Decadentes ✔️

Capítulo 6

Brandon

Los flashes de las cámaras se dirigieron hacia la mujer que entró tomada de la mano de uno de los gemelos y todos los de las mesas de quedan en silencio, siento como mi corazón se acelera hasta tal punto de sentir que se quiere salir, y tomo un poco de agua volviendo a dejar la vista fija en mi plato.

No iba a correr como un maldito marica, pero sentía como estaba comenzando a sudar. No iba a arruinar esta noche.

No puede ser ella

No aquí.

Maldita sea.

—¿Tú sabías de esto? —Susurré en voz baja mirando  a Stoner.

—Pronto te explicaré las cosas.

—¿O sea que si lo sabía? ¿Y no me dijiste nada?

El enojo en mi voz era notable, pero no quería armar una escena aquí frente a los demás y menos con Ciara a mi lado, que por cierto estaba fascinada viendo a aquella mujer entrar.

—Buenas noches para todos—Saludó aquella mujer detrás de mí.

Todos respondieron a la vez, y yo me quedé en silencio

—Eva, qué gusto tenerte aquí con nosotros está noche. Tomen asiento, chicos—Habló Stoner con una sonrisa en el rostro.

Ambos caminaron y llegaron hasta donde estaban las dos sillas vacías, que estaban frente a Ciara, Stoner y yo.

Noah sacó la silla de Eva y ella le agradeció tomando asiento, poco después él hizo lo mismo y dejó la pequeña cartera enganchada al respaldo de la silla.

Lo que faltaba, un mayordomo.

Ella no hizo contacto visual conmigo en ningún momento, pero sí con Ciara, Victoria, Mariah, Sylvia y Stoner. Se mostraba alegre por estar sentada frente a nosotros, pero por dentro sabía que estaba fingiendo, ella era una mentirosa profesional.

—Bien, Eva ¿Cierto? —preguntó Victoria llevando la copa de champagne a sus labios.

Ella asintió y Victoria continuó.

—¿Qué te trae por aquí? Por lo  qué tengo escuchado llevas cuatro años trabajando para los mercenarios y aparecerse en eventos públicos es como lanzar una soga al cuello

Victoria era perfecta para lanzar veneno a cualquier persona, no importa quién fuera ella siempre tendría algo que decir.

—Estoy aquí por asuntos de trabajo, pero no te preocupes que tú no eres quien se encarga de mi seguridad, aunque hay un puesto libre para ser la empleada de mi casa, si lo quieres puedes pasar tu hoja de vida. Así puedes vivir conmigo y me cuidas la espalda—Respondió Eva con una sonrisa amigable.

Victoria enarcó una ceja y siguió bebiendo champagne para guardarse la rabia que tenía por la mala respuesta de Eva.

Todos nos quedamos en silencio y observé a Ciara que estaba con su vista fija en el novio de Eva, él también la miraba, pero luego volvía a tomar Whisky.

—Eva, es un gusto por fin conocerte—Intervino Ciara—, desde que se mudaron ayer quise conocerlos, pero estaba ocupada en la oficina.

—No te preocupes, también estaba algo ocupada.

—Pronto tendremos tiempo para poder hablar y conocernos.

No, no tendrán tiempo.

Unos segundos después Stoner se levantó de la mesa y fue hacia el escenario para decir las palabras que tenía preparadas.