él y mi novia le mejoro el semblante que minutos antes había desmejorado.

- Sergio, amigo ¿Qué te hicieron?

- Me quisieron matar, fue a propósito.

- Con permiso, dejen trabajar, después podrán hablar con su amigo. Esta vez era el enfermero que llevaba la camilla de Sergio.

- Vamos amigo vas a estar bien, aquí me voy a quedar.