One-Shots de Percy Jackson

Nuestro tipo [Malcolm Pace]

¡Buenos días/tardes/noches corazoncitos!, espero que se encuentren bien. Aquí les traigo un nuevo One-Shot de... ¡Malcolm Pace!

Sé que tenía que subir el capítulo el lunes (es decir, mañana), pero estoy en temporada de parciales. Así que, decidí adelantarme un día para luego yo poder estudiar sin interrupciones.

Espero que les guste, y sin más que decir, ¡comencemos!

Datos antes de empezar a leer

* Personajes que aparecen: Inventados por mí.

[TN] Jackson

*Pareja: Malcolm Pace X [TN hombre]

*Cabaña: 3 (Hijo de Poseidón)

Título: Nuestro tipo

Narra [TN] Jackson:

Tuve un sueño. 
O eso creo, al ser semidiós, no sabemos si es un sueño o una profecía. 
En fin, yo creo que fue un sueño. Y era muy lindo. 
Pero me hizo darme cuenta de algo: Me gusta mi mejor amigo

—Tengo un problema —dije asustado mientras llegaba al lado de mi hermano mellizo, Percy Jackson.
—Te escucho... —dijo con la boca llena, estaba devorando unos panqueques azules.
—Me gusta alguien... No perdón, me expresé mal. Estoy enamorado de alguien... —dije completamente sonrojado.
—Era hora hermanito —dijo mientras hacía aparecer un batido de chocolate— ¿Y quién es la afortunada?
—¿Sería un problema... que diga que es un afortunado?

Consejo: Nunca se sienten frente a Percy si está comiendo, y menos si vas a decirle una noticia importante.

Ahora tengo todo su batido de chocolate -más babas y restos de panqueques- en toda la cara.

—Me tomaste por sorpresa... igualmente, eso explicaría muchas cosas... En fin, dame un abrazo —dijo cariñosamente mientras extiende sus brazos.
—No voy a abrazarte aquí.
—Ay, qué poco cariñoso eres. Le voy a decir a mamá que no me querés.
—Pero qué dramático —me levanté del asiento, y me acerqué a él para darle un abrazo—. Con respecto a lo que te estaba diciendo...
—Oh si, el afortunado, continúa.
—¡Hola chicos! —saluda energéticamente Annabeth. Se acerca a Percy y le da un beso en la mejilla, iba a hacer lo mismo conmigo, hasta que me vió todo manchado de malteada.
—Hola Annabeth, no voy a enojarme si no me saludas. El culpable ya podrás deducir quién es...
—Percy, sé más cuidadoso... —le regañó Annabeth mientras tomaba una servilleta y me limpiaba los restos de la cara.
—Gracias cuñadita, eres un ángel. 
—No es nada, y... ¿se puede saber por qué terminaste así?
—[TN] me estaba diciendo que le gusta un chico y... —le hice señas para que se detenga, pero ya era tarde.