6- Opción

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Me puse una camiseta bastante larga, claramente de un hombre y unos shorts que por suerte me quedaban.

Salí al pasillo y parecía que no había nadie despierto tan temprano, ni siquiera había amanecido.

_ ¿Señorita?_ dijo una sirvienta que me vió pasar.

_ Buenos días_ dije.

_ Buenos días, iré a avisarle al amo que ya ha despertado_

_ No hay necesidad de levantarlo, ¿podré comer algo y entrenar en el jardín?_ pregunte sin saber hasta donde llegaban los beneficios de mi estadía, pero dudaba que me mataría de hambre.

La mujer asintió y me pidió que la acompañara al comedor, no podía dormir tampoco y estaba cansada pero estaba dispuesta a sacarme toda la energía que me quedó hasta caer rendida.

Tomé un desayuno y salí afuera, después de una hora de entrenar sola, un hombre llegó para entrenarme y me hizo ir hasta una arena de combate que había en la casa, se veía lujoso y preparado con mucho cuidado.
Terminé golpeado algunos muñecos y después pase a pelear con el entrenador.

_ No bajes la mirada en el ataque_ dijo mientras se ponía en posición de def nza porque lancé un ataque.

_ Si _ respondí y volví a atacarlo.

_ Mantén el brazo elevado para estar lista para el segundo ataque_

Terminé cansada pero esa clase fue genial, los entrenamientos generalmente en el instituto eran en grupo y correr mucho más que lanzar golpes, no eran tan personal.

_ Puedes ir a comer, te espero después del descanso_

Asentí.

_ Es un entrenamiento intensivo Irio_ dijo Noha.

_ Es el entrenamiento necesario para la próxima señora de la familia Routa, incluso es mejor que la prometida de su hermano_ dijo con una sonrisa ese hombre.

Mire a Noha.

_ Quiero el entrenamiento pero no los títulos, lo dejo en tus manos para que aclares las cosas_ agregué y me retiré del lugar.
Después de comer regresé al salón de entrenamiento y seguí entrenando hasta que llegó la noche con ese hombre.

_ Terminamos por hoy. Mañana a la misma hora_

_ ... si... hasta, mañana_ dije cansada.

Caí y me senté para recuperar el aliento, después me tiré hacía atrás, dándome cuenta de que hasta el piso era cómodo, no se comparaba con caer en la tierra.

Sentí el olor de Noha, huele a menta el segundo protagonista, si alguien le pudiera sacar ese olor de la piel y hacerlo perfume seguramente sería uno de los más caros del mercado.
Es claro que vino a ver el entrenamiento, pero comencé a dormirme sin poder hablar con él y después ya estaba amaneciendo para cuando volví a despertarme, solo que está vez tenía una manta encima.

_ Tendrías que desayunar por lo menos antes de comenzar el entrenamiento_

Era imposible que se quedara toda la noche en ese lugar, solo era un poco raro dormir y despertarme con él cerca. Al final asentí y me levanté de mi lugar.
Después de un rato se aproximó la sirvienta junto a la protagonista al salón cuando salíamos hacía el pasillo.
Sentí un fuerte nudo en la garganta al verla.

Una mujer hermosa, delicada y a la vez con su bata de doctora un aura de seguridad que hacía que su apariencia dulce y delicada tuviera una extraña fuerza que daba seguridad.

La sirvienta habló.

_ Amo es hora de su tratamiento_

Noha asintió.

No correspondida ni como villanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora