WICCA - La maldición del Lycoris (Yeonbin)

Capítulo 6 - Empatía (Segunda parte)

-P-por cierto... No creí que conocieras el camino... - Intenté romper la tensión antes de que está se apropiase de nuestra habla.

-Yo... Uhm... Bueno... Tampoco estaba muy seguro mientras caminaba... A decir verdad casi creí que estaba perdido, pero al final no resultó ser así.- y con esto último sonrió infantilmente mostrando su dentadura, a veces, podría parecer algo juguetón, lo cual contrarrestaba bastante con su anterior estado...A decir verdad... Me alegra.

-No puedes hablar enserio, imagina que realmente te hubieses perdido.- Como si estuviese reprendiendo a un niño pequeño, su inconciencia me generaba una necesidad de protección.

-Bueno... - Comenzó cabizbajo -Cuando lo hice... Simplemente pensé que no tenía nada que perder... Después de todo, es lo que mi familia desearía... Oh.- giró en mi direccion y habló sin vacilar -Además, queria verte.

Sólo intentaba saber que se supone que debía responder ante aquello... Aunque si tuviese que decir una cosa, Diría lo mismo...

-Estoy seguro que tu familia no desearía algo así... Ellos te quieren después de todo, dales algo de tiempo... No es fácil tampoco para ellos, seguramente también se sientieron heridos por ti, después de todo creen que les has traicionado...

-Pero yo no...

-Si, tu y yo sabemos que no es asi...- musité echando hacia atrás los mechones en su frente

-¿Podría venir a visitarte luego...?, - A que venía aquella pregunta tan de repente? -Tal como supuse antes de venir, me siento mucho mejor ahora... Contigo... - Declaró esto último con sus mejillas coloradas y apuntandome tímidamente con el índice pese a la corta distancia, como si intentase dejar en claro a quien se refería. -Tambien...Quiero darte las gracias...

-No es nada... No te preocupes...-

Después de todo jamás esperaría algo de él

-Puedo... abrazarte? .- Era más un trepidar de sílabas. Sus labios casi ni se movieron y Bien podría fingir que no había oído nada. No quería darle incentivos que le hiciesen creer de vuelta que aquél sentimiento era mutuo, no podía corresponderle después de todo...

-Aprecio que lo preguntes, Aunque no debes cuestionartelo... No es algo que pueda negarse, los abrazos deben ser dados siempre y cuando hagan sentir mejor a las personas.

Entonces él avanzó vacilante y envolvió mis hombros con ambos brazos, no había notado antes la diferencia de altura entre nosotros hasta ese momento, se hallaba demasiado cerca...

-La razón por la cual me sienta bien, es por que eres tú...

Debía ser que no estaba acostumbrado a ello. No se si eran esas palabras o la fuerza con que me recubrían sus brazos... Pero su cuerpo contra el mío, provocaba una sensación asfixiante de calor

-Bueno... Acerca de lo anterior Puedes venir cuando quieras, siempre y cuando estés seguro del camino... Mencioné antes que no quiero ser responsable de ti, así que desde luego no quiero que te pierdas. -Dije separándome por propia comodidad

-¡Esta bien!, la siguiente vez sin duda no voy a perderme, porque entonces no podré verte ¿cierto?... - Sostuvo el cuarzo a la altura de su pecho, observándole atento con una sonrisa, como si le hubiese hallado algo diferente a la primera vez. Acariciando su superficie como si le encontrase pelos que peinar... Allí iba de vuelta...

-Para de mencionarme, ¿es que acaso no piesas en tu familia?

-Lo hago... Es por ello que no me mortifica mucho pensar aquello

-No hables así, en el fondo a  ellos también les duele tratarte de esa manera... No hay forma en que dejen de amarte de un dia a otro.- Y aquellas palabras trajeron su vista al frente de vuelta.