Por suerte, Izuku abrió los ojos antes de que el despertador sonase. Lo apagó con rapidez antes de que hiciera cualquier ruido y despertase al héroe a su lado. Al girarse a mirar a Katsuki, lo vio dormir relajado. Había pasado una mala noche y la verdad, era la primera vez que le vio llorar. Ser un héroe no era fácil y, ahora mismo, pasaba un mal momento con todo el tema de su compañero. Izuku no sabía muy bien qué hacer para ayudar en el asunto.
Suspiró y con su rostro todavía sobre la almohada, miró a Bakugo dormir a su lado. Le gustaba verle así de calmado, a su lado y aunque sabía que mantener una relación con alguien como él era difícil, también era como vivir un sueño. Ground Zero en las noticias era... explosivo, dinámico, ágil y muy temperamental pero... él había llegado a conocerlo mucho más allá de su primera faceta, había conseguido ver el buen corazón que tenía en el fondo y aunque trataba de ocultarlo con ese carácter que distanciaba a la gente, Izuku sabía que era especial y que, a veces, aunque él no pidiera ayuda jamás, la necesitaba. Sonrió antes de acariciar su cabello.
Inevitablemente, ante el leve contacto, Bakugo abrió los párpados para encontrarse con esos ojazos verdes que le miraban sin piedad alguna. No pudo evitar cierto sonrojo. Ese chico, un sin quirk que jamás debió ser nada importante... ahora parecía serlo.
— ¿Qué haces, nerd?
— Despertarte con suavidad – susurró Izuku con una sonrisa inocente – tengo que ir al trabajo. Sé que estás cansado y...
— No voy a quedarme aquí. Tengo que ir al hospital también.
— Podría pedir a otro héroe que me acompañase como guardaespaldas, quizá a Inasa...
— ¡No! – se aceleró Bakugo a responder – es mi trabajo, iré yo. Además, quiero ver cómo sigue Shoto.
— Me lo imaginaba – susurró Izuku – voy a la ducha y me vestiré.
Izuku se incorporó para ponerse en marcha cuando sintió la mano de Bakugo agarrar su muñeca impidiéndole así levantarse del colchón pese a que ya estaba sentado con los pies apoyados en el parqué del suelo. Izuku se giró para saber qué quería el héroe.
— Espera – susurró Katsuki – quiero ir contigo.
Con una sonrisa y una afirmación con su cabeza, alegró a Bakugo al aceptar su propuesta. ¡Novio! Era una palabra que Izuku jamás pensó que usaría pero pensar en ella, aunque le resultaba raro todavía, también le gustaba.
— ¿Por qué sonríes de esa forma tan rara? – preguntó Bakugo.
— Pensaba... en que jamás creí que tendría novio. Me suena muy raro decir esa palabra.
— Es acostumbrarse y si no te acostumbras... dímelo y te lo repetiré mil veces si hace falta para que esa cabecita de nerd acabe por asimilarlo – sonrió Bakugo.
Izuku sonrió antes de terminar de levantarse para ir a la ducha. No quería llegar tarde al trabajo. Bakugo, que captó enseguida aquello, le dejó ir al baño y se dispuso a levantarse también. Quería ver a Shoto y saber su condición ahora que había pasado la noche en el hospital tras la cirugía. Suponía que estaba estable porque nadie le había llamado para decirle nada al respecto. Que no hubiera llamadas era buena señal, por ahora.
El ruido del grifo le hizo levantarse completamente. El apartamento de Izuku era pequeño y sólo tenía un cuarto de baño a mitad del pasillo, pero también era cierto que sólo vivía él y no le hacía falta mucho más. En comparación a su apartamento, Bakugo veía varias diferencias notorias, pero una de ellas era que, aunque más pequeño al suyo, parecía mucho más hogareño. Él apenas estaba por su apartamento y cuando iba, lo hacía para dormir y volver al trabajo. Suspiró, porque no aprovechaba realmente su apartamento por grande que fuera: era frío y aburrido.
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Destiny (Bakugo-Deku)
Hayran KurguTodo inició con un quirk perdido, una victoria de Ground Zero y un estudiante de medicina que estaba en el lugar incorrecto. Cuando Izuku abrió los ojos, Ground Zero caía frente a él. ¿Qué podía hacer él por su héroe favorito? Sin un quirk y sólo di...